AL PANTANO DE PUENTES

AL PANTANO DE PUENTES

Hacía bastante tiempo que no subía al pantano y el miércoles decidí hacer una ruta semi/larga, que también hacía tiempo que no realizaba y como quería estrenar una nueva mochila la combinación era perfecta así que a las 06:05 salía de mi casa para comenzar la ruta.

La mañana meteorológicamente era perfecta, más bien en la primera hora con bastante fresco, tras pasar por delante del Centro de Visitantes me dirigí a buscar la RM-C15 conocida popularmente como la Carretera Vieja del Pantano, una vez en ella el Salto estaba frente a mi, es este un canal con unos escalones que de pequeños lo conocíamos bien ya que era un lugar frecuentado por los jóvenes para darnos algún que otro chapuzón.
El día comenzaba a clarear y los primeros rayos de sol hacían su aparición, pasado el paraje de Hornillo y a la altura de la Huerta del Nublo merecía la pena parar, darse la vuelta y contemplar la silueta del Astro Rey emergiendo tras las montañas, realmente precioso, pero tenía que continuar quedaban bastantes kilómetros todavía.
Tras pasar por Los Villares y el cruce de Las Canales la carretera toma cierta pendiente hasta una zona de cebaderos desde donde ya se contempla la presa del pantano, hasta aquí trece kilómetros y ya prácticamente bajada, paso por las Casas del Cejo y en el siguiente cruce, Los Juanetes, me sorprende una imponente higuera con sus incipientes higos y ya hasta la cima de la presa todo es subida.

Tras contemplar detenidamente la presa antigua y pasear por encima de la nueva me dirijo hacia una zona que en su día quizás fue un lugar de interpretación de la naturaleza, unos paneles todavía en pie así lo atestiguan pero desgraciadamente hoy en día está abandonado y muy deteriorado, un banco con una buena sombra me sirve momentánea de descanso, aprovecho para comer un poco, beber bastante agua de la que yo llevo y oír lo que tanto me gusta: EL SILENCIO, pero esta tranquilidad dura poco porque nuevamente hay que seguir, son 18 Kms y todavía me quedan otros tantos.

Ya sin más paradas tomo el cauce del Río Guadalentín el cual no abandonaré hasta llegar a pasar nuevamente bajo la autovía E-15, pero antes de llegar a ese lugar decido abrirme paso por entre los profusos tarays, estos son unos arbustos o arbolillos muy ramificados, con unas ramas largas y muy flexibles, desde la base o cerca de ella y que pueden llegar a una altura de hasta 8 metros y así durante un kilómetro.

Pasado el Centro de Visitantes y ya en la zona de La Alberca decido quitarme las rodilleras y cuál es mi sorpresa al observar una garrapata en una de ellas, me la quito así como otra que me subía por el pantalón, sin duda las cogí por la zona espesa de los tarays y desde ahí al punto de partida después de 35,13 Kms, un tiempo total de 8 h 6 min y un dap de 266 metros.

MUY IMPORTANTE:

- En esta época del año no es aconsejable pasar entre los tarays debido a la posibilidad de que se pueda pegar a la ropa algún parásito como pueden ser las garrapatas.
- Cuando llevo algo más de 26 Kms, un chamizo de madera me proporciona sombra y descanso, algo muy importante sobre todo en esta épocas del año.
- La ruta de hoy la considero de tipo moderado, y solo por la distancia, cuando hago la valoración de una ruta siempre pienso en un tipo de senderista con una preparación física aceptable.
- No es nada complicado seguir el recorrido.
- En esta ruta no es necesario llevar mucha comida, frutos secos y alguna fruta serán suficientes.
- Con respecto al agua y si se sale muy temprano tampoco es necesario llevar gran cantidad aunque en época estival y al no existir nada que te proteja del sol, este será un factor muy importante a tener en cuenta.
- No hay posibilidad de abastecerse de agua.
- El calzado para esta ruta con unas zapatillas de montaña es suficiente.
- Recordad que cada persona tiene que conocer y saber muy bien cual es su preparación y estado físico, tened en cuenta que los excesos y las imprudencias muchas veces se pagan.