2023-04-01 Tres vasares. Torcales del Lobo. Cueva del Arco. Tranco de la Cueva del Agua. GR-247 El Maqui. La Trinchera.
near Nava de San Pedro, Andalucía (España)
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2023-04-01 Tres vasares. Torcales del Lobo. Cueva del Arco. Tranco de la Cueva del Agua. Cueva del Maqui. Por la Trinchera. GR-247. Río Guadalentín
DISEÑO DE LA RUTA
Hemos realizado casi íntegramente, con pequeñas modificaciones, la ruta de Juanmaandando, a quien le agradecemos de todo corazón su contribución a conocer estos rincones, especialmente la repisa de la cueva del Agua.
https://es.wikiloc.com/rutas-senderismo/la-trinchera-torcales-del-lobo-cueva-del-maqui-tranco-de-la-cueva-del-agua-canada-del-mesto-vado-de-119128006
Tambien hemos consultado tracks y topónimos de otros compañeros como Luis Rucabado para acceder a la portilla del Lobo por una loma, que él llama espolón.
Podemos distinguir estas partes:
- Un tramo de la etapa 14 del GR 247 desde el entorno del cortijo del raso del Peral hasta la cañada del Guadalentín.
- Subida desde la cañada del Guadalentín hasta la portilla del Lobo. No hay sendero, como mucho pequeñas veredas y campo a través. En Wikiloc se puede ver que hay muchas alternativas, pero considero que la que hemos elegido es aceptable: no hay que hacer trepadas, en medio de la subida hay una zona con poco desnivel que permite “descansar”, hay una tercera repisa muy bonita, la subida por la loma ofrece espectaculares panorámicas todo el rato, etc.
-Los torcales del Lobo. Torcal según la RAE es un terreno donde hay “torcas”, que son depresiones circulares con bordes escarpados en un terreno. En estas sierras las torcas no son circulares. Las hay de todo tipo, predominando las que forman callejones a modo de grandes grietas/diaclasas. En este tramo está la cueva del Arco y la repisa del tranco del Lobo.
-Repisa de la cueva del Agua en la cuerda de la Marcolla, espectacular paso a modo de vasar en el medio de unos impresionantes tajos verticales.
DIFICULTAD Y DUREZA
La ruta no es dura por los datos de distancia y desnivel, pero es difícil a muy difícil en los tramos dos y tres, es decir, la subida desde el Guadalentín y especialmente las repisas (cornisas o vasares), donde hay que prestar mucha atención y mantener la máxima concentración, porque cualquier caída podría tener resultados fatales. Deben abstenerse las personas con problemas de vértigo, pero la pueden hacer quienes tengan “respeto” o “susto” con las alturas. Estas personas tendrán que utilizar estrategias para concentrarse en dónde/cómo poner los pies y las manos, sin mirar al vacío. En la repisa del tranco del Lobo, hay un metro que se estrecha bastante. Se recomienda abrazar la roca, dejando la mochila hacia el vacío, agarrándose a la roca. También es recomendable dejar las mochilas a la entrada de la repisa. Pasos cortos, a modo de pinguino, en los sitios con más dificultad. Son importantes los bastones, mejor uno solo, para mantener bien el equilibrio. Con la otra mano, vamos tocando la piedra para detectar los salientes y posibles agarraderas.
Sin embargo, hay otros montañeros/as que va por la repisa como si fueran por su casa de noche desde la cama al cuarto de baño sin encender las luces :)
La repisa de la cueva del Agua es bastante ancha y no ofrece dificultad, excepto el terreno rocoso en algunos tramos.
Casco: podría ser recomendable como siempre que se transita al pie de los tajos. Son terrenos dolomíticos, donde la roca tiende a cuartearse y caer pequeños fragmentos. Esto hay que tenerlo en cuenta después de fuertes tormentas y con viento.
No es recomendable hacer esta ruta en solitario, ni siquiera dos o tres personas solas.
MÁS INFORMACIÓN
inicio de la ruta https://goo.gl/maps/BWC2D2bLvPQdwHNBA
Consulta de la meteorologìa:
https://www.aemet.es/es/eltiempo/prediccion/municipios/iruela-la-id23047
https://www.meteoblue.com/es/tiempo/semana/burunchel_espa%c3%b1a_2520699
https://www.windy.com/37.860/-2.868?37.859,-2.874,16,m:eIgaf4o
Topónimos: repisa, cornisa, cintos o vasar (especialmente en Sierra Nevada) se usan para designar a pasos o trancos al pie de unos tajos o incluso a alguna altura considerable de los mismos, que evitan largos recorridos. Tienen el inconveniente de que son arriesgados y poco recomendables a personas con vértigo.
PARQUE NATURAL SIERRAS DE CAZORLA, SEGURA Y LAS VILLAS
Toda la ruta se desarrolla por terrenos públicos dentro del parque natural, excepto el entorno del cortijo de la pasada de las Carretas, que es privado.
https://www.juntadeandalucia.es/medioambiente/portal/web/ventanadelvisitante/detalle-buscador-mapa/-/asset_publisher/Jlbxh2qB3NwR/content/sierras-de-cazorla-segura-y-las-villas-8
SENDEROS HOMOLOGADOS
La ruta pasa por tramas de senderos o derivaciones del GR 247, destancand un gran tramo de la etapa 14
ETAPA 14: Aula de la Naturaleza El Hornico - Refugio Casa Forestal Fuente Acero
Esta larga etapa discurre en su mayor parte por la Sierra del Pozo y tiene como eje al río Guadalentín, uniendo los parajes de El Hornico y Fuente Acero entre los que hay un desnivel de algo más de 500 metros, lo que nos brinda la oportunidad de conocer paisajes muy diversos, desde las templadas zonas adehesadas cercanas al inicio de la ruta hasta los ambientes puramente montañeros de su final.
Podremos pasear, si hacemos un corto desvío, junto a las Cascadas del Guazalamanco, y recorreremos después la famosa Senda de los Pescadores que remonta el río Guadalentín.
Más tarde divisaremos desde arriba el Barranco del Guadalentín, al que descenderemos por la histórica vía ganadera de la Cañada del Mesto para luego caminar junto al mismo río, en el más largo tramo del GR 247 que transita pegado a un cauce fluvial. Tras descansar en el relajante paraje del Vado de las Carretas alcanzaremos la antigua Casa Forestal del Barranco del Guadalentín, en un escenario espectacular presidido por los escarpados Poyos de la Carilarga.
A lo largo de la ruta pasaremos por pinares de pino carrasco, por uno de los mejores cornicabrales del parque, por hermosos encinares y por un excepcional robledal de quejigos centenarios, además de ver en distintos puntos bojedas, grandes y viejos pinos laricios y vegetación de ribera muy bien conservada. Los buitres, las rapaces y los típicos grandes ungulados del parque (ciervos, gamos, cabras monteses, etc.) son muy frecuentes de avistar a lo largo de todo el recorrido.
RESIEGO DE LOS PINOS
El resiego de los pinos, una ancestral técnica de supervivencia serrana
En esta etapa, y a lo largo de otras muchas del GR 247, el caminante se sorprenderá por la presencia de grandes pinos laricios en cuya base hay una oquedad artificial, generalmente negruzca, con restos de resina y muestras de viejos cortes. Son lo que los serranos llamaban pinos tocaos, en los que se resegaba el tronco buscando la resina como fuente de calor. La explicación a este hecho nos la da José Laso Flores, uno de los mejores conocedores de las tradiciones serranas.
Antiguamente se movía mucha gente de día y de noche por las montañas, el interior de los bosques, las riberas de los ríos y los caminos que comunicaban cortijos y aldeas. Había recoveros, arrieros, furtivos, pastores, truferos, maquis, trabajadores forestales, y casi todo el mundo llevaba su navaja y su hacha, entre otras cosas, como herramientas básicas de supervivencia. Por toda la sierra se pueden encontrar pinos tocaos en lugares más o menos estratégicos por donde tenían que pasar estas gentes, a veces en condiciones muy duras, con temperaturas muy bajas, nieve, o lluvia.
En previsión de verse necesitados de una fuente de calor, algunas de estas personas producían heridas con el hacha en pinos estratégicamente situados para que sangraran o lloraran, dejándolo preparado a propósito para utilizarlo en caso de necesidad, ya que de la herida fluía la resina, a la que se aplicaba la llama de una cerilla o de un mechero. De esa forma se obtenía una buena fuente de calor, porque la resina, que es un excelente combustible, ardía de manera lenta y duradera. Era un sistema seguro y eficaz, porque, una vez apagada la resina, el pino volvía a llorar, es decir, a generar más resina y enviarla hacia la superficie.
Probablemente el uso que se hacía de esta técnica era muy controlado para no matar el pino, apagando el fuego cuando se marchaban sin llegar a permitir que el fuego llegase a destruir el tronco, y buscando un nuevo árbol cuando ya se había apurado el anterior, ya que no hay evidencias de pinos muertos por este motivo.
En otras ocasiones se aprovechaban para esta práctica los pinos que habían sido anteriormente tocaos por un rayo. Era una técnica básica que evitaba pasar malos ratos, secar la ropa e incluso sobrevivir en casos extremos.
Otro aprovechamiento importante de esta técnica era la obtención de pequeños trozos de madera impregnada de resina (tea), que posteriormente se utilizaba para prender fuego en otro lugar donde fuera necesario, como una hoguera en el monte o la lumbre en la casa, así como para alumbrarse en la oscuridad. Las astillas de tea también se extraían de los tocones de árboles cortados o del nervio de los pinos caídos y en estado de putrefacción.
También se podía improvisar una peguera en miniatura quemando varias teas superpuestas, lo que permitía extraer una pequeña cantidad de pez. Impregnando con la pez un trozo de trapo liado en un palo se obtenía una antorcha que podía iluminar durante una o dos horas, según la cantidad de pez y el grosor del trapo. Para alguien que se pierde, esta fuente de luz y calor puede significar la supervivencia.
https://www.jaenparaisointerior.es/w/etapa-14-aula-de-naturaleza-el-hornico-refugio-casa-forestal-fuente-acero
HISTORIA DEL ÚLTIMO MAQUI
Manuel Calderón 'El Ramiro', último maquis de la sierra, murió en el lugar conocido como Tranco del Lobo (Pozo Alcón) un 26 de febrero de 1952, «al hacer frente a la Guardia Civil cuando esta lo perseguía como malhechor y fugitivo de la guerra de 1936», según consta en el acta de defunción del Juzgado de Paz de Quesada.
GEOLOGIA DEL PREBÉTICO
La ruta se desarrolla por las Zonas Externas de la Cordillera Bética, concretamente en la Zona Prebética.
1.-Cretácico. Prebético Interno. La mayor parte de la ruta: torcales del Lobo y la repisa de la Cueva del Agua.
2.- Jurásico. Prebético Externo. La subida desde el Guadalentín hasta las cercanías de la portilla del Lobo.
3.- Sedimentos miopliocénicos por todo el GR 247 hasta la Trinchera
El Prebético interno y externo
La Zona Prebética o simplemente Prebético puede dividirse, en función de los ambientes sedimentarios y la influencia de las lagunas estratigráficas en: Prebético interno y Prebético externo. Como en casos anteriores, el externo indica que está más alejado del núcleo de la Cordillera Bética y por lo tanto más cerca del margen continental de la placa ibérica, interno indica lo contrario.
Área Norte o de la Sierra de Cazorla. Prebético externo
En general la Zona Prebética presenta un plegamiento parecido al que muestra el fuelle de un acordeón, si bien los pliegues van perdiendo amplitud conforme nos acercamos al Macizo Hespérico (Sierra Morena). En esta zona, el plegamiento, es sustituido progresivamente por escamas o cabalgamientos de escaso desplazamiento, con vergencia Norte, o lo que es lo mismo, deslizamiento hacia Sierra Morena.
El origen de estas escamas está relacionado con el efecto de “frenado” que ejerce el basamento sobre el desplazamiento de una cobertera de poco espesor. Puede observarse el escaso desarrollo del Cretácico, por lo que esta zona corresponde, en gran parte, al Prebético externo.
Edad de las Deformaciones de la Zona Prebética
Las primeras deformaciones registradas por las rocas se producen cuando la plataforma marina se fragmentó al final del Jurásico Inferior, hace 180 millones de años. Entonces se produjeron una serie de fallas o fracturas que afectaron tanto al basamento como a la cobertera sedimentaria que estaba formándose.
A partir del final del Jurásico (durante el Kimemeridgiense), hace unos 145 millones de años, se produce una emersión parcial de la cuenca de sedimentación prebética, por lo que son frecuentes y prolongadas en el tiempo las lagunas estratigráficas, por ausencia de depósitos. Es a partir de este momento cuando se diferencian los dominios: Prebético Interno y Externo, siendo este segundo el que queda emergido, al estar más próximo al borde de la placa ibérica.
Los cabalgamientos y plegamientos se inician a principios del Mioceno medio, hace unos 16 millones de años. Estas estructuras indican compresión según una dirección Sureste-Noroeste.
En conclusión podemos decir que la Zona Prebética ha sufrido tres etapas de deformación importantes, pero la primera bastante separada en el tiempo, con respecto a las dos últimas.
La primera etapa de extensión consistió en la fragmentación de la amplia plataforma marina, poco profunda, que se extendía hace 180 millones de años por lo que entonces era el margen continental del Sur de la placa ibérica. Esta fragmentación produjo una profundización de la cuenca marina, especialmente en el Prebético externo, en donde se acumularon grandes espesores de sedimentos durante todo el Mesozoico (Jurásico medio a Cretácico superior). Esta etapa se ha interpretado como un proceso de Rifting.
La segunda etapa comienza a mostrar los primeros síntomas en tiempos muy recientes, ya en el Mioceno medio, hace unos 14 millones de años. No obstante, la mayoría de los cabalgamientos y pliegues son posteriores al Mioceno superior (Tortoniense superior hace unos 7,5 millones de años). Es una etapa de compresión y fue provocada por la colisión entre las Zonas Externas e Internas, dando lugar a plegamientos y cabalgamientos en la Zona Prebética, que pierden intensidad, salvo en el área de Cazorla en la que se forman multitud de escamas (cabalgamientos de muy corto desplazamiento). Al final de esta segunda etapa de deformación, se producen las fallas de desgarre, de gran longitud (decenas de kilómetros) y desplazamiento, que afectan de forma importante a la Zona Prebética en los extremos del arco (Hellín y Pozo Alcón).
Finalmente, desde hace unos 7,5 millones de años hasta la actualidad, se produce una etapa de descompresión motivada por la elevación de la Cordillera Bética que da lugar a multitud de pequeñas fallas normales y la reactivación alguna de las fallas lístricas del Jurásico inferior.
Un hecho reseñable es que todas estas etapas de deformación ocurrieron en ambiente submarino, ya que la elevación hasta los casi 2.400 msnm se ha producido en los últimos 5,3 millones de años, es decir, durante el Plioceno y el Cuaternario.
Con mucho han sido las deformaciones compresivas las que más han afectado a todo el conjunto de la Zona Prebética. Se estima que el acortamiento debido a la formación de pliegues y el solapamiento de materiales causado por los numerosos cabalgamientos, es de unos 110 Km, nada más y nada menos.
Durante todas estas fases han tenido una importante implicación los materiales plásticos, altamente deformables del Triásico superior. Estos han permitido un despegue generalizado, a gran profundidad, de la cobertera sedimentaria con respecto al basamento de la placa ibérica. Por lo tanto podemos decir que estos materiales han funcionado como un “lubricante natural”, sobre el que se han desplazado y deformado los materiales suprayacentes.
https://granadanatural.com/blog.php?codigo_blog_articulo=54
DISEÑO DE LA RUTA
Hemos realizado casi íntegramente, con pequeñas modificaciones, la ruta de Juanmaandando, a quien le agradecemos de todo corazón su contribución a conocer estos rincones, especialmente la repisa de la cueva del Agua.
https://es.wikiloc.com/rutas-senderismo/la-trinchera-torcales-del-lobo-cueva-del-maqui-tranco-de-la-cueva-del-agua-canada-del-mesto-vado-de-119128006
Tambien hemos consultado tracks y topónimos de otros compañeros como Luis Rucabado para acceder a la portilla del Lobo por una loma, que él llama espolón.
Podemos distinguir estas partes:
- Un tramo de la etapa 14 del GR 247 desde el entorno del cortijo del raso del Peral hasta la cañada del Guadalentín.
- Subida desde la cañada del Guadalentín hasta la portilla del Lobo. No hay sendero, como mucho pequeñas veredas y campo a través. En Wikiloc se puede ver que hay muchas alternativas, pero considero que la que hemos elegido es aceptable: no hay que hacer trepadas, en medio de la subida hay una zona con poco desnivel que permite “descansar”, hay una tercera repisa muy bonita, la subida por la loma ofrece espectaculares panorámicas todo el rato, etc.
-Los torcales del Lobo. Torcal según la RAE es un terreno donde hay “torcas”, que son depresiones circulares con bordes escarpados en un terreno. En estas sierras las torcas no son circulares. Las hay de todo tipo, predominando las que forman callejones a modo de grandes grietas/diaclasas. En este tramo está la cueva del Arco y la repisa del tranco del Lobo.
-Repisa de la cueva del Agua en la cuerda de la Marcolla, espectacular paso a modo de vasar en el medio de unos impresionantes tajos verticales.
DIFICULTAD Y DUREZA
La ruta no es dura por los datos de distancia y desnivel, pero es difícil a muy difícil en los tramos dos y tres, es decir, la subida desde el Guadalentín y especialmente las repisas (cornisas o vasares), donde hay que prestar mucha atención y mantener la máxima concentración, porque cualquier caída podría tener resultados fatales. Deben abstenerse las personas con problemas de vértigo, pero la pueden hacer quienes tengan “respeto” o “susto” con las alturas. Estas personas tendrán que utilizar estrategias para concentrarse en dónde/cómo poner los pies y las manos, sin mirar al vacío. En la repisa del tranco del Lobo, hay un metro que se estrecha bastante. Se recomienda abrazar la roca, dejando la mochila hacia el vacío, agarrándose a la roca. También es recomendable dejar las mochilas a la entrada de la repisa. Pasos cortos, a modo de pinguino, en los sitios con más dificultad. Son importantes los bastones, mejor uno solo, para mantener bien el equilibrio. Con la otra mano, vamos tocando la piedra para detectar los salientes y posibles agarraderas.
Sin embargo, hay otros montañeros/as que va por la repisa como si fueran por su casa de noche desde la cama al cuarto de baño sin encender las luces :)
La repisa de la cueva del Agua es bastante ancha y no ofrece dificultad, excepto el terreno rocoso en algunos tramos.
Casco: podría ser recomendable como siempre que se transita al pie de los tajos. Son terrenos dolomíticos, donde la roca tiende a cuartearse y caer pequeños fragmentos. Esto hay que tenerlo en cuenta después de fuertes tormentas y con viento.
No es recomendable hacer esta ruta en solitario, ni siquiera dos o tres personas solas.
MÁS INFORMACIÓN
inicio de la ruta https://goo.gl/maps/BWC2D2bLvPQdwHNBA
Consulta de la meteorologìa:
https://www.aemet.es/es/eltiempo/prediccion/municipios/iruela-la-id23047
https://www.meteoblue.com/es/tiempo/semana/burunchel_espa%c3%b1a_2520699
https://www.windy.com/37.860/-2.868?37.859,-2.874,16,m:eIgaf4o
Topónimos: repisa, cornisa, cintos o vasar (especialmente en Sierra Nevada) se usan para designar a pasos o trancos al pie de unos tajos o incluso a alguna altura considerable de los mismos, que evitan largos recorridos. Tienen el inconveniente de que son arriesgados y poco recomendables a personas con vértigo.
PARQUE NATURAL SIERRAS DE CAZORLA, SEGURA Y LAS VILLAS
Toda la ruta se desarrolla por terrenos públicos dentro del parque natural, excepto el entorno del cortijo de la pasada de las Carretas, que es privado.
https://www.juntadeandalucia.es/medioambiente/portal/web/ventanadelvisitante/detalle-buscador-mapa/-/asset_publisher/Jlbxh2qB3NwR/content/sierras-de-cazorla-segura-y-las-villas-8
SENDEROS HOMOLOGADOS
La ruta pasa por tramas de senderos o derivaciones del GR 247, destancand un gran tramo de la etapa 14
ETAPA 14: Aula de la Naturaleza El Hornico - Refugio Casa Forestal Fuente Acero
Esta larga etapa discurre en su mayor parte por la Sierra del Pozo y tiene como eje al río Guadalentín, uniendo los parajes de El Hornico y Fuente Acero entre los que hay un desnivel de algo más de 500 metros, lo que nos brinda la oportunidad de conocer paisajes muy diversos, desde las templadas zonas adehesadas cercanas al inicio de la ruta hasta los ambientes puramente montañeros de su final.
Podremos pasear, si hacemos un corto desvío, junto a las Cascadas del Guazalamanco, y recorreremos después la famosa Senda de los Pescadores que remonta el río Guadalentín.
Más tarde divisaremos desde arriba el Barranco del Guadalentín, al que descenderemos por la histórica vía ganadera de la Cañada del Mesto para luego caminar junto al mismo río, en el más largo tramo del GR 247 que transita pegado a un cauce fluvial. Tras descansar en el relajante paraje del Vado de las Carretas alcanzaremos la antigua Casa Forestal del Barranco del Guadalentín, en un escenario espectacular presidido por los escarpados Poyos de la Carilarga.
A lo largo de la ruta pasaremos por pinares de pino carrasco, por uno de los mejores cornicabrales del parque, por hermosos encinares y por un excepcional robledal de quejigos centenarios, además de ver en distintos puntos bojedas, grandes y viejos pinos laricios y vegetación de ribera muy bien conservada. Los buitres, las rapaces y los típicos grandes ungulados del parque (ciervos, gamos, cabras monteses, etc.) son muy frecuentes de avistar a lo largo de todo el recorrido.
RESIEGO DE LOS PINOS
El resiego de los pinos, una ancestral técnica de supervivencia serrana
En esta etapa, y a lo largo de otras muchas del GR 247, el caminante se sorprenderá por la presencia de grandes pinos laricios en cuya base hay una oquedad artificial, generalmente negruzca, con restos de resina y muestras de viejos cortes. Son lo que los serranos llamaban pinos tocaos, en los que se resegaba el tronco buscando la resina como fuente de calor. La explicación a este hecho nos la da José Laso Flores, uno de los mejores conocedores de las tradiciones serranas.
Antiguamente se movía mucha gente de día y de noche por las montañas, el interior de los bosques, las riberas de los ríos y los caminos que comunicaban cortijos y aldeas. Había recoveros, arrieros, furtivos, pastores, truferos, maquis, trabajadores forestales, y casi todo el mundo llevaba su navaja y su hacha, entre otras cosas, como herramientas básicas de supervivencia. Por toda la sierra se pueden encontrar pinos tocaos en lugares más o menos estratégicos por donde tenían que pasar estas gentes, a veces en condiciones muy duras, con temperaturas muy bajas, nieve, o lluvia.
En previsión de verse necesitados de una fuente de calor, algunas de estas personas producían heridas con el hacha en pinos estratégicamente situados para que sangraran o lloraran, dejándolo preparado a propósito para utilizarlo en caso de necesidad, ya que de la herida fluía la resina, a la que se aplicaba la llama de una cerilla o de un mechero. De esa forma se obtenía una buena fuente de calor, porque la resina, que es un excelente combustible, ardía de manera lenta y duradera. Era un sistema seguro y eficaz, porque, una vez apagada la resina, el pino volvía a llorar, es decir, a generar más resina y enviarla hacia la superficie.
Probablemente el uso que se hacía de esta técnica era muy controlado para no matar el pino, apagando el fuego cuando se marchaban sin llegar a permitir que el fuego llegase a destruir el tronco, y buscando un nuevo árbol cuando ya se había apurado el anterior, ya que no hay evidencias de pinos muertos por este motivo.
En otras ocasiones se aprovechaban para esta práctica los pinos que habían sido anteriormente tocaos por un rayo. Era una técnica básica que evitaba pasar malos ratos, secar la ropa e incluso sobrevivir en casos extremos.
Otro aprovechamiento importante de esta técnica era la obtención de pequeños trozos de madera impregnada de resina (tea), que posteriormente se utilizaba para prender fuego en otro lugar donde fuera necesario, como una hoguera en el monte o la lumbre en la casa, así como para alumbrarse en la oscuridad. Las astillas de tea también se extraían de los tocones de árboles cortados o del nervio de los pinos caídos y en estado de putrefacción.
También se podía improvisar una peguera en miniatura quemando varias teas superpuestas, lo que permitía extraer una pequeña cantidad de pez. Impregnando con la pez un trozo de trapo liado en un palo se obtenía una antorcha que podía iluminar durante una o dos horas, según la cantidad de pez y el grosor del trapo. Para alguien que se pierde, esta fuente de luz y calor puede significar la supervivencia.
https://www.jaenparaisointerior.es/w/etapa-14-aula-de-naturaleza-el-hornico-refugio-casa-forestal-fuente-acero
HISTORIA DEL ÚLTIMO MAQUI
Manuel Calderón 'El Ramiro', último maquis de la sierra, murió en el lugar conocido como Tranco del Lobo (Pozo Alcón) un 26 de febrero de 1952, «al hacer frente a la Guardia Civil cuando esta lo perseguía como malhechor y fugitivo de la guerra de 1936», según consta en el acta de defunción del Juzgado de Paz de Quesada.
GEOLOGIA DEL PREBÉTICO
La ruta se desarrolla por las Zonas Externas de la Cordillera Bética, concretamente en la Zona Prebética.
1.-Cretácico. Prebético Interno. La mayor parte de la ruta: torcales del Lobo y la repisa de la Cueva del Agua.
2.- Jurásico. Prebético Externo. La subida desde el Guadalentín hasta las cercanías de la portilla del Lobo.
3.- Sedimentos miopliocénicos por todo el GR 247 hasta la Trinchera
El Prebético interno y externo
La Zona Prebética o simplemente Prebético puede dividirse, en función de los ambientes sedimentarios y la influencia de las lagunas estratigráficas en: Prebético interno y Prebético externo. Como en casos anteriores, el externo indica que está más alejado del núcleo de la Cordillera Bética y por lo tanto más cerca del margen continental de la placa ibérica, interno indica lo contrario.
Área Norte o de la Sierra de Cazorla. Prebético externo
En general la Zona Prebética presenta un plegamiento parecido al que muestra el fuelle de un acordeón, si bien los pliegues van perdiendo amplitud conforme nos acercamos al Macizo Hespérico (Sierra Morena). En esta zona, el plegamiento, es sustituido progresivamente por escamas o cabalgamientos de escaso desplazamiento, con vergencia Norte, o lo que es lo mismo, deslizamiento hacia Sierra Morena.
El origen de estas escamas está relacionado con el efecto de “frenado” que ejerce el basamento sobre el desplazamiento de una cobertera de poco espesor. Puede observarse el escaso desarrollo del Cretácico, por lo que esta zona corresponde, en gran parte, al Prebético externo.
Edad de las Deformaciones de la Zona Prebética
Las primeras deformaciones registradas por las rocas se producen cuando la plataforma marina se fragmentó al final del Jurásico Inferior, hace 180 millones de años. Entonces se produjeron una serie de fallas o fracturas que afectaron tanto al basamento como a la cobertera sedimentaria que estaba formándose.
A partir del final del Jurásico (durante el Kimemeridgiense), hace unos 145 millones de años, se produce una emersión parcial de la cuenca de sedimentación prebética, por lo que son frecuentes y prolongadas en el tiempo las lagunas estratigráficas, por ausencia de depósitos. Es a partir de este momento cuando se diferencian los dominios: Prebético Interno y Externo, siendo este segundo el que queda emergido, al estar más próximo al borde de la placa ibérica.
Los cabalgamientos y plegamientos se inician a principios del Mioceno medio, hace unos 16 millones de años. Estas estructuras indican compresión según una dirección Sureste-Noroeste.
En conclusión podemos decir que la Zona Prebética ha sufrido tres etapas de deformación importantes, pero la primera bastante separada en el tiempo, con respecto a las dos últimas.
La primera etapa de extensión consistió en la fragmentación de la amplia plataforma marina, poco profunda, que se extendía hace 180 millones de años por lo que entonces era el margen continental del Sur de la placa ibérica. Esta fragmentación produjo una profundización de la cuenca marina, especialmente en el Prebético externo, en donde se acumularon grandes espesores de sedimentos durante todo el Mesozoico (Jurásico medio a Cretácico superior). Esta etapa se ha interpretado como un proceso de Rifting.
La segunda etapa comienza a mostrar los primeros síntomas en tiempos muy recientes, ya en el Mioceno medio, hace unos 14 millones de años. No obstante, la mayoría de los cabalgamientos y pliegues son posteriores al Mioceno superior (Tortoniense superior hace unos 7,5 millones de años). Es una etapa de compresión y fue provocada por la colisión entre las Zonas Externas e Internas, dando lugar a plegamientos y cabalgamientos en la Zona Prebética, que pierden intensidad, salvo en el área de Cazorla en la que se forman multitud de escamas (cabalgamientos de muy corto desplazamiento). Al final de esta segunda etapa de deformación, se producen las fallas de desgarre, de gran longitud (decenas de kilómetros) y desplazamiento, que afectan de forma importante a la Zona Prebética en los extremos del arco (Hellín y Pozo Alcón).
Finalmente, desde hace unos 7,5 millones de años hasta la actualidad, se produce una etapa de descompresión motivada por la elevación de la Cordillera Bética que da lugar a multitud de pequeñas fallas normales y la reactivación alguna de las fallas lístricas del Jurásico inferior.
Un hecho reseñable es que todas estas etapas de deformación ocurrieron en ambiente submarino, ya que la elevación hasta los casi 2.400 msnm se ha producido en los últimos 5,3 millones de años, es decir, durante el Plioceno y el Cuaternario.
Con mucho han sido las deformaciones compresivas las que más han afectado a todo el conjunto de la Zona Prebética. Se estima que el acortamiento debido a la formación de pliegues y el solapamiento de materiales causado por los numerosos cabalgamientos, es de unos 110 Km, nada más y nada menos.
Durante todas estas fases han tenido una importante implicación los materiales plásticos, altamente deformables del Triásico superior. Estos han permitido un despegue generalizado, a gran profundidad, de la cobertera sedimentaria con respecto al basamento de la placa ibérica. Por lo tanto podemos decir que estos materiales han funcionado como un “lubricante natural”, sobre el que se han desplazado y deformado los materiales suprayacentes.
https://granadanatural.com/blog.php?codigo_blog_articulo=54
Waypoints
Waypoint
5,098 ft
Antena.
Waypoint
5,008 ft
Atención. Dejamos el camino de bajada al Almicerán
Waypoint
0 ft
Atención: giro brusco sin vereda y pendiente
Waypoint
0 ft
Camino GR 247 etapa 14
Waypoint
3,718 ft
Cañada de Castril GR-247
Waypoint
0 ft
Cortijo de la Pasada de las Carretas
Waypoint
3,798 ft
cortijo de la Paulera
Waypoint
3,782 ft
Cruce del Guadalentín saltando por piedras
Waypoint
4,062 ft
dejamos camino por vereda y campo a través por un encinar
Waypoint
0 ft
desvio al camino del vado de las carretas
Waypoint
3,933 ft
Desvio por camino viejo. Dejamos el GR 247
Waypoint
0 ft
Estaquilla cerca del picón del Grajo. Camino a un árbol singular o a la portilla del Lobo
Waypoint
0 ft
Nacimiento de Siete Fuentes
Waypoint
3,767 ft
Vado del Guadalentín. Opción de inicio de la subida con recorte hasta los quejigos
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Scenery
Difficult
Espectacular! La zona que no conocía: el tranco , es precioso.
La información de lujo Antonio. Gracias!!!
Gracias por tu valoración, Ahnuska. Sin duda, es una de las grandes rutas montañeras de estas sierras.
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Easy to follow
Scenery
Difficult
Preciosa ruta pero subida muy dura y bajada muy técnica. El tranco precioso gracias por compartirla
Gracias, Mamaluji. Ciertamente hay un tramo duro y técnico, aunque hemos elegido la mejor forma de afrontarlo en comparación con otros tracks que hay en Wikiloc. Haces bien en insistir en este tema con vistas a quien quiera hacerla sin llevar un guía o no teniendo las habilidades necesarias. Saludos