2015-09-04 2x1- 1º Infiesto-Alto la Llama y 2º Arriondas-Covadonga (33+34 Km)

Llevamos varios días esperando por el buen tiempo, para hacer una ruta por infiesto que nos deje en casa Maruja para comer, como no llegaba y parecía que hoy no llovería (al menos en Gijón) nos fuimos a Infiesto.
En Infiesto llovía fuertemente y no tenia pinta de parar así que decidimos que el objetivo de la ruta que era comer en casa Maruja en la Marea debía de permanecer y no así la ruta prevista, el tiempo no lo permitía, pero... debíamos ganarnos la misma.

Ruta realizada íntegramente por asfalto, salimos de Infiesto por los pueblos de San Román, Miyares, Borines, hasta llegar al alto la llama, todo este tramo llueve, la niebla no permite ver grandes cosas, si bien las casonas y casas asturianas aun con mal tiempo lucen espléndidas. La subida no es excesivamente exigente, son 8 kilómetros de ascenso continuo. Compartimos en sentido inverso algún tramo de la ruta Gijón Covadonga. Coronado el alto la Llama, el tiempo amaina aunque no permite gran visibilidad, la carreta sin trafico, bordeada por arboles, con sol totalmente sombría, es un mirados sobre los picos de Europa pero precisamente hoy no. Vamos entre Árboles cuando un Ferre porta un gato entre sus garras y cae con el delante de nosotros, huye dejando el gato destrozado con las tripas al aire, todo un "hombre y la tierra" de Félix Rodríguez (ya tengo mis años). El Ferre espera sobre una rama a que nos vayamos. El camino hasta Infiesto es un descenso continuo con muy poca pendiente que obliga a dar pedales de continuo, conectamos con la nacional y en un par de kilómetros estamos en Infiesto junto al coche, lloviendo. Decidimos subirnos al coche e ir a comer a la Marea. Nos secamos, para ello utilizamos periódicos. Comemos fenomenalmente, pote, jabalí, Cabrales, tarta de avellana, café. Todo estupendo. Regresamos a Infiesto y nos detenemos en la Virgen de la Cueva, es pronto, como completamos la ruta. Nos trasladamos a Arriondas, aparcamos, sacamos las bicis y nos hacemos todo por asfalto hasta Covadonga, regresamos por la senda creada recientemente que va por la parte de atrás de la montaña y nos deja en Moñigo, volvemos al coche por donde vinimos y damos concluido un día atípico que ha servido para rodar y comer en casa Maruja.
La califico como ciclo-turismo ya que la finalidad fue comer y pasar el día rodando.
No tengo fotos, la lluvia apago el móvil, había buenos paisajes con la niebla en el fondo del valle y buenos rincones y casonas.