Lebrancón - Beteta

Continuamos nuestro viaje de varios días en bici por las Montañas Vacías. Nos despertamos en el refugio donde hicimos noche en la ribera del Tajo, y ... la verdad que se nos pegaron las sabanas porque después de azuzar la chimenea al alba por el frío que hacia nos quedamos un ratito mas en el saco aprovechando el calor del fuego.

Pero finalmente nos ponemos en marcha, y vamos ya a completar nuestro paso por el Camino Natural del Tajo, y dirigirnos ya a la sierra. Primera parada Zaorejas, pero en el camino se nos presentan paisajes preciosos donde las aguas del Tajo que nos tientan, hasta que en el camino vemos un acceso a una poza que ya no podemos rechazar, y finalmente acontece en inevitable baño. Baño muy rápido, por que el agua esta helada!! Pero baño a fin de cuentas...

Y por fin sí... parece que nos ponemos en marcha, para concluir el tramo por la ribera del Tajo. Ya al final del camino del Tajo reflexionamos viendo sus aguas y llegamos a la conclusión de que esta es una zona que se ha de visitar y que es perfecta para hacerlo en bici, ya sea en ruta de un día como en un viaje de varios.

Y por fin nos despedimos del Tajo en el puente de San Pedro y nos vamos en dirección a Zaorejas ya por carretera, un tramo de subida casi sin pendiente, en el que agradecemos rodar en asfalto de nuevo. Y tras comer en Zaorejas seguimos en dirección a Beteta, donde tenemos intención de hacer noche y aprovisionarnos de comida para los siguientes días.

De Zarejas salimos por carretera para hacer un tramo rápido y poder así visitar la sima de Alcorón. Y definitivamente merece la pena ir con tiempo para poderla visitar. A la Sima se accede por una interminable bajada de escaleras desde su abertura superior. Finalmente llegamos al fondo donde encontramos una pequeña acequia que recoge el agua que se filtra por la roca desde la superficie dejando unas formaciones preciosas en el proceso.

El resto del camino a Beteta lo recorremos por los pinares de la sierra, todo por pistas que se entrecruzan formando una especie de laberinto de caminos, por lo que en esta zona es muy recomendable ir consultando el GPS. En estos pinares esta el Refugio de Valsalobre, que esta en muy buenas condiciones, y que de no ser temprano hubiésemos aprovechado para pasar la noche, pero vamos escasos de comida y tenemos que llegar a Beteta, así que continuamos por las pistas.

Tras un tramo final de bajada por pista que nos lleva al pueblo de Valsalobre, ya sólo nos queda un último tramo de carretera que recorremos con las últimas luces del día, para llegar justos de tiempo para comprar algo en la gasolinera del pueblo antes de que cierre. Eso sí, no tenemos muy claro como vamos a hacer noche...

Os dejamos un enlace a un vídeo con más detalles: