Cerro Da Vila- Praia Falesia- Praia Dos Tomates- Praia Do Loco- Praia Falesia Alfamar- Acantilados. Quarteira. Vilamoura.

VILAMOURA

Moderna, animada y sofisticada, Vilamoura ha crecido alrededor del puerto deportivo y, hoy en día, es uno de los mayores destinos de recreo de Europa.

La localidad en sí es un complejo turístico construido a partir de la década de los 70 del siglo XX. Pero los romanos ya conocían esta región, como demuestran las ruinas de Cerro da Vila, conservadas en el museo homónimo, junto a la carretera de acceso a la playa de Falésia.

Excelentes hoteles y urbanizaciones, y campos de golf de prestigio internacional proporcionan una completa oferta a quien desee pasar unos días de descanso a la orilla del mar. El puerto deportivo, el mayor de Portugal con 1.300 atraques, es el principal punto de animación, no solo para los que llegan en barco, sino para todos los que pasan sus vacaciones en esta zona y vienen hasta aquí al caer la tarde o por la noche para saborear un helado o cenar. También es el lugar idóneo para realizar compras, con una gran variedad de tiendas que ofrecen desde artesanía local a las más famosas marcas internacionales. En cuanto a la animación nocturna, no faltan bares y discotecas con los mejores DJ y el Casino de Vilamoura, que nos puede subir la adrenalina al máximo.

Durante el día se pueden practicar numerosas actividades. Tenis, equitación, vela, windsurf, jet-ski, parasailing, paseos en barco, pesca deportiva... la oferta es muy variada, lo difícil será elegir. Y las aguas cálidas y arenas doradas están ahí mismo. Junto al pontón este del puerto deportivo, la playa de Vilamoura con un arenal que se prolonga hasta Quarteira, y del otro lado, al oeste, la playa de Falésia, que se extiende durante kilómetros y no termina hasta Olhos de Água, garantizan mucho espacio para estirar la toalla y broncearse al sol. Sin olvidar unas excelentes condiciones de seguridad y mucha diversión para unos días ensueño a la orilla del mar.

RUINAS ROMANAS DE CERRO DA VILA

Las ruinas romanas de Cerro da Vila son los restos de una villa histórica en la región de Algarve, en el sur de Portugal. Sus vestigios se encuentran en las proximidades de la localidad y del puerto deportivo de Vilamoura, en la parroquia civil de Quarteira, municipio de Loulé.

El área alrededor de Vilamoura, en el que los restos de esta villa romana se pueden encontrar, fue ocupada desde hace miles de años. Tumbas que datan de la Edad del Bronce fueron descubiertas en el municipio de Loulé, en la viña Casão.

Los romanos establecieron el primer asentamiento dentro de la localidad, durante el Siglo II. La región del Algarve cayó bajo el dominio de Roma, bajo el dominio del emperador César Augusto (23 de septiembre 63 aC - 19 de agosto 14 dC).

La región se integró en la provincia de Lusitania, que fue reorganizada en tres en tres civitas: Balsa (Luz de Tavira), Ossonoba (Faro) y Ciuitas, cuya capital era Cilpes (Silves) o Lacobriga (Lagos). Cerro da Vila se encontraba en el territorio de Ossonoba y tenía un puerto, sirviendo las fértiles tierras regadas por una presa que estaba a dos kilómetros de esta ciudad. Después de su construcción, la villa fue periódicamente ocupada por los visigodos y por las fuerzas árabes (moros).

Las ruinas están situadas en una zona semi-rural; la estación arqueológica se encuentra a 1500 metros al oeste de Quarteira. Estas son las ruinas de la villa romana constituida por dos residencias (incluyendo la principal, junto al puerto), baños, necrópolis, presas y estaciones de pescado salado. De las dos residencias y baños, los únicos restos son paredes compartimentadas, incluyendo el impluvium, el atrio y el tablinum. Hay frisos de mármol y ostia pilotes de estuco pintado que decoraban las paredes, así como los restos de pavimentos de mosaicos policromáticos. Dos tanques rectangulares sirven los edificios donde se hacía la salazón del pescado. La necrópolis, que incluye los restos de mausoleos y tumbas, fue construida mucho más tarde (y sólo recientemente fue descubierta e investigada).

MARINA DE VILAMOURA

En los meses de verano, la marina de Vilamoura se convierte en un punto de acceso para las celebridades, especialmente estrellas del deporte que tienen casas vacacionales y propiedades en la zona y van al puerto deportivo a comer algo y pasar el tiempo.

El futbolista portugués Luis Figo tiene un bar en el puerto deportivo y el famoso Cristiano Ronaldo a menudo se lo ve pasear por aquí en verano – ¡y no es difícil ver por qué!

En la marina puedes ver algunos barcos verdaderamente impresionantes, estando calificada con 5 anclas. Es maravilloso observarlos, incluso aunque tu presupuesto no dé para hacerte con uno de ellos! Existe también una buena variedad de cafeterías, bares y restaurantes por el paseo, con una gran oferta de cocina tanto portuguesa como internacional: desde pescados y mariscos hasta restaurantes chinos o hindúes, y todo cumpliendo con altos estándares.

Durante el día y hasta la noche puedes navegar por las muchas tiendas ubicadas a lo largo del puerto deportivo con algo para cada presupuesto, y aquellos que buscan diversión y entretenimiento no se sentirán decepcionados, ya que cuenta con una vida nocturna muy animada y variada, desde bares de piano o música en vivo ¡hasta baile en las mesas!

El puerto deportivo de Vilamoura también es conocido por ser el punto de partida de diferentes excursiones en barco. Si estás buscando pasar un día o medio día en el mar con amigos y familiares, o quieres probar suerte en la pesca deportiva, tu viaje puede comenzar en la marina de Vilamoura. Contacta con nuestro equipo para obtener más información sobre todos los viajes en barco y pesca locales.

El puerto deportivo de Vilamoura ofrece una parte más glamurosa del Algarve y mucho que hacer para toda la familia desde el amanecer hasta las horas más tardías.

RIBEIRA DE QUARTEIRA

El circuito peatonal a lo largo de la Ribeira de Quarteira se encuentra en un lugar de especial belleza paisajística y de gran importancia desde el punto de vista botánico y faunístico, es un espacio perteneciente a la red Natura 2000, que es una red ecológica europea para la conservación de hábitats, flora y fauna de importancia comunitaria, incrustada en un valle con pendientes pronunciadas.
Es una zona de ocupación humana muy antigua, atestiguada por el patrimonio existente, como el castillo , el puente del castillo y los molinos de agua , entre otros restos arqueológicos.


La flora de esta zona es parte del Barrocal del Algarve, siendo bastante rica y especies mayoritariamente arbustivas debido a la regresión del bosque clímax, llamado encinas.
Los árboles de mayor tamaño más habituales son el algarrobo y el olivo, que se encuentran en una especie de bosque donde abundan el verdugo, el acebuche, el lentisco, el madroño y la palmera enana, entre otros.En las zonas más húmedas, a lo largo del arroyo, son comunes especies como fresno, adelfa, caña de azúcar y tamarisco.

En la ribera de la Ribeira de Quarteira existen 5 especies con estatus de protección legal (Decretos-ley nº49/2005 y nº169/2001), 3 especies que solo se encuentran en esta zona del territorio nacional, 27 especies de interés científico y 18 especies de orquídeas.

La fauna en el área del sendero es muy rica, especialmente en lo que respecta a la avifauna. Los mamíferos son más raros y difíciles de encontrar, ya que tienen hábitos nocturnos en su mayoría, existen registros de la presencia de nutrias, comadrejas, la rata murciélago y el erizo. Las aves existen en cantidades mucho mayores, algunas residentes y otras migratorias. La ictiofauna presente en el sitio también es difícil de encontrar, pero abundante. Las principales especies son Lamprea, Bordalo, Anguila y Escalo. También se pueden observar fácilmente algunos anfibios y reptiles.

RESTAURANTE GOMES NA PRAIA

El espacio es muy agradable, la comida excelente. Súper fresco, todo hecho a pedido. El paisaje es fantástico. El personal es super atento y muy amable.

PRAIA DA FALESIA

la playa Falesia Algarve es un trocito del enorme arenal de Falésia localizado en el municipio de Albufeira entre Olhos de Água y Vilamoura. La playa Falesia en el Algarve está considerada no solo como una de las mejores playas del Algarve sino de todo el Planeta según los usuarios de Tripadvisor en una encuesta realizada a principios de 2021. Se localiza dentro de un arenal de unos 6 kilómetros que incluye de oeste a este las siguientes playas: Praia do Barranco das Belharucas, Praia Falésia – Açoteias, Praia da Falésia – Alfamar, Praia da Baixinha-Poente, Praia da Rocha Baixinha y Praia da Rocha Baixinha Nascente.


La playa Falesia en el Algarve es de arena fina y agua cristalina de las que nos gusta catalogar como “made in Algarve”. Entre sus servicios se incluyen seguridad, vigilancia, alquiler de sombrillas, duchas, parking al aire libre, bar/restaurante, etc. No se permite el acceso a perros.

PRAIA DOS TOMATES

onsiderada la playa de moda, debido a las innumerables figuras públicas - de la política al futbol - que la frecuentan durante los meses de verano, la playa «dos Tomates», es punto de referencia del mapa estival portugués. En la playa, la oferta de actividades es grande: se alquilan motos de agua, barcos a pedales y puede dar un paseo en boya y u-tube. El nombre de la playa se debe al hecho de en tiempos de haber existido una plantación de tomates próxima la playa que su productor vendia a lo largo del arenal.


Infraestructuras de Apoyo: Aparcamiento, restaurante, WC, vigilancia en la época estival, alquiler de sombrillas y hamacas, buenas condiciones para la práctica de Windsurf.

PRAIA DO LOCO VELHO

Disfruta de un refrescante baño en el atlántico y descubre los vestigios de civilizaciones pasadas junto a esta tranquila playa del municipio de Loulé, el Algarve.

El camino hacia la Playa de Loulé Viejo (Praia do Loulé Velho) recorre un valle rural donde obserbarás la antigua maquinaria hidráulica como acueductos y norias, así como grandes campos agrícolas y árboles centenarios, alrededor de los cuales vuelan especies interesantes como los rabilargos y las abubillas.

La zona Este de la playa, antiguamente conocido como Playa do Trafal, presenta dunas y un arenal amplio y extenso; mientras que en el Oeste se presenta un arenal más estrecho, acompañado por peñascos rojizos que llegan hasta el mar. Aquí, cuando el mar se lleva la arena, deja al descubierto antiguos tanques de salazón de pescado de la época romana, así como el lodo de un antiguo estuario lacustre y otros vestigios de una época en la que el nivel del mar estaba mucho más lejos. En este lugar incluso existen sumergidas las ruinas de una antigua población pesquera cartaginesa.

PRAIA DA FALÉSIA ALFAMAR

Teniendo como telón de fondo el extenso acantilado que se tiñe de tonos rojizos, cobrizos o dorados y alcanza su momento álgido de belleza al atardecer, el inmenso arenal que se extiende a lo largo de varios kilómetros entre Olhos de Água y Vilamoura, posee diversas áreas concesionadas.

La zona denominada Playa de Falésia o de Açoteias (nombre que debe al complejo turístico de los alrededores) queda en el centro y es una playa con un mar tranquilo, con buenos accesos por carretera alquitranada y que ofrece un abanico de deportes náuticos, como actividades de ocio para los veraneantes.

ACANTILADOS

El arenal es inmenso, ya que alcanza unos 6 kilómetros de extensión, y se encuentra flanqueado por una línea de acantilados altos de tonos fuertes —rojos y blancuzcos— que crean constantes juegos de color con las manchas verdes de pinos.

En el tramo oeste, el acantilado es alto y muy blando, ya que está formado por arena y arcilla, por lo que la lluvia crea con facilidad relieves sinuosos con grietas profundas. Hacia el este, el acantilado se va rebajando lentamente, pero sigue estando muy esculpido. El desgaste de esta roca es lo que alimenta arenal, suministrando arena a la playa.

En la base del acantilado se pueden observar pequeños conos de arena sobre los que se fijan las plantas típicas de las dunas: nardo marítimo, berza marina, clavelina de mar, loto y cardo marino. Estas especies coloridas se mezclan con la vegetación típica de los acantilados, de color más monótono, aquí compuesta sobre todo por orgazas.

El arenal tiene tramos muy tranquilos: basta con caminar un poco. Como existe la posibilidad de que se produzcan corrimientos de tierras, se recomienda mantener una distancia de seguridad con respecto al acantilado.

No es habitual llegar a una playa y encontrar no solo arena y mar, sino un auténtico espectáculo de acantilados con vetas de tierra roja, anaranjada, marrón y blanca, coronado por un pinar desde el que se pueden admirar unas vistas únicas. Esto ocurre en la Playa de Falesia, un extenso arenal que discurre a lo largo de ocho kilómetros, entre Olhos de Água y Vilamoura, dejando a un lado el océano y al otro una pared de singular piedra erosionada por las olas, el viento, el sol, la lluvia y el paso del tiempo. Las sinuosas formas que dibuja el acantilado podrían recordar a más de uno el Gran Cañón del Colorado. Quizás por esa combinación inaudita entre el azul turquesa del mar, la arena blanca, el verde de los pinos y el rojo de los acantilados ha conseguido arrancar suspiros entre las personas que la visitan.