2019-11-21 Travesía otoñal por Mágina: cortijo del Valle -Cuadros- hasta Torres. Cornicabras, encinas centenarias y cerezos.

El tiempo en vehículo desde el punto de inicio al final -40 minutos- nos ha permitido plantearnos y ejecutar esta impresionante y exigente ruta que reúne varios alicientes que de forma aislada ya suponen un extraordinario acicate para realizarla, pero todos juntos, ¿Qué decir? MAGNIFICA.
La subida hasta los pies del Montazo por el sendero en zig-zag con un bello trabajo de mampuesto y rodeado de corniabras -en su mejor momento de madurez- con un sol espléndido en este primer tramo de la ruta, las magníficas vistas desde este cerro empotrado en medio de los grandes colosos de Mágina, senderos de herradura que nos ayudan a progresar por las laderas de profundos barrancos -como el de Perú- y nos conducen a preciosos collados, puertas de acceso de un valle a otro, los sorprendentes especímenes de vetustas encinas que nos observan impertérritas y, para terminar, el colorido de los cerezos otoñales en los valles de los alrededores de Torres.
El desnivel, kilometraje, duro ascenso sin vereda en el último tramo a la cresta del Montazo, la llovizna durante su descenso, algún tramo campo a través en ascenso en las proximidades del barranco Melgosilla, por un terreno embarrado, y la peligrosidad de las losas de piedra humedecidas por la poca lluvia caida, son la guinda de esta ruta que me hacen calificarla como difícil.
IMPORTANTE. Una vez atravesado el barraco del Perú, a los pies de cerrillo Vaquero, encontraremos una bifurcación de veredas. Nosotros cogimos la de la derecha -porque el track que llevábamos en el GPS así lo indicaba- pero recomiendo coger la de la izquierda, que nos mantendrá con una mínima y progresiva pérdida de cota de altura hasta enlazar con el barranco. De lo contrario bajaremos para luego subir....lo cual es completamente innecesario.
Muy recomendable para aquellos que fisicamente estén preparados para ello e incluso, como era nuestra idea original antes de que el retraso ocasionado por la climatologia propiciara un cambio de planes, alargar la ruta bien por la zona de las plantaciones de cerezos, o desde el collado de la Víbora, por los cerros de Monteagudo, Enmedio y la Sillita.