100 Cims - Puig de l'Àliga

100 CIMS - PUIG DE L'ÀLIGA (Olèrdola - Alt Penedès)

Para llegar al punto de inicio tenemos que desplazarnos hasta Sant Miquel d'Olèrdola por la C-15, una vez que pasamos la población, a mano derecha tenemos el desvío que sube hasta el Castell d'Olèrdola. La zona de aparcamiento es enorme, cuando llegamos por la mañana solo habían dos coches más, luego al finalizar la ruta, la cosa cambió bastante, ya que el parking estaba casi lleno, supongo que por coincidencia del puente de diciembre. A la derecha de la zona de aparcamiento, tenemos el Conjunt monumental d'Olèrdola. Si queremos añadir su visita a la excursión, os dejo la web para consultar horarios y precios MAC Olèrdola. http://www.macolerdola.cat/

Una vez equipados, vamos subiendo hacia la parte de arriba de la zona de aparcamiento hasta llegar a una cadena que prohibe el paso a vehículos a motor. Seguiremos por el camino de tierra hasta llegar a un cruce, donde iremos hacia nuestra izquierda para ver los primeros dos punto de interés de la ruta. Al lado de la cadena hay una fuente de agua potable, y una zona para hacer picnic.

Avanzamos y llegamos a las ruinas de la Capilla de Santa Maria. A lo lejos, podemos ver Montserrat. Un poquito antes de llegar a la Capilla de Santa Maria, tenemos las tumbas antropomórficas del Pla dels Abats. Tras visitar la parte más arqueológica de la ruta, volvemos sobre nuestros pasos y, al llegar al cruce, esta vez seguiremos rectos por el Camí de Daltmar al Castell d'Olèrdola.

Cuando llevemos unos 900 metros caminados, aproximadamente, a nuestra derecha hay dos piedras que señalizan un sendero que baja por la ladera de la montaña, iremos por él. La bajada es por terreno con bastante piedra suelta, siendo la parte más “complicada” en toda la ruta, de ahí su calificación de moderada. Bajando despacito y con cuidado, no tiene porqué darnos más problemas. 200 metros de bajada y salimos al Camí de la Seguera, donde giraremos hacia nuestra izquierda para continuar con la ruta.

El Camí de la Seguera es una ancha pista de tierra por la que pueden circular vehículos a motor, y hay muchas probabilidades de cruzarnos con grupos de ciclistas. La pista va subiendo muy suavemente, de forma casi imperceptible. A unos 500 metros de empezar a caminar por esta pista, a mano derecha hay una enorme piedra que nos señaliza el camino que baja hasta la Font del Avellaner, se trata de un pequeño desvío que nos llevará menos de cinco minutos entre bajar y subir de nuevo. Pasamos junto a un panel informativo sobre las Cingleres dels Fondos de la Vall i de la Seguera, y seguimos con nuestro camino.

Ahora pasamos junto a los Forns de Calç de Can Castellví. Nos desviamos un poquito hacia la izquierda y les damos un vistazo. Las chimeneas están tapiadas, no sea que a algún iluminado se le ocurra ir por la parte de arriba, se asome y ... ya la tenemos liada. Volvemos al camino y avanzamos pocos metros para desviarnos a la izquierda por un pequeño sendero, así evitaremos tener que ir un buen trozo por la carretera.

Unos 100 metros más adelante, cruzaremos la carretera y seguimos por el camino de tierra que tenemos justo delante. Pasamos junto a una cantera. Un cartel nos advierte del peligro por ser zona de voladuras. Afortunadamente, hoy no toca explosiones. La pista de tierra tiene una cadena que limita el paso a vehículos a motor, nosotros seguiremos por ella durante casi un kilómetro hasta que la dejemos.

Cuando llegamos a una curva hacia la derecha con una fuerte subida, hay un pequeño sendero que sigue hacia adelante, tenemos que seguir por ahí dejando la pista de tierra. Ahora el camino se vuelve más estrecho y divertido. Tendremos que continuar por aquí durante otro kilómetro. El sendero nos lleva hasta las casas de la urbanización de Daltmar. Dejamos el sendero y vamos a parar junto a la Deixalleria de Daltmar. La dejamos a nuestra derecha y seguimos avanzando por otra pista de tierra bastante ancha por la que también pueden circular vehículos a motor.

A unos 800 metros de la Deixalleria de Daltmar, veremos el cartel del Parc del Foix. Aquí giraremos hacia la izquieda y, en vez de continuar por la pista de tierra, subiremos por un estrecho sendero que va entre la vegetación. El sendero apenas tiene unos 300 metros, y aunque en su parte inicial es bastante estrecho, luego se va haciendo cada vez más ancho. Salimos a un pequeño claro donde giraremos hacia la derecha. De nuevo otra cadena impide el paso a vehículos a motor en esa dirección. Según el Institut Cartogràfic de Catalunya, este pequeño claro es el Turó de les Tres Partions, según Google Maps está más arriba, justo donde está la torre de telecomunicaciones, así que cada uno que decida.

Subimos unos 200 metros y llegaremos al segundo punto más alto de la ruta. Las vistas desde aquí son una pasada, lástima que el día no acaba de acompañar del todo. Bajamos desde el Turó de les Tres Partions por el mismo camino de subida y continuamos hasta salir nuevamente a la pista de tierra, y llegamos al Coll de l'Àliga. Ahora tenemos que subir rectos hasta llegar a nuestro objetivo.

Al llegar al mirador del Puig de l'Àliga, otra cadena limita el paso a los vehículos a motor. Es bastante probable que nos crucemos con vehículos que suben y bajan para acercarse al Puig de l'Àliga. Avanzamos hacia el vértice geodésico del Puig de l'Àliga y Judit entra en modo off-road, así que deja la pista y se pone a grimpar un poquillo para llegar al Cim. Como el camino es muy rocoso y los "mini mastines" se nos puedden colar por algún agujero o lastimarse las patitas en estas piedras tan afiladas, los tenemos que coger en brazos, Barbie ... no tiene tanta suerte y procuramos ir con mucho cuidado con ella. Puig de l'Àliga (464,2 metros).

Conseguido el objetivo del día, llegar al Puig de l'Àliga, volvemos a la pista para seguir con la ruta prevista, así que ahora nos acercaremos hasta la torre de vigilancia forestal. Pasada la torre de vigilancia, a la derecha del camino hay una cruz metálica con unos cuantos pesebres junto a ella. También se trata de un buen mirador para observar la zona. Al final del camino, el camino se estrecha y empieza a bajar por entre las piedras. Seguiremos rectos hasta llegar a unas casas diseminadas de la urbanización Daltmar.

Bajamos siguiendo las marcas del GR. Hay algún tramo con piedra suelta, pero al igual que la bajada que hicimos al inicio de la ruta, despacito y con cuidado se baja sin problemas. La bajada y el sendero se termina y salimos al Carrer del Puig de l'Àliga, solo nos queda seguir adelante durante un kilómetro.

Entramos en la urbanización y llegamos a una curva muy cerrada hacia la izquierda. Seguiremos dirección Carrer Bosc de la Vall. Pasamos el Carrer del Bosc de la Vall y continuamos por el Carrer del Parc d'Olèrdola durante unos 500 metros. El asfalto se acaba y vamos a parar a otra pista de tierra con un cartel de "Benvinguts al Parc", ahora estamos en el Parc del Garraf. Más adelante, otra cadena impide nuevamente el paso a vehículos a motor.

Estamos en el Camí de Daltmar al Castell d'Olèrdola. Una curva hacia la derecha, y seguiremos hacia el Castell d'Olèrdola. Cuando lleguemos al cruce donde nos desviamos para acercarnos hasta la Capilla de Santa María y las tumbas antropomórficas del Plà dels Abats, giraremos hacia nuestra izquierda y llegaremos directos al coche. Un 100 Cim, fácil y sencillo de hacer, y en el que hemos de tener cuidado en los tramos donde podemos coincidir con vehículos a motor, aparte de esto ... a disfrutarlo. Si vamos bien de tiempo y podemos ir al Conjunt monumental d'Olèrdola, no os lo perdáis, que merece la pena.

Distancia: 11 kilómetros 400 metros.
Desnivel: 280 metros.
Duración: 3 horas 30 minutos.