Aguarales de Valpalmas ó Valdemilaz, Cruz Lígnea y Las Pilas, circular

Ruta clásica a los Aguarales de Valpalmas completada con una larga circular que nos permitirá de una sola actividad visitar, además de los Aguarales, dos puntos de interés arqueológico: la Cruz Lignea y el yacimiento de Las Pilas.

Los Aguarales son una formación geológica consistente en la erosíón de un terreno arcilloso a lo largo de siglos.

En éste lugar próximo a la localidad de Valpalmas, ha actuado un proceso de erosión muy especial, conocido como ‘piping’, que disuelve la roca en el subsuelo creando tuberías y pequeños abarrancamientos. Es por ello que, aunque en muchos otros lugares observemos terrenos erosionados de cierta semejanza, en realidad no lo son y mucho menos en una extensión tan grande.

"Los Aguarales son el resultado de la acción erosiva de flujos de agua superficiales, así como subsuperficiales, en un proceso denominado piping, sobre materiales poco resistentes y en un ambiente semiárido con precipitaciones esporádicas de carácter tormentoso. Se estima que los deleznables materiales que se pueden observar fueron depositados en el Holoceno (últimos 10.000 años) y proceden de la erosión de la cabecera y laderas del barranco. A pesar de la fragilidad de estas formaciones, están cubiertas por una costra de limo y arcilla, que las protege temporalmente de la erosión. Estas costras resultan del flujo superficial del agua que arrastra material limo-arcilloso en suspensión y lo deposita gracias a las irregularidades microtopográficas. Además, en el sustrato de los Aguarales se encuentra una cantidad importante de sodio, que acelera la dispersión del suelo y que pierde coherencia ante la presencia de agua, acelerando el proceso de piping («formación de tubos»)" (Fuente: Wikipedia).

Hecha esta explicación breve, reseño la actividad en sí.

Partimos del Centro Social Santa Bárbara, situado al oeste de la localidad junto a la pequeña variante de la carretera.

Tomamos la calle de enfrente y atravesamos el pequeño núcleo, hasta el Ayuntamiento y la iglesia adosada al mismo. Las calles y las plazas están muy bien arregladas, todo limpio y en orden dando una imagen excelente.

Fotografiada la iglesia y las casas mas bonitas, me dirijo al nordeste justo rebasando la iglesia, hay una calle que baja a cruzar el barranco de Varluenga y continuando por un camino recién arreglado llegaremos a la Fuente Vieja, cuyo entorno está también perfectamente limpio y arreglado.

Desandamos unos metros para virar por un camino señalizado que conduce a los Aguarales, es el PR-Z 102 que ya no dejaremos hasta nuestro objetivo del día. No obstante, hay que tener en cuenta que el camino alterna con tramos de sendero no demasiado cómodos, y aunque está muy pisado por la gran cantidad de visitantes que tiene este lugar, la hierba ha crecido y es algo alta.
Afortunadamente no llega a molestar lo suficiente pero debe considerarse una actividad puramente senderista, no "dominguerista" para personas con impedimentos ó dificultades físicas.
Muy a tener en cuenta llevar bastante agua ya que no existe ningún punto de abastecimiento.

A lo largo de los casi 6 km. de andada encontraremos amplias zonas de monte bajo de enebros, mucho romero, tomillo, boj, coscoja, pequeños carrascales, y muchos campos de cereal en la parte baja del caminito.

Pasaremos el Corral de Blas que es una paridera abandonada, luego un trecho de camino y de nuevo un sendero bastante abrupto.

Finalmente la senda desemboca en el camino principal por el que se accede a los Aguarales en vehículo, opción que mucha gente decide hacer dada la comodidad.

Del camino pasaremos casi de inmediato al estacionamiento único donde comienzan los propios Aguarales.

Inicié el recorrido por la parte baja, metiéndome directamente en elcauce del barranco seco. Toda la ruta está delimitada para evitar daños en el conjunto, y existen dos miradores y algún banco.

Por la parte sur - este, existe un sendero que escapa del conjunto y evita dar un importante rodeo para realizar la parte alta del recorrido. Siendo todo lo cuidadoso que se debe ser, rodeo la zona principal para acceder al punto que señalizo como "Aguarales 3", desde le que se tiene una perspectiva como "aérea" . Hay que tener mucho cuidado porque existen varios agujeros en la parte alta en los que de caer sería muy complicado volver a salir. Asimismo no debemos ponernos demasiado cerca del borde por riesgo de derrumbes.

Desde el punto 3 recorrí la parte alta por otros miradores hasta concluir en el estacionamiento.

En resumen me ha parecido muy interesante ya que no sabía o no recordaba lo de los huecos o chimeneas que se forman, y que son muy visibles en cualquier parte del conjunto. Pude hacer muchas fotos ya que no hay gente entre semana.

Desde el aparcamiento regreso por la pista pero ya no accedí a la senda por la que vine, ya que quise ver más cosas. Si hemos tenido suficiente, la opción mas recomendable es regresar por donde hemos venido.

El camino, algo pesado y polvoriento, conduce hasta la carretera CV-837 que une las localidades de Valpalmas y Piedratajada. Bordearemos un par de parideras, una abandonada, antes de pisar asfalto.

Por el borde de la carretera (sin apenas circulación) haremos 900 m. hasta encontrar un camino a la derecha, por él accederemos al Camino de Pialón, bordearemos el Corral de la Buchaquera y continuaremos hasta encontrar el señalizado desvío a la Cruz Lignea.

En adelante es bueno llevar GPS porque el camino pasa a sendero y se desdibuja un poco. En un par de puntos los labradores lo han borrado / labrado aunque se ve lo suficiente la alternativa.
Finalmente nos encontramos con una baliza de madera muy alta, allí a escasos metros sobre la roca arenisca está tallada la Cruz Lignea (restos arqueológicos).

Continuamos por un sendero incómodo a veces en forma de canal o acequia, bastante lleno de hierba, encontrando finalmente los lagares rupestres de Valpalmas, "Las Pilas".

La senda desaparece por momentos, al suroeste pisando un campo de labor por la margen, hallaremos la continuación y el camino de nuevo. Son pocos metros donde se ha debido "perder" alguna baliza.

Por el camino nos quedan algo más de cuatro kilómetros hasta el coche, se hacen un poco largos pero es la parte de esfuerzo exigible si se quiere ver todo.


MAS EXPLICACIÓN DE LOS LAGARES:

LAS PILAS O EL LAGAR EN VALPALMAS. La tradición oral, de gran importancia para la localización de este tipo de estructuras, ha definido una roca modificada por el hombre en el pueblo de Valpalmas como «El lagar». Indudablemente, debemos pensar en un uso funcional para pisar la uva y extraer el mosto, por su Parecido con otros elementos de estas características, es decir, una pila amplia y de poca profundidad en la que se depositaba y pisaba la uva, y otra inferior, de menor tamaño y más profunda, comunicada con la anterior a través de un orificio, para recibir el mosto. Este conjunto dispone además de una entalladura por debajo de la segunda pila cuya función parece ser para colocar un recipiente en el que recoger el líquido.
Ahora bien, en este conjunto sorprende una pileta circular de mediano tamaño y profundidad que se talló en el centro de la pisadera, pues retendría en su interior una considerable cantidad de caldo y bagazo, a la vez que sería un inconveniente en el momento del pisado de la uva. Quizás fuera este pocillo el que hiciera dudar a Don Antonio Beltrán, quien documentó esta piedra como un dudoso lugar de culto o ritual en un artículo publicado en el Heraldo de Aragón el día 9 de julio de 2001: «Un guarda aseguraba que allí se manipulaba el vino Tempranillo, otros afirman que servía para preparar aceite de enebro. Ni una ni otra cosa parecen plausibles, pero no tengo idea de lo que pueda ser esta curiosa instalación industrial. Lo estudiaremos. Pero quede dicho que se trata de muestras de actividades artesanas y seguramente rituales, que algo cuentan de tiempos pasados, sin que sepamos cuales, de Valpalmas.» La presencia de algunas cazoletas talladas en un lateral de la roca me hace suponer que la pileta central de la pisadera fue excavada posteriormente para el alojamiento de una prensa, de tal modo que, a la vez que se pisaran los racimos de uva, se iría llenando la prensa con el bagazo resultante para extraer de él el mosto que todavía quedara. Todo el caldo obtenido se recogería en el laco. (Fuente: Lagares rupestres aportaciones para su investigación, Autores: Margarita Contreras Villaseñor, Luis Vicente Elías Pastor)