Alen, Betaio;El Somo,Torrelaseta y Jerelagua. Circular por Saldamando

ALEN, BETAIO, EL SOMO, TORRELASETA Y JERELAGUA, CIRCULAR POR SALDAMANDO

Bilbao a veintitrés de febrero de 2014.
Hoy nos hemos venido a esta zona minera de las encartaciones vizcaínas para dar una vuelta por los lindes con Cantabria.
El día sale precioso y bastante despejado, va a ser uno de esos días de primavera en los que se ve todo. Eso si el viento pega de lo lindo.
Salimos del barrio Alen, en Sopuerta, actualmente solo es un recuerdo de lo que llegó a ser.
Esta ladera acogió a principios del XX a más de mil personas, mineros en su mayoría, tuvo botica, panadería, carnicería, escuelas, cantinas, cuartel y la ermita que aun permanece en pie.
Y es que del interior de estos montes salió mineral de hierro en abundancia hacia Castro y Onton, rumbo a los puertos británicos.
De hecho aun podemos apreciar multitud de restos de edificaciones mineras como los almacenes, lavaderos y depósitos de mineral, los pivotes de sustentación de las líneas de vagonetas aéreas, como la que salía desde torrelaseta y atravesando Alen se dirigía hacia El Ángulo, cerca del Puerto de Las Muñecas, donde giraba (de ahí el nombre) y bajaba hacia Otañes, los planos inclinados, etc…
El municipio de Sopuerta ha nombrado esta zona como parque temático de la minería de Alen, la idea me parece estupenda aunque debo decir que esta poco indicado y faltan carteles explicativos, en fin supongo que todo es mejorable.
Salimos del aparcamiento que hay junto al viejo frontón, por cierto fijaros en el árbol que nace en lo alto de la pared.
Nosotros cogemos la vía que sigue el trazado del ferrocarril minero de la mina Juliana y Marta (porqué tendrán nombre de personas las minas?) y en seguida pasamos cerca de varias instalaciones mineras, depósitos, escombreras, bocaminas, desmontes, etc.
Llegados al collado de Torrelaseta tendremos justo enfrente esta cima a la que se llega sin pegas por la pista que cruza las plantaciones de eucaliptos, aun no son muy altos por lo que hay buenas vistas.
Seguimos en la misma dirección y descendemos al collado junto al Jerelagua, al que subimos sin camino definido pero fácilmente por el bosque de eucaliptos, esta vez son más grandes y no se ve na…
Volvemos a la pista por el mismo camino y ahora bordeamos Torrelaseta, la pista desciende por la ladera del Alen por la beta de mina “la caliza” y nosotros al llegar a un precioso y gran acebo sito a nuestra derecha, nos metemos en los restos de la beta de mina “La Parda” para subir al collado del Somo, si queréis podéis seguir la pista pero cuidao con el barro.
La cima de El Somo es fácilmente identificable desde lejos pues esta coronado por un precioso ejemplar de espino blanco. La herbosa cima suele estar tomada por vacas y caballos, pero hoy no quieren subir por aquí, será que como nosotros aun huelen los restos del caballo que no hace mucho ha sido pasto de los buitres?
Nosotros también preferimos “ahuecar el ala” y nos vamos rápido de aquí.
Tomamos la pista que por la ladera del Alen sube por la campa de la muela superando los pinares que hoy se asientan en la mina Federico hasta llegar al collado Artatxo.
Desde aquí bajaban en tranvía aéreo las vagonetas con el mineral de la mina Federico hasta el inicio del barranco del rio Callejamala. Se aprecia claramente la brecha donde se instaló los cimientos del teleférico.
Una mirada a la izquierda y vemos el importante desnivel que hay que subir, corto pero duro, cuidado con los resbalones.
Una vez superado recorremos el cordal lleno de trincheras de la guerra civil, como toda la zona formó parte del cinturón de hierro y más aun del frente que se produjo tras la caída de Bilbao, mas de dos meses defendiendo posiciones intentando facilitar la huida de la gente.
Ahora recuerdo a algunos mayores contando cómo habían pasado con los niños y la vaca desde Gallarta hasta Ampuero andando por todos los montes escondiéndose de todo y todos…
Bueno volviendo al Betaio, decir que tiene muy buenas vistas y lo preside unos mojones y el buzón del enkarterri.
Volvemos por donde hemos venido intentando resguardarnos de las rachas de viento que pegan con fuerza. Bajamos al collado y emprendemos la ascensión por todo el cordal, al principio se impone una zeta pues el tema es bastante vertical, luego pierde inclinación y llegamos al Artatxo, “cota no puntuable” (778m.) por todo el camino vemos restos de trincheras y en algún rincón no es difícil imaginar un puesto de ametralladora, bajadita al collado y enseguida la cima del Alen o Castro Alen. Cuenta con vértice geodésico, buzón y placas conmemorativas de montañeros desaparecidos, dos de ellas dedicadas a J.R. Romaña montañero caído por el impacto de un rayo en estos montes hace 10 años.
Bajamos siguiendo todo el cordal sin camino claro pero sin ningún problema salvo un trozo de terreno cárstico que tenemos que atravesar con cuidado y que se puede salvar bajando un poco la cota.
Al final del cordal llegamos a la zona de escombreras de las minas y las atravesamos por caminitos a veces resbaladizos pero sin dificultad alguna llegamos otra vez al collado del Torrelaseta y ya por camino conocido volvemos a Alen después de haber disfrutado de un precioso día de monte.


Saludos a todos aquellos a los que nos encontramos y nos vemos en el monte.