2020-09-14 Geosendero del Triásico Superior. PR-A -157 Archidona - Hoz del arroyo Marín. Etapa 12 del GR-249

Sendero que discurre por uno de los parajes más emblemáticos de la comarca, la Hoz del arroyo Marín. La importancia ambiental de este espacio natural se debe a varios motivos: el cañón fluviokárstico, el único pinar autóctono de la provincia de Málaga, un potente bosque en galería y la presencia de singularidades geológicas como el afloramiento de ofitas. La última parte del recorrido atraviesa la zona conocida como El Brosque y desciende hasta terminar en las proximidades de la Vega de Archidona.

Esta ruta se puede complementar con una visita al casco histórico de Archidona y al santuario/castillo en la sierra de Gracias. Es más, se aconseja hacer ambas rutas con lo que podremos disfrutar de un día completo y variado, siendo muy recomendable comer en algunos de sus restaurantes.
https://es.wikiloc.com/rutas-senderismo/2020-09-14-archidona-monumentos-y-patrimonio-cultural-urbano-y-castillo-mezquita-santuario-56969811

FOLLETO DEL SENDERO
http://www.fedamon.com/senderos/prs/archivospdf/malaga/archidonahozdemarin.jpg

MAPA DE LA RUTA COMPLETA
https://static.malaga.es/malaga/subidas/archivos/9/1/arc_176319.pdf

TRACK DEL SENDERO COMPLETO
http://www.fedamon.com/senderos/prs/track/malaga/PR-A%20157_Trazado.rar

Archidona es depositaria de espacios naturales de un valor superlativo, tanto por la riqueza de su flora y fauna como por su extensión y estado de conservación. De todos ellos, La Hoz del arroyo Marín es el exponente máximo de la excelencia natural que disfrutan los habitantes de esta localidad de la Sierra Norte. Es un santuario natural formado por bosques autóctonos de pinos carrascos, un bosque de galería que cobija al arroyo, laderas verticales creadas sobre materiales yesíferos, nacimientos de agua y cavidades; todo ello en un paraje dispuesto caprichosamente en forma de media luna.

1. Vegetación de ribera
Álamos, chopos, fresnos, olmos y sauces dominan la vegetación, denominada riparia, que ocupa la ribera del arroyo Marín. Junto a estos árboles conviven otras especies arbustivas de gran interés, como el rusco, que completan un potente bosque en galería.

2. Cortijo de Pilatos
Esta edificación derruida presta su nombre a este enclave natural, pues para los habitantes de Archidona la Hoz del arroyo Marín es conocida con el sobrenombre de Pilatos. En su día, este cortijo era uno de los más importantes de la localidad, contando entre sus propiedades gran parte de este paraje.

3. Afloramiento de yesos
El yeso es uno de los principales componentes de las laderas de la Hoz. En sus afloramientos podemos observar acanaladuras producto de su disolución por el agua de lluvia, lo que, al mismo tiempo, provoca que el agua del arroyo tenga una marcada facie sulfurosa.

Curiosidades
El nombre de este paraje conjuga su fisionomía con el agente que ha originado su creación. De un lado se encuentra la profunda garganta en forma de media luna que se asemeja a una hoz y de otro lado tenemos el nombre del arroyo cuya erosión mecánica ha provocado la abertura del terreno de esta forma y dimensiones. No obstante, hace relativamente poco tiempo que este curso de agua es conocido como arroyo Marín y, por tanto, el nombre que debiera recibir este paraje debería ser otro, desde el punto de vista histórico.

El nombre originario del arroyo es el de arroyo del Ciervo, según reza en un documento del año 1.581 que contiene el archivo histórico municipal. A lo largo de los siglos, la referencia al arroyo del Ciervo en este archivo es constante, datando de 1.951 la última aparición de este nombre. Desde entonces el arroyo se denomina exclusivamente como arroyo Marín debido a la existencia de un molino harinero con ese nombre del que actualmente no quedan restos. Por tanto, sería más acertado referirse a este paraje como Hoz del arroyo del Ciervo, en alusión clara a la abundancia de estos animales en la zona.

https://static.malaga.es/malaga/subidas/archivos/5/7/arc_176075.pdf

GR 249. Etapa 12: Villanueva del Rosario - Archidona

Resumen
La Etapa 12 realiza un recorrido por la cabecera de cuenca del río Guadalhorce, con el escenario de varios de sus afluentes más importantes y conocidos, el arroyo del Cerezo y el de la Hoz de Marín. Siempre hacia el norte, el sendero realiza suaves desvíos para evitar infraestructuras, la más importante la autovía A-92M, o algunos accidentes geográficos como las lomas calizas y herrizas o la propia Hoz de Marín, cambiando de término municipal en el Cerro de la Cruz.

La Hoz del Arroyo de Marín es un paraje tan emblemático que, pese a su reducida extensión de algo más de 600 hectáreas, ha sido declarado por la Diputación de Málaga como Espacio Sobresaliente con Protección Compatible. La vista aérea de la Hoz explica su nombre, una marcada cicatriz semicircular de 250 metros de desnivel medio, interrumpida por su extremo norte. El valle termina en las Huertas del Río, donde el cauce realiza un brusco giro hacia el oeste buscando el Peñón de los Enamorados, mientras que Archidona se asoma a verlo en el otro extremo, el de levante.
Sin duda hay un antes y un después de las fuertes tormentas de 2012 para el arroyo, de modo que aún pueden verse las consecuencias del anómalo caudal de agua en los troncos arrancados y arrastrados, la erosión en las orillas más desprotegidas y los daños en las infraestructuras de uso público. Aún así, la zona por la que se transita conserva el camino en buenas condiciones y una verdadera maravilla de bosque de ribera, tanto por las dimensiones de los árboles como por su diversidad y densidad. Al principio la angostura es más acusada (de hecho, aumenta hacia abajo) y las terrazas de inundación están reducidas al mínimo, pero más arriba se ensanchan hasta propiciar el asentamiento de molinos y de huertas. La denominación de la Hoz de Marín, precisamente, se lo debe a un molino, siendo más antiguo el curioso nombre de Arroyo del Ciervo.
Abundan los fresnos, sobre todo al principio, pero hay muchos olmos. Los quejigos, muy espigados también, llegan hasta el borde del cauce. Al final, cuando el valle se abre, ganan la partida los álamos que preponderan sobre los demás.
Es típico el color lechoso de las aguas del arroyo, debido a la labilidad de los materiales de las laderas (yesos, arcillas y otras rocas triásicas), que no mantiene fauna ictícola pero sí otros animales ligados al agua, sobre todo anfibios, o a los ecosistemas forestales frondosos.

http://www.gransendademalaga.es/es/etapas/lis_cd-6614/gr-249-etapa-12-villanueva-del-rosario-archidona

GEOLOGÍA DE LA ZONA
La región de Archidona se encuentra en la parte centro-occidental de las Zonas Externas de las Cordilleras Béticas, próxima al límite norte de las Zonas Internas.
En la zona se diferencian tres bandas de características geológicas distintas alargadas según las directrices béticas (ENE-OSO):
1. El Subbético medio central, en la parte norte y noroeste.
2. El Complejo de la Alta Cadena (s.l.) en la parte sur y sureste, que comprende un área de escaso relieve en la zona de Villanueva del Trabuco-Villanueva del Rosario y una alineación montañosa (la Alta Cadena s. str.) inmediatamente al sur de ella. Este Complejo comprende formaciones de tipo «Flysch del Campo de Gibraltar»
3. El Trias de Antequera, en el centro, según una banda diagonal.
https://gredos.usal.es/bitstream/handle/10366/79769/Sobre_la_geologia_de_la_region_de_Archid.pdf;jsessionid=0E3F11DB84BE9F2CC93A4C85BC326FEF?sequence=1

El pueblo de Archidona se encuentra en la ladera de la sierra de Gracia, que junto con el cerro Conjuro y la cueva de las Grajas forman la sierra de Archidona, que se incluye en el Subbético con materiales calizos del Jurásico, especialmente del Inferior o Lías.

Archidona está rodeada de materiales del Triásico Superior, facies Keuper con abundancia de yesos y otras rocas evaporíticas, que forman un karst parecido al caliza con formaciones endokársticas como cuevas y exokársticas: microlapiaces, dolinas, surgencias de agua...

TRIÁSICO SUPERIOR
Toda la ruta transcurre por el Triásico Superior, llamado Keuper (200-220 millones de años), época anterior al Jurásico que predomina en nuestras sierras. Lo más llamativo de esta época son las margas o arcillas rojas y, por otra parte, las abigarradas o versicolores (los niveles rojos se formaron por la meteorización/oxidación en contacto con el oxígeno del aire y los niveles azulados por anoxia, es decir, falta de oxígeno).

Consecuentemente la forma del relieve más frecuentes de estas arcillas son las cárcavas o barrancas que dan lugar a una topografía abrupta que se denomina "malastierras" (badlands).

También es característico de esta época la aparición de areniscas rojas, es decir, arenas, actualmente endurecidas, depositadas en los cauces o en las riberas de los ríos, lo que indica que las corrientes fluviales eran importantes para determinadas etapas del Triásico.

También es propio de esta época los afloramientos de rocas verdes de origen volcánico (ofitas). Durante el Triásico hubo etapas en las que el magma llegó a atravesar todas estas rocas sedimentarias ya depositadas. Cuando el magma alcanzaba la superficie se solidificaba y formaba las rocas volcánicas.

Otra característica es la abundancia de evaporitas como el yeso y la sal común. Las evaporitas son rocas sedimentarias que se forman por cristalización de sales disueltas en lagos y mares costeros), algo que ocurre en costas desérticas y muy áridas de Pangea II y llanuras de salmuera. Las condiciones medio ambientales impidieron el desarrollo de la vida. Era un mundo terrorífico.

Andalucía durante el Triásico era una extensa llanura costera (cruzada por ríos con cauces amplios y poco profundos (facies Keuper). En las zonas cercanas al litoral se desarrollaron lagunas, charcas y marismas.

En una fase anterior, el Triásico Medio (facies Muschelkalk) el nivel del mar Tethys subió notablemente, de tal manera que casi toda Andalucía estuvo sumergida bajo las aguas marinas hace unos 228-245 millones de años. La costa en aquel entonces se situaba cerca de Bailén-Linares, Navas de San Juan, etc. Es característico de esta fase las formaciones carbonatadas típicas de ambientes marinos someros, tipo albuferas, del que ahora quedan bloques de calizas o dolomías a modo de torres o figuras. Estos escarpes son discontinuo.

Estas morfologías se dan en el Triásico por erosión diferencial, es decir, cuando la erosión actúa con diferente velocidad según la dureza de las rocas. Lógicamente las arcillas son arrastradas por la erosión dejando al aire estos farallones o torreones calizos.

http://www.ugr.es/~aperezl/Triasicoandalucia.htm

GEORRECURSOS DE ARCHIDONA
La Hoz del arroyo Marín o Pilatos o la Hoz del Ciervo se sitúa en las inmediaciones de la localidad de Archidona, concretamente al sur de la misma. Además de la presencia de ofitas en la misma zona, ya reconocidas en el inventario andaluz de georrecursos, existen otros muchos elementos geológicos dignos de reconocimiento como georrecursos de importancia.

El paraje está dominado por la presencia de rocas de naturaleza yesífera y demás rocas evaporíticas, el discurrir del arroyo Marín ha ocasionado la formación de espectaculares cañones kársticos por disolución de estos materiales, encajándose a lo largo de los años. A pesar de las características poco consolidadas de estas rocas, se han creado laderas de pendientes muy acusadas y gran desnivel, que otorgan a la zona de una importantísima belleza visual y un espectacular valor paisajístico. A este hecho contribuye el trazado en planta del arroyo Marín en forma de media luna asemejándose a una hoz, característica que es origen de su denominación. Sin embargo, la sinuosidad del trazado no es una peculiaridad propia de esta zona sino que es constante a lo largo de todo el discurrir del arroyo por los materiales triásicos. Esto origina la existencia de una importante red de valles encajados o cañones kársticos que se ven culminados con la presencia en el último tramo del Marín con esta Hoz.

Fruto de la actividad kárstica podemos encontrar una gran diversidad de formas exokársticas y endokársticas, además de los, ya nombrados, cañones fluviokársticos. Por tanto, podemos encontrar interesantes microlapiaces en yesos, localizados en los afloramientos de estos materiales más expuestos a la escorrentía superficial y presentes en los propios cañones. Estos microlapiaces, debido a la gran solubilidad que presentan los yesos, son de muy pequeño tamaño, ubicándose concretamente en los afloramientos de rocas yesíferas. De igual forma, aunque en la propia Hoz no se encuentren dolinas o elementos exokársticos de filtración, pues aquí predomina la escorrentía y las surgencias de agua hacia el arroyo, sí que son comunes encontrar estas dolinas en las inmediaciones de este paraje, tanto en las Lagunillas como en la Saucedilla.

En cuanto a las formas endokársticas encontramos numerosas grutas y cuevas en el entorno del arroyo Marín. Ejemplo de ello es la Gruta del Agua, situada en el propio curso del arroyo y producida por la disolución de la base de una gran pared vertical formada de materiales yesíferos, originando una abertura horizontal de varios metros de anchura y escasos centímetros de altura por la que penetra el agua del arroyo. Otro de los elementos destacables cercano al paraje de la Hoz de Marín es la zona conocida como Las Lagunillas. El área de Las Lagunillas se encuentra encerrado por el trazado del Marín, presentando un perímetro prácticamente circular a 100 metros de altura con respecto a la base del arroyo. Este hecho, unido al tipo de materiales del Triásico que se extienden también por esta zona, propicia que los yesos se hidraten fácilmente, dando lugar a la estructura diapírica que domina toda la extensión de Las Lagunillas.

Al igual que ocurre en el karst de Salinas Fuente Camacho, esta estructura diapírica además de originar un destacado desarrollo hidrogeológico, propicia la aparición de diferentes formas kársticas. Es por ello que sea abundante la presencia de dolinas y escarpes por karstificación que actúan como sumideros kársticos. En época de lluvias estas dolinas pueden quedar cubiertas de agua, bien por subida del nivel freático o por colmatación temporal de los sumideros por el sedimento acumulado.

OFITAS DE ARCHIDONA
Las ofitas constituyen cuerpos de rocas ígneas básicas incluidos en el Trías Subbético, donde aparecen numerosos afloramientos habitualmente de pequeñas dimensiones. Sus características estructurales y texturales permiten clasificar estas manifestaciones ígneas como de intrusiones subvolcánicas, procedentes de magmas correspondientes a una serie transicional entre alcalino-sódica a toleítico, que atravesaron la corteza continental adelgazada en un ambiente tectónico de "rifting".

Los magmas generadores de las ofitas presentan origen del manto subcontinental, como consecuencia de intumescencias de la astenosfera en relación con límites divergentes de placas tectónicas. Estos magmas se generaron entre el Trias superior y el Jurásico inferior, como consecuencia del ambiente distensivo que en esa época inició la apertura del Atlántico central.

Karst yesífero de el Brosque
En esta zona es de gran belleza e importancia ambiental no sólo por la existencia de destacados elementos geológicos sino también por la presencia de formaciones vegetales y poblaciones animales relevantes para la comarca y la provincia de Málaga. Desde el punto de vista geológico su importancia reside sobre todo en su morfología kárstica que se ha desarrollado sobre los yesos del Trías. La ausencia de una red hidrográfica de importancia en la zona y desniveles acusados, así como la propia naturaleza de los materiales, ha propiciado la creación de un karst de considerables dimensiones en el que predominan los procesos de filtración de aguas hacia el interior de los materiales triásicos. Debido a esta acción de disolución y filtración se hancreado numerosas dolinas y sumideros kársticos, ya sean en forma de ponors o bien como simas. Las surgencias de agua más importantes del complejo hidrogeológico situado en los materiales que componen la zona del Brosque se sitúan al norte de este paraje, apareciendo la mayoría en el tramo final de la ladera Este de la Garganta del Guadalhorce. De todas estas formas se acentúa la profusa presencia de dolinas en toda la superficie del Brosque. Las dolinas existentes son de variados tamaños y formas, llegando a adoptar tamaños semejantes a uvalas y formas similares a valles ciegos, donde los pequeños arroyos que discurren por la zona terminan en un ponor o sima. Esta sucesión de suaves escarpes por disolución de los yesos origina un relieve característico alomado propio de los campos de dolinas.


Garganta del Guadalhorce
El río Guadalhorce discurre, en su tramo alto, por la Comarca Nororiental de Málaga, naciendo en las estribaciones nororientales de las sierras Penibéticas. Desde allí, recorre el sur de la comarca por la depresión del Guadalhorce formada en los materiales postorogénicos de la depresión de Antequera – Archidona y el flysch del Campo de Gibraltar. Al salir de esta depresión, comienza su transcurso por los materiales del Trías de Antequera, provocando una acción fluviokárstica. Es por ello que seforma una estrecha y pronunciada garganta en forma de cañón kárstico sobre materiales yesíferos. Las características genéticas que presenta esta garganta son similares a las de la Hoz del arroyo Marín, sin embargo, los relieves que ofrece, siendo ambos valles encajonados, difieren en cuanto a su trazado en planta y los paisajes que forman. La garganta del Guadalhorce se presenta en una disposición general más rectilínea, con laderas pronunciadas de similar desnivel próximo a los 80 metros y que,en determinadas zonas, pueden llegar a presentar mayores desniveles. Sin embargo, el trazado sobre estos materiales del Guadalhorce, aunque presente una disposición general recta, su discurrir es sinuoso originando multitud de recodos y cambios de dirección. La amplitud del valle, o cañón kárstico es menor, con presencia de numerosas paredes verticales originadas por el desprendimiento de rocas y materiales producto de la disolución. Además de las paredes verticales, aun se aprecian los restosde rocas desprendidas y las grietas que provocarán en un futuro nuevos desprendimientos. La actividad fluviokárstica que ha provocado la creación de esta garganta continúa su labor modeladora del terreno ayudada por la fácil disolución de los materiales kársticos que la forman y la fácil erosión de las demás rocas, entre las que abundan formaciones arcillosas y margosas, la cual destaca sobretodo en su tramo inicial y final. En su tramo inicial el río discurre por la llanura elevada que formanlos materiales del Trías y se va encajando hasta formar la garganta. En las inmediaciones de este paraje encontramos importantes masas de rocas carbonatadas de edad Jurásica correspondiente al Alto de la Breña y pertenecientes al municipio de Antequera. Aquí también pueden apreciarse los frentes de cabalgamientos afectados, a su vez, por una estructura en pliegues anticlinales. La salida del río Guadalhorce a la vega de Antequera provoca un paisaje espectacular en el que se puede observar perfectamente el perfil en los materiales triásicos. En este paraje existen otros elementos destacables como formas kársticas, es numerosa la presencia de surgencias, de muy variados tamaños, que dan salida al agua, de facies sulfatadas, contenida en el complejo hidrogeológico existente en los materiales yesíferos. De todas ellas, la surgencia de agua más relevante es la que a dado lugar a la formación de la conocida como Cueva del Agua. Situada a media ladera en la salida hacia la Vega de Archidona del río Guadalhorce, se trata de una gruta de aproximadamente 150 metros de longitud ocupada parcialmente por agua. Puede accederse a ella por una pequeña entrada de poco más de 50 cm de altura que pasa a una serie de cavidades de mayor altitud conectadas por diversos saltos de agua y pasos estrechos. Esta es una de las cavidades más importantes situadas sobre los terrenos que conforman el Trías de Antequera. La Cueva del Agua es la representación más importante de las formas endokársticas en yesos de la comarca y del complejo hidrogeológico presente en este paraje. Desde el punto de vista geomorfológico también destaca la presencia puntual de materiales triásicos carbonatados correspondientes a la facie Muschelkalk, formada por calizas y dolomías. Estos materiales, debido a su diferente velocidad y facilidad de disolución, así como a su mayor dureza y resistencia a la erosión, provocan la existencia de una serie de elementos muy característicos dentro del relieve de la Garganta del Guadalhorce. De todos ellos destaca el Peñón del Mediodía, que se eleva a modo de torreón calizo sobre la Garganta del Guadalhorce al situarse en el punto más alto de dicha garganta. Este peñón puede observarse desde cualquier punto de la Vega de Archidona aportando una gran riqueza visual al paisaje de la zona.