Algameca Chica-Baterías San Fulgencio, General Fajardo y Podadera-Cueva Esmeralda y Arco Amalia. Anthercas

Accesos: Desde la circunvalación Cartagena Oeste, por el Barrio de la Concepción a la Carretera Algameca, aparco en el margen derecho a la entrada de la Algameca Chica (37°35'23.13"N 1° 0'6.50"W).

Cruzo la desembocadura de la Rambla de Benipila por el puente artesano, comunica a pie con la otra orilla, para tomar un sendero cambronero, rocoso y aéreo a la entrada de la Algameca Chica, con algún tramo algo expuesto entre cornicales que, aunque en algún caso me arañan, a menudo protegen de posibles caídas bajo los escarpes rocosos del Monte Galeras.

A partir del Mirador de la Muralla Vieja, aparece el peñón con las instalaciones de la Batería General Fajardo, dentro del complejo denominado como C-4, constituido la Batería de San Fulgencio Collado (o 47 Baja y abajo se puede observar su emplazamiento), construida en 1.740 para 5 cañones artillados a barbeta, su misión era impedir el bombardeo y desembarco en las inmediaciones de la Algameca Grande y Chica, perdió su importancia estratégica cuando funcionó la de La Parajola en 1.930. Además de la General Fajardo arriba y La Podadera que no puede verse aún).

El sendero acaba en el cruce de pistas; por la izquierda se asciende al Castillo de Galeras o se baja al Fuerte Navidad; sigo por la de enfrente en ligero ascenso con vistas del Muelle de la Curra y el puerto comercial, donde permanece anclado uno de los enormes buques que realizan cruceros de vacaciones y hacen escala en Cartagena; sigo pisteando rodeando una cota de 91 m por encima del fondeadero del Empalmador Grande, Punta de San Antonio con el Fuerte y Faro de Navidad, enfrente Cala Cortina, el Castillo de San Julián, la Batería de Trincabotijas y algo escondida la Dársena de Escombreras.

Aparece en la Punta del Aire bañada de sol, las instalaciones de la Podadera y su antiguo faro, funcionaba en paralelo al de la isla de Escombreras, batiendo la entrada al Puerto de Cartagena; su primera iluminación aconteció el 15 de julio de 1856. Las autoridades militares reclamaron su traslado donde no estorbase el buen servicio de los cañones, siendo trasladado a la parte más saliente de la Punta de Navidad entrando en servicio nuevamente el 18 de agosto de 1866. Apenas transcurridos 19 años, dejó de ser útil a la navegación, fue suprimido al entrar en servicio los de Navidad y de la Curra en el año 1885.

La pista acaba en la batería subterránea de la Podadera. La decisión de la Monarquía de que la flota de Galeras de España invernase en Cartagena (1667-1670), exigía proyectos que reformaban las fortificaciones, y mejorasen las infraestructuras portuarias al nuevo reto. Se estableció una batería en La Podadera (San Juan de la Podadera), que combinase sus fuegos con la de Trincabotijas, impidiendo la entrada de buques enemigos en la rada cartagenera, pionera de este tipo en la defensa, consistente en disparar a la línea de flotación de los navíos, exigía para el disparo de costa unos asentamientos de baja cota para realizar tiro rasante. Las obras no quedarían finalizadas hasta bien entrado el siglo XVIII, en el año 1.895 entraban en servicio dos cañones Krupp con un alcance de 12.200 m. Desfasada en 1940, las piezas fueron desmontadas para enviarlas a Tarifa, donde fueron emplazadas en la batería de Canteruela, reforzando el control español del Estrecho de Gibraltar.

Tras animada charla con un senderista de la zona y exploración de las instalaciones, sigo en ascenso por sendero al complejo militar sobre el Soto de la Podadera, donde se halla la Batería General Fajardo, compuestas por dos de obuses y una de cañones agrupadas de cuatro en cuatro piezas homogéneas. Las 4 piezas se montaron a barbeta, por lo que aún es visible su planta circular. Tras los sucesos acaecidos durante la Guerra Civil (1936-1939), la batería fue perdiendo importancia militar, hasta que se desartillan los últimos obuses en 1960, quedando como depósito de municiones. Su abandono en 1994 la dejó expuesta a la ruina y el expolio.

Entro en el abandonado cuartel, articulado en torno a un patio central que distribuye a las salas en dos plantas; construido de acuerdo con el Plan O'Donnnell de 1.860, para el alojamiento de la tropa que servía en las baterías conjuntas; desciendo pisteando, con vistas del Fuerte de Galeras y de las entradas marítimas pertenecientes a las dos Algamecas; bordeo la Batería de San Fulgencio retomando el sendero de la ida a la Algameca Chica, asentamiento de barracas cuya primera casa esta datada en el año 1778, conviven unas 100 familias en casas de madera y cemento coronadas por tejados de uralita, construidas casi sobre el agua, como en Shanghái, cada vecino dispone de sus cubas de agua; no están inscritas en ningún sitio "Se traspasan con un apretón de manos”. Hay cinco administraciones implicadas: Defensa, propietaria del terreno, el Ayuntamiento, la Comunidad Autónoma, Costas y la Confederación del Segura. En 1881 había cinco viviendas y una taberna, estamos ante un poblado con dos siglos de historia, donde la barraca de la tasca acumula 100 años.

Después de transitar por su única calle disfrutando de semejantes rincones, vuelvo a cruzar el puente de bloques y la zona destinada a las barracas del margen derecho; la pista en ligero ascenso acaba descendiendo a Cueva Esmeralda; retrocedo unos metros bajando por sendero tortuoso a la Cala del Reflector para acercarme al bonito Arco Amalia, ocupado por bañistas y con una cuerda de nudos afeando este rincón escarpado; solo me que queda regresar al aparcamiento, ahora que se hace notar otra de las olas, y no de mar precisamente, que estamos padeciendo tras el puto covid con temperaturas extremas, que aconsejan madrugar y acabar pronto de rutear.

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