21-06-2014 HOYO DEL TORO

Sábado por la tarde en el pueblo, toca caminata con el chucho. En esta ocasión, vamos a la cima de la Umbría u Hoyo del Toro. El comienzo del sendero es el mismo que el de Veredas Blancas, aunque poco después de pasar los antiguos merenderos y la alberca propiedad del ayuntamiento, según me acaba de informar mi amigo Antonio, tendremos el cruce que separa ambos senderos. Si antes ibamos dirección oeste, cambiamos a este. Este sendero sube a través del pinar, hasta llegar a una zona de monte bajo, los restos de un enorme incendio de hace varios años. Aún se ven trozos de madera quemada. Aquí vamos a sufrir el sol un buen trecho hasta que alcancemos el cortafuegos, que sube justo desde el inicio del sendero, y sube hasta la cima y límite de provincias (siempre lo he conocido como "el viso de la Umbría). En este punto se mezclan las encinas, chaparros y quejigos con el pinar. Primera parada en el viso, para que mi perro se deleitara persiguiendo las ovejas sueltas que pastaban por allí. El viso, marca un punto de inflexión en la ruta, ya que hasta ahora ha sido una ruta bastante bien marcada, en lo que nos queda hasta la cima, que haremos cresteando, la vereda se va difuminando paulatinamente. Realmente esto no es demasiado problema, ya que tenemos a la vista siempre nuestro objetivo, y al ser una zona muy frecuentada por pastores y cabreros con sus rebaños, hay multidud de miniveredas marcadas por el paso del tiempo. Casi es posible escoger cualquiera de las ciento de alternativas que hay. La "oficial", cambia de vertiente y entra en Malaga para rodear el primer picacho, vuelve a Granada para el segundo, y así va serpenteando hasta llegar arriba, donde tendremos una hermosa panorámica de 360º en el vértice geodésico, llegandose a ver en los días claros hasta las costas africanas. Esta segunda parte es bastante más difícil que antes de llegar al viso y tiene cierto peligro de resbalón, torceduras, etc, ya que vamos mucho rato sobre piedras, y como es lógico algunas están sueltas. Para bajar, vuelta atrás hasta el viso, y bajada por el cortafuegos. La bajada por el cortafuegos es también complicadilla por la fuerte pendiente, aunque marcando un zig zag de lado a lado y siguiendo las miniveredas del paso del ganado que hay marcadas, no tiene porqué ser excesivamente difícil.