Berga - Empuriabrava

Ruta que en este caso hicimos dos compañeros de batalla con nuestras respectivas mujeres, lo cual fue una experiencia sin precedente y que repetiremos sin ninguna duda.
Salimos de Berga y el primer día hacemos un total de 92km con unos 1.600m d+, hay que prever un bocata para almorzar y mucha agua si es que se hace en época de calor. Otra opción es llegar hasta el kilómetro 27 donde encontraremos el camping Puigcercós para almorzar o, si ya se ha hecho, para refrescarse.
Pasado este punto hay unas buenas “pozas” para remojarse si se antoja.
De aquí hasta Ripoll seguimos en ruta con tramos muy chulos rodando por pistas en buen estado.
Comemos en la Brasería El Moli muy bien y a un precio razonable, muy recomendable:
Braseria Grill El Molí
Teléfono: +34972703206
https://goo.gl/maps/msawFVkSqxD6pz2y6
Ya dirección a Olot, donde dormimos en un lugar precioso, nos encontraremos con el puerto de Santigosa que se hace todo por asfalto, que después de todo el día comiendo piedras tampoco viene mal y, una fuerte y larga bajada por pista la cual, en los últimos metros se complica un poco en este caso para las mujeres, zona que marcaría como moderada aunque no daré esta calificación a la ruta, marcándola como dificultad técnica fácil teniendo en cuenta que esta zona en concreto estaría exenta de tal calificación, pero que nadie se asuste, es como siempre digo, un peaje.
Al final, llegamos al hotel:
Hotel Can Blanc
Persona de contacto: Gladis
Telf. 972276020
https://goo.gl/maps/Hf3gy7eHZdJwW6197
Para la cena, tienen una colaboración con el restaurante La Deu que se encuentra a 150m del hotel, al cual se puede acceder desde los jardines del mismo hotel y que también es altamente recomendable:
https://goo.gl/maps/tavRSZt43eA14eAF6
Ya el segundo día, nos espera una etapa de unos 80km y algo más de 600m d+
Seguimos para Empuriabrava pasando por pueblos como Castellfollit de la Roca, pueblo que visto desde fuera asusta porque queda colgado de una gran roca, pasmos por los jardines d’Argelaguer, Besalú, donde paramos a almorzar, pueblo con un encanto especial por su toque de la época medieval, dando a la segunda jornada un toque mas turístico y menos exigente que la primera.
Seguimos pasando por pueblos como Espinavassa donde podremos rellenar los bidones de agua, Ordis donde nos comimos dos helados seguidos y finalmente, fin de ruta con un merecido chapuzón en las aguas bravas de la costa.
DESDE ESTAS LINEAS, APLAUDIMOS EN MAYUSCULAS EL ESFUERZO Y SOBRE TODO LA ACTITUD DE LAS CHICAS QUE SE PORTARON COMO DOS AUTÉNCIAS CAMPEONAS.
Espero que os guste si decidís “tiraros al toro”