Sierra de Los Filabres. (Velefique y Calar Alto)

REALIZADA EL 17/10/21

Almería no es conocida por ser rica en montañas precisamente, pero sí que las tiene, siendo la más importante, la Sierra de Los Filabres con su cima más alta en Calar Alto, a 2.168 m.
la provincia es un territorio extraordinario para la práctica del ciclismo. Bastó que la Vuelta Ciclista a España llegara a Calar Alto en 2004, 2006 y 2009 para que esta subida forme ya parte de la mitología de las grandes ascensiones europeas (D Friebe, P Goding. Ascensiones míticas: 50 puertos de leyenda que deberías coronar. Editorial Lunwerg, 2012). Calar Alto es el punto más alto de la Sierra de los Filabres desde donde se contempla una inmensa perspectiva: La sierra de Cazorla al noroeste, el litoral desde Cabo de Gata hasta Roquetas al sur y Sierra Nevada al suroeste.
Desde el Restaurante Montellano de Gergal, con una temperatura más bien fresquita y con un cielo algo nublado, damos inicio a lo que va a ser un gran día, y a fe, que lo ha sido.

Destacar, que cuando la parte más importante de este recorrido ha sido en más de una ocasión escenario de etapas de La Vuelta Ciclista a España, es por algo y sobran las palabras.

El desnivel acumulado de por sí, dice lo exigente que es, pero además de ello, es la belleza que atesora la Sierra de los Filabres y Calar Alto.

Otra faceta importante a comentar, es la ausencia de vehiculos y la calidad del asfalto que salvo el tramo inicial y la parte final de bajada a Aulago es fantástico.

El recorrido, es conocido como: La MARTINEZ OLIVER, o LAS CUATRO CIMAS. En nuestro caso han sido solo tres, pero aún así, corta no se queda.
La subida que aquí presentamos, la realizada por Velefique, coronando el Alto del mismo nombre, no tiene rampas de desniveles brutales. Pero si dos características notables: 1) Una cuesta continúa sin descanso de 13 km. Con porcentajes entre el 9 y 7 %, con una media del 8 %. Una vez coronado el Alto de Velefique a 1.860 msnm. iniciamos una gran bajada hacia el pueblo de Bacares: 2)

A partir de esta localidad, comienza una subida agobiante hasta coronar el Collado del Ramal, y terminar en el desvio del observatorio de Calar Alto, a 2000 msnm. El silencio absoluto unido a la reconfortante soledad del paraje y el entorno que lo rodea, es encantador. A todo esto hay que comentar que el estado del asfalto es excepcional, acompañado de la ausencia de tráfico, lo hace más mágico aún. Apenas nos cruzamos con diez vehículos en toda la jornada.

El recorrido está ahí en lo que al ciclismo se refiere, para disfrutar de él (también para penar y sufrir, todo sea dicho) donde Calar Alto es un magnífico ejemplo más entre los muchos posibles. Las montañas están ahí, esperando...
Como siempre, excelente día de ciclismo y como no podía ser menos, en ¡¡EXCELENTE!! compañía.