Zufeiros del Frade desde Lago de Carucedo (El Bierzo)

Zufeiros del Frade desde Lago de Carucedo (El Bierzo)

ACCESO A INICIO DE RUTA:

Hay dos carreteras por las que podemos aproximarnos al pueblo de Lago de Carucedo. Podemos ir por la carretera que va desde Ponferrada a O Barco de Valdeorras. Esta carretera, que es la nacional N-536, la tomaremos en O Barco o cerca de Ponferrada en la glorieta de la carretera nacional N-VI (Km 390,5). Tomamos el desvío en el Km 20, 5 ó 21 (hay 2 desvíos seguidos) de la N-536. Cambiamos a la carretera provincial LE-191/4. A un kilómetro, aproximadamente, del cruce entramos al pueblo Lago de Carucedo. A 50 metros ya vemos un marco de madera, con tejadillo, con el mapa e información de la ruta. Tenemos sitio para aparcar 3 ó 4 coches.

La otra forma de acercarse al punto de inicio de ruta es por la carretera nacional N-120 (Logroño - Vigo). En el Km 436,2 hay un puente por encima de N-120 que es el acceso de siempre a la carretera LE-191/4 que nos llevará a Lago de Carucedo después de unos 2,5 kilómetros. No podemos pasar por este puente porque está cerrado al tráfico debido a un accidente (de hace meses) que ha dañado su estructura y prohíbe la circulación (están valladas la entrada y salida). Entonces tenemos que continuar por la nacional dirección O Barco y, después de pasar los 2 túneles del Estrecho, tomar la salida que hay justo después del segundo túnel. Hacemos la vuelta por encima de este túnel, para cambiar el sentido legalmente, y nos incorporamos a la N-120 de nuevo. Debemos prestar mucha ATENCIÓN al entrar a la N-120 de nuevo. Por la izquierda observamos a los coches que vienen de O Barco y vamos a entrar directamente al túnel. No tiene que venir nadie enfrente porque en los túneles de un carril para cada sentido está prohibido adelantar. Volvemos a cruzar los dos túneles y, antes de pasar por debajo del clausurado puente, nos desviamos a la derecha para tomar la LE-191/4. Subimos por una carretera ancha, muy empinada y con un par de curvas que resultan peligrosas si no tenemos la debida precaución. A continuación, bajamos en fuerte pendiente hasta el cruce de entrada a Lago de Carucedo (está a unos 2,5 kms del cruce de la N-120). Nada más entrar tenemos los carteles de información de Ruta y el pequeño "aparcamiento" de al lado.

VALORACIÓN:

El día está nublado pero no va a llover en toda la mañana. Tenemos 10°C y una alta humedad. La pasada noche ha llovido bastante y se ve en los charcos que hay en la pista. Aún así los pasamos sin problema. En días despejados esta senda está expuesta al Sol en casi todo su recorrido. Las cuestas no son muy pronunciadas y largas. La calificación de dificultad como "FÁCIL" es en base a que no encontramos obstáculos de ningún tipo hasta llegar al alcornocal. Las subidas son sencillas para cualquier persona, acostumbrada a andar a menudo, independientemente de su edad. Tan solo tenemos que estar pendientes de no tropezar con los surcos que hacen las lluvias en las pistas.

DESCRIPCIÓN DE RUTA:

Partimos, en nuestra aventura de hoy, desde el pórtico de madera con el mapa e información de la ruta "Zufeiros del Frade". A los pocos metros tenemos que cruzar la carretera LE-191/4 por la que hemos venido (precaución en este cruce que pasan los coches rápido) y nos incorporamos a la pista de tierra que nos llevará a alcanzar nuestro objetivo. Hay varios cruces que es fácil intuir por donde seguir porque las pistas que salen son de diferente piso o anchura. En los desvíos que podemos dudar hay estacas indicando el camino correcto. Además vemos estacas con una "X" al principio de los giros que no debemos tomar. No es nada difícil seguir esta corta ruta.

En primer lugar llegamos a la Área Recreativa del Frade, que es una zona de descanso o merendero, con cuatro mesas y bancos de piedra y pizarra. En esta zona tenemos un cartel explicativo de Flora y Fauna del entorno. Todo el recorrido está poblado por encinas, madroños, castaños y alcornoques, todos ellos con fruto en rama o ya en el suelo.

En unos 200 metros llegamos a Los Zufeiros del Frade, nuestro principal objetivo de la jornada. Comentaremos las peculiaridades de esta "Joya Berciana" más adelante. Después de esta enriquecedora visita seguimos camino hacia el mirador o balcón hacia la garganta del Río Sil y el embalse de Peñarrubia. Pasamos una fuente de montaña. Hoy, desgraciadamente, la niebla nos impide ver algo en este balcón. En este punto se sitúa la frontera entre Castilla y León y Galicia. Retornamos a Lago de Carucedo por el mismo camino e itinerario. Si no visitamos el "Balcón", mencionado anteriormente, desde Lago de Carucedo a Los Zufeiros del Frade y vuelta al punto de partida es una ruta que no supera los 6 kilómetros.

ZUFEIROS DEL FRADE:

Ubicado en el Parque Natural de Las Médulas, se trata de un pequeño conjunto de ALCORNOQUES GIGANTES que son dignos de la comarca de Hobbiton del Señor de los Anillos. En esta ladera hay ejemplares que superan los 400 años de edad. En El Bierzo se les llama Zufeiros o Zofeiros a los alcornoques o Quercus Suber (nombre científico). Debemos RESPETAR estos magníficos árboles centenarios para que no tenga impacto nuestra visita en ellos y su entorno. Podemos tocarlos pero NO subir a ellos, cortar un trozo, echar basura, orinar en ellos,... en fin nada que no hiciésemos a un ser querido. En verano podemos coger alguna bellota del suelo para intentar reproducir un nuevo ejemplar en nuestra zona de residencia. Los suelos están cubiertos de musgo con algún hongo que viste aún más de cuento este bello rincón berciano. Los madroños y encinas comparten la zona con estos Gigantes.

EL ALCORNOCAL:

El alcornoque es un árbol de origen mediterráneo que ha sido explotado durante siglos. Se le extrae la corteza para producir corcho natural para tapar botellas, básicamente, y las bellotas para alimentar los cochinos. El alcornoque tiene esta gran corteza natural, de más de 5 centímetros de espesor, para protegerse del clima y de los incendios. En el pasado se fabricaba carbón vegetal con el alcornoque y la encina. Los árboles se "descorchan" a finales de verano y éstos generan una nueva corteza, que estará del grosor adecuado para cosechar después de entre 10 y 14 años. Su madera es durísima.