20220121 Hoces del Cabriel. Rutas Naranja (6) y Morada (5). Circular

Ruta que reúne dos de las que figuran en la web del PN de la Hoces: las rutas 6 (naranja) y 6 (morada). Para hacerla nos basamos en la ruta que registraba el usuario "club32" en octubre del 2015.
Para iniciar estas rutas hay que llegar al Parking "Ruta Trincheras" donde se puede dejar el coche. Hay unos paneles que muestran las diferentes rutas. Desde este parking iniciamos la caminata siguiendo las indicaciones de la ruta 6 (naranja) que nos lleva hasta el mirador de Peñas Blancas. Antes hemos pasado por unos restos de trincheras que se han recuperado y que, según parece, son de la Guerra de la Independencia. Una vez en el mirador de Peñas Blancas se disfruta de unas vistas inigualables sobre las Hoces del Cabriel y Los Cuchillos. también se puede ver la Presa de Contreras.
Según se regresa por el mismo camino hacia el Parking, cogemos un desvío que enlaza con la ruta 5 (morada) que nos lleva a los Cuchillos del Cabriel. La ruta en su primera parte es cómoda, con caminos anchos y bien señalizada. Hasta que llegamos un poco más allá del km. 5, donde la senda se complica en la bajada hacia las Hoces. En un punto nos encontramos con unos peldaños de hierro fijos a la roca que pueden suponer un impedimento para personas con limitaciones de movilidad. Este es el motivo de haberla calificado como de dificultad moderada
Una vez llegamos a la parte más baja, se disfruta de un paisaje espléndido, llegando incluso, en nuestro caso, a ver unas cuantas cabras montesas.
Tras descansar un rato y reponer fuerzas, continuamos según las indicaciones que nos vamos encontrando, comenzando la subida de regreso hacia el punto de partida. esta se hace siguiendo el barranco de Moluengo. Al principio se trata de una garganta estrecha, donde en algunos puntos el sendero se puede llegar a perder. Una vez llegamos a una zona con terrenos de labor y unas construcciones, se llega en un momento de nuevo ala zona de las trincheras, y el parking, donde finaliza esta ruta.
Es una ruta asequible, salvo en su parte más baja, llegando a las Hoces, donde se complica. Las vistas sobre el río Cabriel y sus Hoces son magníficas, sobre todo si se disfruta de un día despejado, como fue nuestro caso.