Travesía Benetússer-Lorca 42 La Puebla de Don Fadrique-El Morrón de Los Lobos (el Calar)

Segunda parte de la etapa de hoy.
Los 12 primeros kilómetros concentran el 80% del desnivel de la ruta, pasando de los 1152m a los que se encuentra el albergue hasta los 1807m del Morrón.
Saliendo del albergue, los primeros 500m son facilones, pero a partir de aquí, aún en las calles de La Puebla, se va endureciendo el camino. Así en los próximos 2km superaremos un desnivel de 150m, con alguna rampa de consideración, Por suerte el suelo ayuda a superar el desnivel.
Continuamos subiendo pero ya con un desnivel más relajado, rodeados de almendros y con el Morrón vigilándonos, completando la primera ascensión de la ruta.
Un corto y brusco descenso nos encamina a la pista en la que empieza realmente la subida al Calar de La Puebla. La subida es dura, pues la pendiente media es del 9% (450m de desnivel en 5km), encontrando una primera parte donde salvaremos en 3km, 150m de desnivel (5% de pendiente); a continuación el tramo más duro con una pendiente casi continuada del 13% durante 2300m, de esas que te minan la moral pues es una gigantesca curva que vas viendo continuamente. El último kilómetro, ya en el Calar es casi plano.
Por suerte la pista está en muy buen estado, facilitando la trazada para mantener el equilibrio en las duras cuestas.
Las vistas desde el Calar de La Puebla son espectaculares, con una panorámica de 360º que me muestra la Sierra de Moratalla, la Sierra de Las Cabras, La Sierra de Segura, el imponente pico de La Sagra, la meseta de Huéscar, la Sierra de María y la enorme extensión de terreno cultivado que separa La Puebla de ésta. Y como no, la Puebla de Don Fadrique bajo El Calar.
Toca bajar y hay que extremar la precaución ya que la mezcla de pendiente pronunciada y la presencia de gravilla, en las curvas, no son buenas compañeras de viaje. El descenso espectacular, confirmando aquello de que te das cuenta de la dureza de una cuesta, cuando bajarla asusta. Sólo 11 minutos costó liquidar lo que poco antes consumió una hora de tiempo.
La bajada continúa cuatro kilómetros más, con la misma pendiente y terreno, a buscar el camino de Huéscar a la ermita de Las Santas.
Por fin un tramo tranquilo donde disfrutar del paisaje que me rodea, pues hasta ahora sólo había visto tierra mientras subía y pinos que pasaban a una velocidad de vértigo, mientras bajaba. Pedaleo por un camino asfaltado remontando el río de Las Santas o Bravatas, cambiando los pinos por una inmensa chopera. Son tres kilómetros de disfrute escuchando el agua correr protegido por las altas copas de los viejos chopos que me rodean.
Se acaba la tranquilidad para acometer la subida a la Ermita de Las Santas, con 1300m al 6%. Breve parada para probar el agua de la fuente y regreso hacia La Puebla.
Poco tiempo de relax, pues nada más cruzar el río empieza una subida de 4km para superar 150m de desnivel, pero que hasta llegar al cortijo de Doña Elvira hay un tramo, continuado, de 1400m al 6% que molesta bastante.
Parada obligatoria en el Cortijo de Doña Elvira para contemplar, con tristeza, la ruina que queda del lugar donde pasé tan buenos años en mi infancia. Me voy con bastante morriña.
Continúo subiendo aunque más suavemente, hasta dejar el asfalto para coger una pista rota y pedregosa donde doy rienda suelta a la fiera y la JAMIS y yo disfrutamos de aquella bajada, sin lastre, descargando la tensión acumulada durante tantas horas de pedaleo, obligatoriamente, tranquilo.
Al llegar al camino me di cuenta de lo cortos que se me habían hecho esos dos kilómetros. Pero a estas alturas ya estaba pensando en otras cosas: lo bien que sientan unas cervecitas acompañadas de sus tapitas.
Cinco kilómetros de asfalto me separaban del final de la ruta. Además cuesta abajo hasta la entrada de La Puebla, donde me di una vueltecita a buscar la casa de mis abuelos, y claro estaba en la parte alta del pueblo. Pero bueno, así tuve otro rato de disfrute bajando por las estrechas calles hasta llegar a la plaza, donde, me esperaba la misma mesa y la silla que había ocupado por la mañana.
Había terminado el día con 80 kilómetros y 1880m de desnivel, repartidos casi a partes iguales en los dos trayectos.
Alojamiento
Albergue municipal
Alojamieneto 14€
Maite (Tfn.: 699 111 484).
Amplio local con pequeño salón de estar. Cama cómoda. Sitio tranquilo para descansar a unos 500m del centro del pueblo, pero rodeado de viviendas unifamiliares, con panadería y supermercado cerca. El único pero, que no creo que estando bastante ocupado las duchas y los servicios den abasto. Agradezco el trato recibido por parte de Maite, la encargada del albergue.