20200223-Ruta de los molinos - Cuevas

Una ruta pintoresca y muy sencilla, ideal para realizar con la familia.
Partimos del pueblo de Cuevas al que normalmente se accede a través de una magnífica caverna natural de unos 300 metros de longitud, parcialmente iluminada y que ya es en si misma un buen reclamo.
De hecho, este pueblo está ganando en popularidad por lo que en los momentos más intensos del veranos, es fácil que se puedan producir ciertas "aglomeraciones" y pueda ser difícil aparcar, pero en esta época del año, no hay ningún problema.
La ruta está perfectamente señalizada y comienza por un camino de asfalto en el que no hay tráfico que circula entre la vía del tren de FEVE (por la que no sé si llegará a pasar algún tren) y el río Sella. Esta primera parte, de unos dos km, es totalmente llana.
En un momento dado, el camino gira hacia la derecha llegándose a unas casas y a partir de ahí se abandona el asfalto y continúa un camino de tierra que poco a poco va ascendiendo a la vera de un arroyo saltarín salpicado de numerosos molinos en diferente estado de conservación que son los que dan nombre a la ruta.
Esta parte del camino es preciosa, atravesando un bosque natural en la que todo está cubierto por una capa de musgo y líquenes.
La sombra y la proximidad del arroyo aportan frescor al caminar, y la posibilidad de inspeccionar, con cuidado y respeto, las ruinas de los molinos, aporta un plus de entretenimiento a una ruta ideal para realizar con los peques.
Al cabo de unos 4 km, se alcanza el que resulta ser el último molino pero el camino sigue monte arriba, ofreciendo la opción de una ruta circular que termina regresando a Cuevas de la que se puede encontrar el track en diversas publicaciones de esta página, pero que requiere superar una distancia y un desnivel que no son aptos para niños pequeños, por lo que la opción en este caso es regresar desandando el mismo camino.
En Cuevas existe un restaurante en el que se puede comer muy bien, y también zonas para hacerlo de bocata. En cualquier caso, la cercanía a Ribadesella nos ofrece multitud de alternativas para todos los gustos y bolsillos.
Una excursión estupenda.