Castell Lujar Puntalon Calahonda

Ruta circular desde Castell de Ferro pasando por el cerro del Conjuro.
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La Sierra de Lújar es un enclave montañoso compuesto por grandes masas calcáreas y silíceas, y situado en el interior de la Cordillera Bética, limita al norte y al oeste con el río Guadalfeo, al este con la Sierra de la Contraviesa y al sur con el litoral mediterráneo. Consta de dieciocho mil hectáreas aproximadamente y llega a alcanzar 1836 metros de altitud. De dicha cordillera de gran elevación se desprenden tres ramales, entre los que destaca la sierra de Juviley. Está formada por profundas gargantas, despeñaderos, sucesiones de montes, lomas y pequeñas mesetas. La sierra es muy árida, más áspera y quebrada por la parte que mira al sur. Debido a su estructura y a su masa, es una sierra escasa de agua, aún así y gracias a las nieves que acumula durante el invierno se encuentran abundantes manantiales por la zona de Velez de Benaudalla y pequeños nacimientos de agua por el resto de la sierra. Debido a su aridez la vegetación arbólea no es muy abundante, pese a ello podemos observar en ella pequeños bosques de chaparros, encinas y pinos.

Comprende los municipios de Lújar, Gualchos-Castell de Ferro y parte de los de Motril, Velez de Benaudalla, Órgiva y Torvizcón. En el litoral se encuentran los pueblos de Motril, Torrenueva, Carchuna, Calahonda y Castell de Ferro, más al interior se hallan Gualchos, Jolúcar, Lagos, Lújar y Rubite y hacia el este se localizan pueblos más pequeños pero no menos interesantes, como Olías y Fregenite.

Dichos municipios están intentando que se declare parque natural, entre otros argumentos destaca el del representante de la Asociación Buxus que explica “esta sierra costera es única en su clase y cuenta con sobrados valores medioambientales para conseguir la declaración, albergar un ecosistema muy rico con flora endémica como el romero blanco y especies emblemáticas como el águila real y la perdicera, además de otras como la cabra montes y una gran riqueza de reptiles y anfibios” . Dispone además de cientos de kilómetros de galerías mineras que se podrían acondicionar para la visita pública, convirtiéndose en un reclamo turístico beneficiando a los pueblos del interior que se están quedando despoblados.

Dispone también de hermosos y variados senderos tanto para andantes como para ciclistas y moteros del enduro. Muy conocido es el descenso/subida ciclista de Lújar-Tablones, que es uno de los circuitos nacionales de clasificación del climbbybike.

Por último, decir que he tenido la suerte de poder realizar dos rutas de senderismo en esta maravillosa sierra, Gualchos-Jolucar y Lújar-Lagos. La primera la hice en primavera, debido a las lluvias y a la estación del año el campo estaba verde y florecido, fue hermoso pasear entre la bolina, el romero blanco y la lavanda florecidas, fue una mezcla de sensaciones: aire puro, aromas y colores intensos… Con respecto a la segunda, me impresionó lo cerca que estábamos de la cima de la sierra, miras a un lado y ves Lújar, Castell de Ferro con sus invernaderos y el mar al fondo, al otro lado se divisa Lagos, Motril y su puerto.