Agreda. Cañón del río Val. Cascada del Pozo de las Truchas

En el extremo Suroeste de Agreda, donde se juntan varios arroyos que bajan de la Sierra del Moncayo, se encuentra el Manantial de los Ojillos, nacimiento de río Queiles-Val, que atraviesa la villa de Agreda subterráneamente, para aparecer frente a la Basílica de Nuestra Señora de los Milagros, y bajar por el Paseo de los Molinos, desplazándose barranco abajo, aprovechando su agua, algunas huertas de Agreda, hasta llegar al Cañón del Val, donde los paredones se estrechan y forman un impresionante barranco.

Nuestro recorrido no será idéntico al que ofrece la red de espacios naturales, pero sí muy parecido, no usaremos la PR-SO-20.1, sin embargo a la ida, sortearemos el Plazarín por la derecha llevándonos más rectos al Barranco del Val, mientras que a la vuelta si usaremos la PR-SO-20 por el Camino de Pataroldan.

Arrancamos en Agreda, margen izquierdo de la Basilica de Nª Srª de los Milagros. Nos dirigimos hacia el Sur, pasando por la Plaza la Virgen, y asomándonos a la Plaza Mayor, para seguir por la Calle Vicente y Tutor, y pasar bajo el arco izquierdo del Palacio de los Castejones. Cogeremos la Calle del Barrio, que nos baja a la Puerta árabe del agua, con unas bonitas vistas al valle. Continuando calle abajo, llegamos a las murallas árabes donde nos dan información de la ruta y del lugar, y desde aquí salimos de la villa de Agreda, hacia el Camino de Pataroldan.

Pasamos por las pequeñas huertas, pegadas al río Val, en el primer desvío cogemos el de la izquierda siguiendo el camino y en el segundo desvío, cogemos el de la derecha, para de forma directa, llegar a la zona del Cañón del Val, donde la señalización y obras de acondicionamiento para los transeúntes esta rehabilitada y muy bien marcada como PR-SO-20.

Diríamos que es el comienzo del Cañón del Val, las balizas y pasamanos nos van dirigiendo al interior del barranco. Descendemos por una gran escalinata, a orillas del río, donde encontramos la primera pasarela de madera, que nos permite cruzar el río Val, continuamos entre grandes álamos negros. Los riscos nos arrinconan contra el agua y de nuevo otra pasarela nos cruza a la otra orilla del río Val.

El barranco del Val se estrecha, y un paso que impide cruzar al ganado, pero no a los senderistas, nos adentra en territorio salvaje del Cañón del río Val. Hasta tres veces cruzamos de lado a lado el río Val, hasta una zona de escalinatas ascendente, para de nuevo hacernos bajar.

Un cruce a la derecha nos lleva hacia la cascada del pozo de las truchas, y a la izquierda, hacia la Peña del Tío Fresquito, esta peña la dejaremos para la vuelta.

Continuamos por la senda del Cañón del Val, y apenas 300 m más adelante, bajamos unas pronunciadas escaleras vemos una pequeña caída de agua, no se trata de la cascada del pozo de las truchas. Hay que avanzar unos metros más hacia arriba, con unas pequeñas cadenas a derecha para no correr peligro, y a izquierdas escondida encontramos la bonita y curiosa Cascada del Pozo de las Truchas.

Paradisíaco lugar, donde el agua se desploma entre rocas cubiertas de musgo y helechos. Encajonada la cacada entre rocas de toba, uno de los más valiosos elementos de Cañón del Val.ecordar que estas formaciones de rocas se originan por acumulación de carbonato cálcico, la superposición de capas sucesivas de musgo y cristales de calcio, forman las excepcionales tobas.

En cuanto a la fauna por el Cañón del Val, hay que destacar el buitre leonado, águila real, corzos, ciervos y jabalís. Dependiendo del día y la época, podríamos ver algunos de los mencionados animales.

Después de un buen rato en el luga regresamos sobre nuestros pasos, hasta el anterior cruce, donde cogeremos el desvío a Peña del Tío Fresquito. Una vez en el risco, subimos por el lateral izquierdo, donde una apertura y un pequeño ascenso noslleva a la cima de Peña del tío Fresquito, para tener una panorámica magnifica del Cañón del río Val, y al fondo dirección Sureste asoma tímidamente el macizo del Moncayo.

Descendemos y bajo la Peña del tío Fresquito en su cara sur, una cueva y vivac en buenas condiciones para ser ocupado.Descendemos a la zona baja del Cañón del Val y a la altura de Santa Lucia, cogeremos la PR-SO-20, para enlazar con el camino de Pataroldan a la altura de la depuradora, y unirnos al comienzo del camino, pero esta vez entraremos a la población de Agreda, por el Camino de los Molinos.

Un bonito paseo habilitado para el turismo que transcurre entre riscos, y el río Val, entre exuberante vegetación y hasta alguna bonita cascada, de esta manera llegaremos al parking de donde arrancamos.

Un paseo por el Cañón del río Val y por Agreda, que recomendamos a todos los amantes de la naturaleza, y a ser posible entre los meses de Mayo y Julio. Aún siendo fácil, hay que llevar un mapa, o ruta en gps o movil, porque sobre todo al comienzo hay algunos cruces, que puede llegar a confundir y llevarnos por dirección incorrecta.