La Veiciel.la y el cordal de Santamarta

Salida y Llegada: La Plaza (Teverga)
Modalidad: Montaña
Distancia: 26km
Desnivel: +1000m
Tuiza - San L.laurienzu - La Veiciel.la - Campos

Es imposible que Las Navariegas te deje con sabor a poco, pero seguro que te da ganas de más. por eso volvemos a pedalear por Teverga en busca de descensos infinitos y btt auténtico. Subiremos a La Veiciel.la (tambien escrito La Veiciecha) y descenderemos a través del cordal de Santa Marta, que separa los valles teberganos de Valdecarzana y Valdesantianes.

Nuestras pedaladas comienzan en La Plaza, en un amplio aparcamiento y con todo tipo de servicios al lado, en Samartín. Esta vez rodamos con asistencia eléctrica. Podríamos empezar por caminos, pero nos reservamos y tomamos la carretera hacia Somiedo, hacia el Puertu San L.laurienzu, por la que rodamos durante varios kilómetros hasta pasar Vil.lanueva y tomar un desvío a la izquierda, hacia El Ponticu.

Importante saber que podríamos continuar por la carretera hasta el alto si no estamos dispuestos a la posibilidad de tener que empujar la bicicleta en algún tramo. Si lo estamos, disfrutaremos del camino antiguo por el que los pastores subían a las brañas de El Rebel.lón y de Tuiza, hacia la que nos encaminamos.

El viejo camino discurre paralelo al río ganando altura poco a poco. Esta escasa pendiente es al mismo tiempo la que nos crea algunos problemas, en forma de bancos de barro en los que debemos estrujarnos a fondo para superarlos sin hincar el pie en el barro. La humedad acaba cuando en una curva a la izquierda empezamos a tomar gran pendiente a través de un camino lleno de piedra suelta. El color de la piedra parece ser indicativo del grado de dificultad técnica de la pista, negra. Llegamos a Tuíza.

Al pie de la carretera se encuentra la braña de Tuíza, vía de entrada a las brañas de El Rebel.lón o L.lamaraxil. Tomamos la carretera para llegar al paso de San L.laurienzu (San Lorenzo en La Vuelta). Allí, enla frontera con el conceyu de Somiedu, tomamos la pista a la derecha que nos lleva al punto más alto de nuestra ruta, 1400m, para atravesar una húmeda campera cruzada por varios regatos y encaminarnos hacia la braña de La Veiciel.la.

Afrontamos el tramo más complicado de toda la ruta, una zona escalonada arcillosa que da paso a una auténtica pared de piedra en la que lo más prudente es bajar de la bici y utilizar bien los frenos para apoyarnos con firmeza sobre las piedras húmedas. La pradera de La Veiciel.la nos sorprende con la ágil carrera de un grupo de corzos mientras más abajo unas vacas nos indican el camino a seguir, entre los árboles.

Comenzamos una sucesión de subebajas emocionales, disfrutando de nuestra atención plena en algún tramo técnico hasta posar el pie en algún barrizal, deleitando nuestra vista atravesando la alfombra otoñal que nos regala el fayéu hasta parar a apartar unos árboles caídos, sintiendo la amplitud de la montaña mientras recorremos un sendero singletrack a media ladera hasta volver a meterse en la inmensidad del bosque. Merece la pena.

Cruzando la línea imaginaria de los 1000m de altura el paisaje cambia y el uso del terreno también, el camino empieza a estar rodeado de prados salpicados con cabañas, y los trol.leiros que aparecen, barrizales, nos obligan a aumentar la potencia de la ebike aunque el perfil sea descendente. Es emocionante cruzar cada tramo embarrado y los gritos se complementan con suspiros de alivio y alguna risotada. Te vas a manchar.

Pudiendo tomar el acceso a La Torre optamos por continuar hacia Campos por similar terreno para desde allí bajar plácidamente por la carretera de vuelta a La Plaza.

La sensación al acabar es extraña, nos encontramos ante una gran ruta de mountainbike, muy peleona. Quizás un poco de arreglo en algún tramo nos daría más sensación de «flow». Pero merece la pena, nuestro deporte es así, verdad?

¿Vienes?
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