Monte Calvario-Baterías de Aguilones y Conejos-Complejo Minero de La Parreta. Anthercas

Accesos desde la Autovía Murcia-Cartagena A-30, Salida 192 y N-332, aparco en la explanada al salir de la 2ª rotonda (37°36'27.76"N 0°57'31.91"W).

Cruzo la carretera para iniciar un sendero paralelo a la entrada pistera, pasa bajo las vías del ferrocarril, giro a la derecha y continuo recto en el cruce bordeando las vías del FEVE que me pasa raspando; cruzo un ramblizo bordeando el Cabezo de Marcelino y pedaleo paralelo al Hospital General Universitario de Santa Lucía.

En el cruce, dejo la pista principal a favor de otra escombrera y matorralera, cruzo el Barranco de Feo/Orfeo y giro a la izquierda, enfrente del antiguo Cementerio de los Ingleses, hacia las ruinas de la Casa de los Cuernos, donde tomar por la derecha atravesando la Barriada de Santiago (Lo Campano).

Continuo por la carretera RM-F46 correspondiente a la Colada de Quitapellejos, giro por la izquierda a la altura de un antiguo depósito de aguas, cruzo el puente con la vista puesta en el Monte Calvario; desde la Casa de Los Pacos parten unas Estaciones del Vía Crucis, jalonan el duro ascenso por este sendero procesional semejante al verdadero Calvario en Jerusalén.

Continuo con mi pedaleo, torciendo en el cruce y elevándome sobre el Cementerio de Los Remedios; en la curva cerrada, donde aumenta la pendiente, sorprendo a dos jóvenes zorros; este tramo se hace algo pesado y duro aunque es relativamente corto; alcanzo la entrada verjada al Santuario Nuestra Señora de la Soledad del Monte Calvario, en la plaza con monumento a la Virgen de La Caridad, patrona de Cartagena; me acerco a la ermita objeto de romerías, restaurada en el año 1995 por el escultor Juan José Quiros; tras disfrutar el paisaje en compañía de varios gatos, única presencia que encuentro; me dirijo a las antenas de su cima, como veo muy arriesgado intentar descender con la bici, vuelvo sobre mis rodadas.

Sigo desde el cruce en ascenso por estrecha carretera al Valle de Escombreras para, desde la dársena, comenzar el ascenso a la Batería de Aguilones en la Sierra de La Fausilla; entro por la ruinosa caseta de vigilancia y tomo a la derecha en el cruce para rodear la Batería de Aguilones (C-7); construida en 1929, su historia mas relevante fue el intenso duelo artillero sobre la Batería de la Parajola, por haber disparado durante la Guerra Civil sobre un barco de la Escuadra Nacional (el "Castillo de Olite", cargado con más de 3.000 personas, la mayoría de las cuales se hunden con el barco, permaneciendo aún en el lecho marino de la Isla de Escombreras a más de 30 m de profundidad); de tal intensidad fueron los disparos que al terminar la Guerra Civil, los tubos de los cañones estaban inútiles. Quedó fuera de servicio en 1993, siendo desartillada un año después.

De vuelta al cruce, sigo la pista labrada que atraviesa un cerro partiéndolo en dos (Túnel del Viento) entrando a la Batería de Conejos; con todo desmantelado entre balcones naturales, con vistas fabulosas de horizonte marítimo, repaso el asentamiento en barbeta de tres piezas antiaéreas Vickers 105/45 después del desartillado. Actuó en 17 combates entre abril de 1937 y julio de 1938 contra incursiones de la aviación nacional. El 8 de septiembre de 1937 dispara contra un submarino del bando Nacional, avistado por la batería de Cabo Negrete. Fuera de servicio por la Reorganización de Meléndez Tolosa del año 1.965 y más tarde desartillada.

Tras disfrutar de panorámicas vistas sobre la inmensidad del mar y un monte tan bello como asalvajado, retorno cruzando las instalaciones de la refinería; me pican los ojos de la contaminación, las papilas olfativas se quejan del mal olor que trae el viento y el tráfico de camiones por la CT-34 no ayuda; afortunadamente en la rotonda a Portman me desvio, para tomar la pista que transcurre paralela a la carretera, cruza la Rambla de Escombreras y me saca a la rotonda de Alumbres, donde tomar en ligero ascenso la pista que faldea Sierra Gorda; se bifurca y tomo por la derecha apartándome del lugar donde estuvo instalada, durante algo más de un siglo, la fábrica de Explosivos de Alumbres denominada Garrabino; me dirijo a para explorar brevemente las antiguas minas alumbreñas del Complejo Minero de La Parreta (incluye las concesiones mineras San Simón, Manolita, Nuestra Señora de Los Ángeles e Impensada); voy descubriendo oficinas, talleres, y en las cercanías del edificio administrativo, el lavadero San Ignacio, las tolvas, el comedor etc.

De vuelta, veo a mi derecha los restos de la Mina Manolita, la pista atraviesa la finca vallada en sus laterales de la Parreta, entro en las calles de Vistalegre saliendo por el otro extremo; el sendero cruza un ramblizo, pasa delante de las instalaciones del campo de tiro y bajo las vías de vuelta al aparcamiento.

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