Oria-Lorca por Cabezo de La Jara

... Y vuelta por La Parroquia, Vélez Rubio y Chirivel.

También podría haberse llamado "A Lorca por el bar de Pepe", pues la ruta fue tal que así:

Por el Barranco de Quiles al Margen, así que hay que pasar por un tramo de tierra de un km pero que no presenta especial dificultad.

El Margen-Cerricos-El Saliente y bajada para tomar el desvío a Bancalejo: asfalto gastado y rugoso que mejora solo un poco al aproximarnos al cruce con la carretera que viene de Taberno.
Tomamos a la izquierda en dirección Tonosa, pero antes de llegar a su altura dejamos la carretera para tomar ahora a la derecha un camino asfaltado que nos dejará en la carretera del puerto de Santa María de Nieva, por la zona del parque eólico, llamado Camino del Preciso y que nos ofrece seguramente el tramo más bonito de la ruta: carretera estrecha con buen asfalto sin tráfico y solo con algún que otro reguero de tierrecilla suelta. Paisaje de capas onduladas dominado por encinas (si obviamos los aerogeneradores) que amablemente nos dejará a unos metros de la cima del puerto, donde vemos a una pareja ciclista echándose fotos junto a la señal informativa de sus 1085m.

Lo bajamos pues con un suspiro de envidia, y también con la atención puesta en el desvío hacia Los Gázquez que tomaremos, pasados unos pocos kms. Pero no bajaremos hasta esa barriada, sino que continuaremos por el camino principal que ahora se llama "Carretera de Las Cumbres", y que parece acercarnos al Cabezo de la Jara (1245m), pero que ya en tramo de bajada lo dejaremos a la derecha para adentrarnos en el pinar donde se esconde un observatorio astronómico y un albergue juvenil (este más visible y publicitado).

A partir de aquí nos queda un curveo en bajada hasta llegar a Puerto Lumbreras para ir buscando su salida dirección a Lorca, que haremos por el llamado "Camino viejo", que nos ofrece como esperábamos un tráfico escaso.

Paso por Lorca con, admitámoslo, cierta ansiedad por enfilar la MU-701 que nos lleve de regreso por La Parroquia hasta Vélez Rubio. Lo suyo hubiera sido un café y una visita a su fortaleza medieval, pero la hora de llegada en el recuerdo pesa. Nota mental: si las prisas hacen que la ruta no se enriquezca, la ruta no merece la pena.

MU-701 conocida de antes (en sentido contrario), por lo que observamos con satisfacción la vegetación de la cuenca del río Corneros (cultivos incluidos); también que la sierra de la Torrecilla sigue ahí a la izquierda mientras que enfrente y hacia la derecha se muestran rotundas las del Gigante y Pericay. Y por supuesto, el castillo de Xiquena allá como en una isleta.

Carretera en suave ascenso con alguna que otra cuesta y apenas tráfico, así hasta que el paso por El Jardín mejora el asfalto y, conforme nos acercamos a Vélez Rubio, el ambiente como que se refresca. Me gustan esos primeros kms de Al-8104, con casas de campo aquí y allí y el Maimón decorando el horizonte mientras sostiene a diferentes alturas los dos municipios de Vélez Rubio y Vélez Blanco (este con el extra de su castillo).

Ya solo queda el regreso por la vía de servicio y sus dichosos toboganes hasta Chirivel, y de ahí a Oria.