(20150603) Mendaro-Valle Kilimon-Izarraitz-Zestoa.

Pensando que el pronóstico del tiempo fuese bueno, nos hemos encaminado a hacer esta travesía por el Valle del Kilimon y las cimas de Izarraitz hasta llegar a Zestoa.
En principio el pronóstico de la "meteo" nos ha fallado. Hemos tenido niebla todo el camino y además a veces nos ha acompañado algo de lluvia y también nos ha mojado la niebla y la hierba alta del camino. Total: Nos hemos mojado.
Comenzamos a andar desde la estación de Mendaro dirección al Valle de Kilimón. Después de una hora adentrándonos en el valle comenzamos la ascensión al lado de la erreka Pagaolaza hasta llegar al caserío del mismo nombre. Después de unos giros pasamos al lado de una pequeña borda y ascendemos a Atxuriko punta, un promontorio de rocas que al estar totalmente nublado no hemos podido comprobar las posibles vistas que nos ofrecía. Después de bajar como hemos podido, ya que las rocas estaban mojadas y era necesario andar con cuidado, continuamos hasta llegar a la fuente de Orandain y un poco más tarde llegamos a la carretera GI 3210. En principio la idea era continuar rectos en dirección a Putreaitza y Kakuta pero teniendo en cuenta que estaba todo muy mojado y resbaladizo hemos decidido continuar un poco por la carretera para poder tomar el sendero de ascensión tradicional hasta llegar a Izkiturri. Un poco más adelante hemos enlazado con la vía de inicio y continuado dirección Erlo.
En vista que todavía había mucha niebla y apenas podíamos ver a cinco metros, un poco antes de las antenas de Erlo nos hemos desviado a la izquierda con intención de tomar el sendero de bajada hacia Zestoa. Después de pasar por la zona de Intziola, un pozo protegido que no recordamos el nombre, después por el caserío Ondarbaso y un rato largo después hemos llegado a Zestoa por el puente del lavadero y de la fuente de los cuatro caños.
Después de cruzar el puente hemos visto unas mesas de madera al lado del río donde nos hemos sentado con intención de comer algo de las viandas que llevábamos, ya que era bastante tarde y teníamos un apetito feroz.

Hemos comenzado a andar en la estación de Mendaro sobre las 8 horas y terminado en Zestoa sobre las 15 horas y 50 minutos.
El tiempo efectivo dedicado a la travesía ha sido de unas 6 horas a una media de 3,6 kms./hora.
El tiempo dedicado a fotos, agua, cambio de ropa, "hamaiketako", etc., etc., ha sido de unas dos horas.

Es una travesía que no tiene ninguna dificultad técnica. Con las circunstancias de hoy, terreno mojado y rocas muy resbaladizas, es aconsejable extremar la precaución.
Apenas hay senderos marcados salvo en contadas ocasiones. En la bajada desde Erlo y sobre todo al principio, es difícil seguir el sendero, por lo que se hace muy aconsejable la utilización de GPS con un buen "track".

Hemos llegado a Mendaro con Euskotren y vuelto desde Zestoa en autobús de Lurraldebus en la línea Azkoitia-Donostia.