2025-05-02 Senda da Pedra Santa

Ruta que parte del puente da Veiga do Louro y sigue por el camino de Santiago para internarse después en As Gandaras de Budiño siguiendo el curso del río Louro, donde se encuentra supuestamente "A pedra da Santa" y rematar con A senda do Lagartón.
(Nosotros nos desviamos en Albelos para visitar alguna cantera, la iglesia de san Pedro construida en honor a San Telmo y recorrer un poco la zona en busca de alguna sorpresa)

La ruta en sí nos pareció bastante fea, ya que transcurre mucho por asfalto, y la parte das Gándaras y Senda do Lagarton, son caminos sin más historia y encharcados en muchas zonas. Solamente encontramos por destacar algo, algún elemento importante: el puente referido, la cruz de san Telmo, A Ponte das febres y la iglesia de San Pedro, también llamada Nosa Señora das Dores.

En cuanto a la descripción, por partes:

-Zona del puente da Veiga do Louro y 500 m de camino: El puente es llamativo y digno de visitar y este tramo , aunque es cortito, es un paseo agradable del camino de Santiago, hasta Ricamonde donde ya empieza el asfalto

-Asfalto hasta el km 4. En este tramo pasamos por la capela da Virxe do Camiño, donde se encuentra imagen venerada esculpida con la propia roca de "A Pedra Santa". Esta parte se hace bastante pesada y fea, ya que no solo es asfalto, sino que va por la propia carretera

-Acabado el asfalto, iniciamos un tramo de casi 1 km hasta Albelos, pasando por la Cruz de San Telmo situada junto al "Ponte das febres" y un pequeño sendero hasta cruzar el río Loro, que nos devuelve la esperanza de poder disfrutar más de la ruta, esperanza que dura poco.

Esta cruz es homenaje a Pedro Gonzalez Telmo, a posteriori, San Telmo y está junto al "puente das febres".
En este lugar San Telmo, peregrinando a Santiago, se sintió enfermo con un súbito acceso de fiebre, lo que propició su regreso a Tui, donde fallecería al poco tiempo. Desde aquella es patrón de Tui.
Suele estar llena de ofrendas de los peregrinos (“Caminante aquí enfermó de muerte San Telmo en abril de 1251. Pídele que hable con Dios a favor tuyo")


-Desvío de la ruta: nos desviamos de la ruta 5 kilómetros con el fin de visitar las lagunas de las canteras, pudiendo ver solamente la primera en todo su esplendor, pues el resto están cercadas por muros o setos.
Recorremos las calles de Guillarei y visitamos la iglesia de San Pedro, también conocida como iglesia da Nosa señora das Dores, construida en honor a San Telmo, en el solar de la casa donde parece que falleció.
La capilla tiene una llamativa puerta tallada con un barco en honor al santo, ya que en la iconografía, se le representa con el hábito blanco de dominico, un cirio y un pequeño barco en la mano.
A continuación, pasaríamos por la protectora de animales, donde hay unos vistosos grafitis, para luego ya retornar al punto de donde nos separamos de la ruta.

-As Gandaras: Nos internamos en esta zona de bosque durante unos 2,5 km. El camino transcurre junto al río Louro, resultando fácil a priori y agradable los primeros 500 metros, pero luego se va cerrando y no nos acaba de transmitir lo que creíamos que sería.
En este tramo se encuentra la zona de A pedra da Santa. Según cuenta la leyenda de la virgen del camino, los niños tiraban piedras al río y éstas aparecían al día siguiente encima del penedo. De esa misma piedra se hizo la virgen del camino venerada en la capilla que lleva su nombre y por la que pasamos al principio de la ruta.
Estos caminos suelen estar anegados, incluso en épocas poco lluviosas, si bien, generalmente se pueden bordear con senderos que han ido surgiendo, pero conviene tenerlo en cuenta.


-Senda do Lagarton: 1,5 km más de lo mismo.
Salimos de la zona anterior a la altura del tanatorio de Guilarei y tras atravesar la vía del tren por un paso bajo la misma, iniciamos este tramo de senda, que transcurre por un camino sin más historia y que como la zona anterior, presenta bastantes zonas anegadas pese a no ser época de lluvias.
Casi al final, dejamos el camino y seguimos por un sendero que concluye en una zona transitable pero con algo de maleza y para la que es necesario prestar atención al track.
Volvemos al puente donde iniciamos la ruta, que deja en nuestras retinas, una imagen anmable.