11 Camino del Sureste: Sarria - Santiago de Compostela

* ATENCIÓN: la ruta se hizo con una Canyon Grail de gravel, con cubiertas de 40 mm y 3,7 kg de equipaje en dos bolsas de bikepacking (incluyendo el peso de las bolsas): una de tija y otra de tubo horizontal. Llevaba 3 bidones de agua de 620 ml (1,86 litros), e intentaba llevar siempre al menos la mitad del agua. Algún día caluroso tuve problemas, pero en general hay fuentes, bares y tiendas para recargar agua. Esta es la ruta original, e INCLUYE desvíos a bares y alojamientos, errores y malas elecciones de ruta. La ruta corregida y completa está en: https://es.wikiloc.com/rutas-senderismo/camino-del-sureste-2022-santomera-murcia-a-santiago-de-compostela-111291449
OJO: leer bien la descripción, y estudiar el recorrido. No me hago responsable del recorrido, solo comparto para que otros puedan beneficiarse de mis experiencias, igual que lo hice yo con otros recorridos de wikiloc.

Etapa 11. 16/08/2022. De Sarria (Lugo) a Santiago de Compostela (A Coruña)
Distancia: 116,82 Km
Ascenso: 1917 m

Hoy quiero llegar a Santiago de Compostela. Las previsiones del tiempo no son buenas, dan lluvia gran parte del día, y además hoy es el día con más distancia y desnivel del viaje.
Salgo de Sarria a las 7:15h y al poco comienza a llover. La lluvia me va a acompañar todo el día. Decido ir por la carretera principal LU633 en lugar de carreteras secundarias y caminos para evitar barro y charcos. Tras pasar Paradela y una bajada fuerte, llego a la entrada de Portomarín, que paso sin más, siguiendo por la LU633 hacia O Alto do Hospital.
Aquí comienzo a ver la romería de gente, montones de cientos y miles de personas andando. No pretendo ir por el camino de tierra, pero sería imposible pasar por ahí en bici con tanta gente. Cómo ha cambiado la cosa desde que hice mi primer Camino en 2002, hace ya 20 años.

Me paro a hablar con un ciclista de Asturias un rato. Me adelanta un grupo de bicis de montaña sin bolsas ni alforjas de Albacete. Y al llegar a O Alto do Hospital y dejar la LU633 hacia Ventas de Narón y tomar un carretera vecinal, noto algo raro en la bici. Primer pinchazo en todo el viaje, en la rueda delantera, a 82 kms de Santiago.
Me salgo a un descampado y saco la cámara nueva, la bomba y los desmontables. Es una cámara Tubolito ultraligera, de 36 gramos. La cubierta es tubeless ready, así que cuesta sacarla de la llanta. Inflo un poco la cámara y la coloco. Me cuesta bastante volver a meter la cubierta en la llanta, por el mismo motivo, pero al final lo consigo. El tema es al inflarla. Llevo una bomba mini, y tras estar un rato inflando la cámara me doy cuenta de que podría estar aquí horas para inflarla entera. Paro a un ciclista francés, Damian, que había conocido en O Cebreiro. Me deja su bomba y parece que se va inflando. La cubierta no se llega a talonar en la llanta, otra vez el tubeless. Parece que no admite aire. Miro la válvula y… se ha doblado, por eso no admite más aire. Al final, entre Damian y yo conseguimos inflarla hasta una presión aceptable, unos 2 o 2,5 bar. Decido seguir despacio hasta Palas de Rei e intentar ahí buscar una tienda de bicis para cambiar la cámara. ¡Gracias Tubolito! Estas cámaras son más para una emergencia cerca de casa que para viajar…

Me quedan 82 Km a Santiago y otros 10 a Palas de Rei. Voy despacio, sobre todo en las bajadas y terrenos irregulares, pues me da miedo que se reviente la cámara e irme al suelo.

Al llegar a Palas de Rei, tras esquivar a muchos peregrinos andando por en medio de la carretera, busco una tienda de bicis sin éxito, así que decido seguir por la carretera N547 hasta Santiago y esperar que aguante la cámara.

De Palas de Rei a Melide la carretera es un infierno de coches y camiones. Además ya comienza a llover fuerte. Tras varias subidas llego a Melide todo lo rápido que puedo hasta el primer bar que veo con terraza cubierta. Entro y pregunto por la comida… no tienen absolutamente nada de comer. Mi mandíbula roza el suelo de asombro. Me tomo la cocacola y sigo el camino, ya empapado.

Hasta Arzúa siguen los camiones, la lluvia y las cuestas. Me llega el agua desde arriba, desde el lateral con el agua que levantan las ruedas de los camiones, y desde el suelo con el agua que levantan las ruedas de la bici. Chorreo agua. Comienza a entrarme agua en las zapatillas. Noto el chapotear dentro de la zapatilla cuando pedaleo.

Paso Arzúa sin parar, buscando llegar a Salceda y parar en Tía Teresa a comer algo. Sigue la lluvia intermitente, a veces floja y a veces muy fuerte. Tras pasar A Curiscada el tráfico disminuye mucho. Tras varias subidas llego a Salceda y me paro a comer en Tia Teresa, parada obligada por la comida y por el trato.

Son las dos menos cuarto, así que pido zorza y una hamburguesa, vació las zapatillas de agua, y sigo pedaleando una hora después, en medio de la lluvia.

En las bajadas fuertes no puedo ver bien, el agua me da en los ojos muy fuerte y tengo que llevarlos medio cerrados.
Sigo por la N547 hasta que llego junto a la autovía A54 en subida fuerte. A partir de aquí me desvío por el Camino pedestre, pues a esta hora ya no hay nadie, y menos lloviendo. Paso algunos tramos de tierra en San Paio. Tras subir las cuestas de Villamaior, llaneo por la zona de TVE y TVG hasta llegar a Monto do Gozo. No hay nadie.

Bajo el Monte do Gozo con cuidado y tras pasar el puente de hormigón ya solo queda callejear hasta llegar al casco histórico. Ya ha dejado de llover, y el centro está lleno de gente.

Llego a la plaza del Obradoiro tras casi 7 horas de pedaleo, 117 Km y 1917 m de ascenso. Es mi 18º Camino de Santiago.