Aguamansa - La Crucita - Siniestro Avioneta -Montaña Ayosa - Morra de Cheque - Los Órganos - Ruta del Agua ampliada

Nota sobre la dificultad de la ruta: aunque físicamente es exigente, el único tramo que reviste dificultad es la visita opcional al lugar del siniestro de la avioneta, tramo que además desaconsejo porque la avioneta ya no está, fue retirada a finales de marzo de 2019, diez años después del accidente (en el que resultaron heridos sus tres ocupantes, que afortunadamente sobrevivieron). Este tramo es muy difícil en bajada, y difícil en subida. Sin este tramo, la dificultad técnica no pasa de moderada.
Comenzamos en Aguamansa, siguiendo el sendero de peregrinación a Candelaria, por el que subimos a la Crucita. En esta subida hay un largo tramo en zigzag, que permite multitud de atajos que acortan la distancia pero incrementan la pendiente (nosotros solo cogimos unos cuantos).
En el WP09, si estamos cansados, tenemos la opción de acortar sensiblemente la ruta tomando el sendero a la izquierda, que nos llevará por el trazado antiguo original del PR35 hasta el WP26. Este tramo tiene una gran belleza natural, aunque ha estado cerrado algunas temporadas por desprendimientos de rocas.
En nuestro caso seguimos subiendo a la Crucita, y al llegar (WP10) debemos ignorar los dos senderos más visibles que salen a la izquierda, y continuar subiendo casi paralelos a la carretera hasta ver el sendero que recorre la dorsal (ligeramente a la derecha de la arista)
En el WP11 mi consejo es continuar de frente, el principal atractivo para bajar hasta el WP12 era ver la avioneta, que ya no está. En mi opinión personal, ya no merece la pena la dificultad de la bajada.
Continuamos por la dorsal, cruzamos la carretera (WP14) pasando junto al refugio de Ayosa, y estamos atentos al GPS para dejar el sendero en el WP16.
En este punto subimos en línea recta a la cima del Roque Acebe, para después continuar por el sendero (algo borroso) hasta la cima de la Montaña Ayosa (WP17), donde pasamos junto a una torre de comunicaciones y disfrutamos de una preciosa vista del Teide.
Pero para vistas espectaculares, las que se disfrutan un poco más adelante desde lo alto de la Morra de Cheque (WP20). Sin duda merece la pena este pequeño desvío en el WP19, al que volvemos después para continuar la ruta.
Al llegar al WP25 giramos a la izquierda siguiendo las indicaciones de color rojo del GR 131, y pasamos por otra de las zonas más bonitas de la ruta (los Órganos).
En el WP27 tenemos la opción de acortar el camino y evitar otros cien metros de desnivel, girando a la izquierda hacia el WP33, pero nos perderíamos la Casa del Agua (WP30) y la preciosa subida inicial por el PR35.2, con una larga escalera de peldaños de madera que acompaña al antiguo canal de agua.
En el WP32 aconsejo seguir de frente e ignorar el desvío a la izquierda, sin embargo en el WP34 sí que merece la pena hacer un pequeño desvío de la ruta oficial para llegar, pasando por una cascada (seca, WP36) equipada para rápel hasta el WP37, una casa con sólidos muros de piedra a la que le falta el techo. Desde aquí en teoría es posible continuar por el cauce del barranco hasta la galería de los Nacientes (aproximadamente en el WP38), aunque nosotros damos la vuelta antes.
Continuamos la ruta oficial hasta el WP40, donde podemos visitar opcionalmente la entrada de una galería de agua (WP41) que se encuentra pocos metros más arriba. Desde este punto es posible seguir por el canal (unos metros difíciles) o bien volver a bajar para seguir la ruta tranquilamente por el PR35.2 (el track incluye ambas opciones)
Después pasamos junto a dos decantadores de agua (que se usaban para filtrar las partículas en suspensión y evitar que dañaran la tubería que viene a continuación con fuerte pendiente, técnica ya conocida desde tiempos de los romanos), y en el punto WP44 hacemos de nuevo un pequeño desvío de la ruta oficial para ver un pequeño acueducto de un solo arco desde el WP45.
Terminamos el recorrido por la ruta del agua en el WP46, y aquí giramos a la izquierda por la pista (BC1) para llegar al WP47, donde optamos por una variante poco transitada, un sendero estrecho cerrado con una barra horizontal que se desvía a la derecha.
Este camino tiene un encanto especial (una alfombra de hojas secas en su tramo inicial, abundantes flores en primavera, un árbol de tronco hueco WP48, la finca los Perdigones, con una casa antigua preciosa, y algunos restos de acueductos en la arboleda final), y termina en una valla cerrada que puede sortearse junto al muro del lado derecho (más fácil) o subiendo por unos escalones casi ocultos a la izquierda y saltando después desde la caseta (más difícil)