Descenso Barranco de Trevelez. P. Nac. de Sierra Nevada. Orgiva

Espectacular Descenso del Rey de los barrancos de Andalucía el Barranco de TREVELEZ.
Una vez realizada la fuerte subida de aproximación llegamos a una zona limpia de roca donde podemos cambiarnos, ya divisamos las primera reunión de unos 6 metros, que nos deja en el rappel de 28 metros y una vez en el cauce lo primero que vemos en un pasamanos de 20 metros con un rappel de 8. A continuación otro pasamanos de 8 y rappel de 8 metros. Un rappel de 5 metros y el barranco se abre ostensiblemente.
A continuación llegamos a un rappel de 16 metros. A partir de ahí se entra en un pasillo sin escape alguno, por lo que si alguien opta por salir debe hacerlo antes de este rappel. La salida es por la derecha del cauce a través del Barranco de la Sangre hasta la carretera. Es un escape muy comprometido por su verticalidad y desnivel a superar.
Pasado este rappel de 16 metros se entra en la zona más bonita: un pasillo estrecho con una sucesión de rappeles. Dentro de este pasillo es donde se encuentran los meneos de agua más grandes, algunos de ellos extremadamente peligrosos. Rappeles de 5, 4, 7, 17, 9, 8, 15, 15, y 11 metros.
Antes de llegar al final una montañita de piedras en el lado derecho del cauce nos indica la salida hacia el Poqueira donde pasada la Central hay una magnífica poza de agua cristalina para darnos un baño y hacer la colada.
Subir a la central y coger un sendero que sale a la izquierda junto a una puerta metálica y siguiendo el cauce del río nos lleva rodeando la montaña al sitio donde dejamos el coche. Desde ese sendero puede contemplarse a nuestra izquierda las aguas amarillentas del río Trevelez.
A finales de verano en un año normal de lluvias el descenso es muy complicado solo para gente muy experta y con buena condición física.
En invierno y en época de deshielo es un descenso impracticable.
Abstenerse si ha llovido recientemente o hay peligro de tormentas.
Requiere el conocimiento de técnicas específicas para grandes caudales, rappel guiado, desviaciones, etc, movimientos de aguas vivas: rebufos, lavadoras, drossages, rápidos, etc...
En cualquier caso estos son los factores que hacen peligroso este descenso:
- Agua muy turbia: a 10 centímetros no se ve nada, absolutamente nada. Ello hace que la progresión por el cauce sea un constante golpeteo con rocas ocultas, especialmente en las espinillas y rodillas. Aconsejable llevar espinilleras de fútbol. Por supuesto hacer saltos es imposible salvo que se registre previamente el mismo (pero a veces la corriente es tan fuerte que te impide hacerlo)
- Todo resbala un montón. A la pizarra mojada que ya de por si resbala hay que añadir una superresbaladiza pátina de oxido de hierro que le da ese fantástico color al agua y las paredes.
- Accesos: la subida al collado ya te deja calentito pero el postre es la bajada al cauce. El barranco es largo: a la hora y pico del acceso hay que añadir unas cinco horas de descenso del cañón. A la fatiga normal de un descenso hay que añadir la dificultosa progresión, los golpes en las espinillas y la tensión sobreañadida de evitar los resbalones.
- Caudal del río: el caudal es permanente y muy alto. Hay de todo: rebufos, lavadoras, drossages, rápidos etc...Cuando ves hasta donde llega el agua en las crecidas y tratas de imaginarte el barranco en ese momento se te ponen los pelos de escarpias.
- Escapes: pasado el Barranco de la Sangre se entra en un estrecho pasillo sin escape posible. A partir de ahí todo hacia adelante, además hay pocos sitios donde refugiarte si tienes que quedarte a dormir.
En años extraordinariamente secos, el nivel de dificultad baja sensiblemente pero sigue siendo un barranco muy complicado y para gente con experiencia.
Equipo:
Una cuerda de 20 metros y 3 o 4 de 30 metros por si se pierde alguna. Al equipo clásico de neopreno, casco etc... añadir unas espinilleras de fútbol.