Hondarribia-Vía Verde del Bidasoa-Vera-Lesaka-Oiartzun-Irún. 11-JUL-2022

Una ruta con predominio de carreteras secundarias y alguna pista en buen estado, subidas y bajadas continuadas, prados, ríos y arboledas, ciudades y pueblos cuidados, vistas al mar y un embalse.
Salimos desde el camping Jaizkibel de Hondarribia/Fuenterrabía para tomar un carril bici que se interrumpe a ratos y baja hacia Irún atravesando la ciudad en dirección al río Bidasoa. Poco más de 7 kilómetros hasta la primera señal de la Vía Verde del Bidasoa que discurre en paralelo al río por su margen izquierda. El firme de la vía es de tierra o de cemento y se recorre con facilidad por zonas sombreadas. A la altura del km 20 de nuestra ruta hay un desvío por elegante puente a Vera de Bidasoa, un pueblo con casonas solariegas bien cuidadas que merece una visita sin prisa. La vía verde sigue casi 20 km de pista hasta llegar a un cruce que indica la carretera a Lesaka. Tres kilómetros más adelante se llega a la ciudad de Lesaka, en fiestas, con procesión de gigantes y cabezudos y las calles abarrotadas de celebrantes ebrios en modo discoteca y baño matinal para espantar la resaca. Otros siguen la fiesta entre la ingente masa de desperdicios, plásticos, orines y vomitonas. Un gran espectáculo.
Una vez pasado el pueblo se inicia la subida a un collado bajo el monte Agiña durante casi 8 km por una carretera sin tráfico y firme excelente. En el collado hay un indicador a un yacimiento arqueológico con dolmen.
Bajamos al embalse de San Antón en 5 km, se bordea por el Norte y se sube al collado de Arritxulegi durante cuatro kilómetros, una ascensión muy tendida. Pasamos el túnel en lo alto del collado y bajamos muy rápido hacia Oiartzun. Antes de entrar al pueblo sale a la derecha un desvío por una pista asfaltada que sube en dirección Norte hacia la carretera de Irún. Dos kilómetros más arriba se llega a un cruce: siguiendo recto la carretera se llega a Irún en 7 km; nosotros giramos a la derecha por una carretera que sube hacia el Castillo del Inglés. Es una carretera vecinal que alterna zonas de subida con falsos llanos durante 9 kilómetros. En lo más alto hay un desvío al Castillo en ruinas. Continuamos la carretera hacia abajo en dirección a Irún por una serie de curvas pronunciadas. Es una gran bajada rapidísima que exige buenos frenos y buenas trazadas. Firme excelente.
Se llega así a la ciudad de Irún y por el mismo camino de ida volvemos al camping de donde salimos.