11 Camino de Santiago desde casa. De Bolea a Yeste

Etapa de deleite, para todos los sentidos. Vista: por lo que se ve; tacto: por la sensación del sol y la suave brisa en la piel; olfato: por cómo huele el aire, a limpio y ya se acerca el olor del Pirineo; oído: escuchar el canto de los pájaros; y gusto: por el almuerzo que me encuentro a la entrada de Loarre y por las cerezas que me dieron la noche anterior en Bolea.

Para esta etapa se requiere un pelín más de esfuerzo que en las anteriores porque hay algo más de desnivel, que apenas se nota pues hay ganas de ver nuevos territorios y las vistas de pierden en todos los rincones y las subidas son suaves. Las pistas son bastante cómodas para caminar y hay un par de tramos de sendero que será el preludio de lo que vendrá mañana. También bastante sencillos porque son cortitos.

Se camina entre almendros la primera mitad del día y la segunda entre pinos.

Imprescindible las vistas del castillo de Loarre, al salir de Aniés, coger el camino marcado por las flechas, aunque sea más subida, no se nota mucho y se puede ver bien el castillo, por el camino de la izquierda, no.

Parar un rato en la ermita de San Miguel reconforta. Respirar hondo para poder disfrutar de todas las vistas

El paso de la Foz de Escalate es sin igual.

En La Peña Estación está el Bar Carmen, que lo lleva Elena y lo hace con muchas ganas desde hace un año que lo cogió. Perfecto para reponer fuerzas. Cierra los miércoles.

En Yeste, a 1km de La Peña Estación, está Casa Rural Ger, que la lleva Oroel y está genial para descansar.

Y no puedo decir nada más a parte de que os animéis a hacerlo.

Si quieres, puedes ver el vídeo de la etapa en YouTube:
https://youtu.be/3YH-69gsvP4