Barcelona-Sant Pol-Collsacreu-Carretera de Mata-Mataró-Barcelona

Tras la tormenta de barro que había caído un par de días antes y el vendaval del día anterior, el ambiente estaba limpio como una patena y el día era claro como agua de manantial, así que madrugón y hacia Sant Pol de Mar, para enganchar la subida del Collsacreu. Preciosa subida donde el último tramo, viene a ser durillo aunque con apariencia de más duro. Nos adelantan un grupo de ciclistas entre los que van un par de triatletas enganchados a uno de esos coches sin carnet, el grupo de ellos se deshace en mil pedazos y los más osados se plantean seguirles el ritmo, nos adelantan casi todos. Mi compañero no mueve ni una ceja, y yo apretó un poco, tan solo un poco la marcha, y le digo "si seguimos a este ritmo, algunos de ellos caerán como moscas", efectivamente, la ceguera no les dejó ver más allá y reventaron, lógico, mucho ritmo el que llevaban los triatletas.
Llegados a la cima del Collsacreu nos damos la vuelta para tomar una de las sorpresas (yo no la conocía); la carretera de Mata. Esto es una preciosa carretera que va de Arenys de Munt a Mataró, por la parte alta y siempre viendo la costa desde arriba. Impresionante. Una serie de toboganes rompepiernas con escaso tráfico, y para redondear la jornada, al poco de empezar este tramo de mas o menos 24km, nos cruza a unos escasos 20mts por delante de nosotros un cervatillo que nos deja absolutamente flipados, no se que hacía allí el animal, ni si es que por esa zona abundan los ciervos, realmente es muy montañosa y boscosa, pero es muy sorprendente ver estos animales por una zona tan costera. Sorprendente y emocionante. Llegados a Mataró llanear hasta Barcelona con algo de viento de cara sin ser excesivo.
Fantástica ruta.
Siguen los buenos entrenos.
4 horitas 25km/h