Ordesa. Valles de Bujaruelo y de Otal. 26-SEP-2023.

Ruta sencilla que se puede hacer con bici gravel o con la de montaña; predominio de pistas buenas con algunos tramos más pedregosos; hay un pequeño sendero que se puede evitar por la pista; el comienzo y el final son por carretera (2km) con poco tráfico entre semana.
Comenzamos a las afueras del pueblo de Torla, a dos kilómetros, frente al hotel y camping Ordesa, un buen sitio para aparcar.
Desde el aparcamiento salimos en dirección Norte por la carretera que sube a Ordesa, teniendo enfrente las murallas del Mondarruego. En la rotonda, junto al Puente de los Navarros, continuamos hacia el valle de Bujaruelo siguiendo el curso del río Ara. Los primeros kilómetros son de subida ligera por una pista cementada que sigue la Garganta de los Navarros, un desfiladero en sombra tallado por el río Ara. Luego la pista cambia el cemento por tierra con algunos tramos más empinados, pero siempre con poca dificultad. Se cruza el río Ara por el Puente de Santa Elena y se sube por la margen derecha del Ara por un hayedo extraordinario que nos lleva a recorrer la Garganta de Bujaruelo, otro desfiladero monumental. Aguas arriba llegamos al Albergue de San Nicolás de Bujaruelo en una zona más abierta. Hay una ermita y un puente que dejamos a la derecha para tomar la pista que sube hacia el Oeste siguiendo el curso del río Ara.
La pista, siempre adecuada, pasa por la fuente de la Femalla, a unos metros de un cruce: a la izquierda al valle de Otal; a la derecha al puente de Oncins. A este punto volveremos tras recorrer el valle de Otal. Seguimos la pista a la izquierda para subir en grandes lazadas por el valle del río Otal. Llegamos al collado de Otal en donde una puerta para el ganado advierte de que las vacas están pastando a su antojo. Pasada la puerta se abre un valle de perfectas formas glaciares, cerrado por la izquierda, Sur, por la Sierra Tendeñera. En el fondo de la llanura glaciar hay una cabaña-refugio custodiada por las vacas y allí mismo nos damos la vuelta, sin llegar hasta más allá para ver la cascada porque las vacas no dejan pasar, bajando por la ruta de subida hasta el punto del cruce.
Seguimos ahora el indicador hasta el puente de Oncins, lo cruzamos y continuamos hacia abajo la orilla izquierda del Ara por un sendero entretenido de 2 km que lleva hasta San Nicolás de Bujaruelo. Si no se quiere seguir el sendero se vuelve por donde vinimos, sin cruzar el puente de Oncins.
Desde San Nicolás no hay más que volver siguiendo la pista, ahora en rápida bajada.