Allué circular barranco de Senerol.

Siguiendo los pasos de Sesasica, hemos recorrido el barranco de Senerol hasta poco más arriba del bonito salto con su badina (poza) que hay cerca de donde se une el sendero que seguimos desde Allué con la precaria pista que conduce hacia Ipiés.
El sendero parte de Allué en dirección sur ascendiendo de forma moderada por el extremo oriental de la Sierra de San Pedro, remontando el barranco de Senerol. Como a unos 20 minutos de Allué hay un desvío a Sandiás en bajada y tomamos el de Abenilla que sube. Cruzamos por algunas "rayas" que vemos que continúan al otro lado del barranco creando unas curiosas formaciones geológicas en medio de estos valles en forma de paredes rocosas longitudinales.
Cruzamos algunos restos de antiguas construcciones dejando atrás un desvío a la derecha de una de ellas que se adentra hacia la vertiente sur de la Sierra de San Pedro con otras opciones para caminar. Nosotros seguimos sin abandonar dirección sur hasta alcanzar el salto antes mencionado del barranco, donde poco después salimos a la pista. Aquí giramos a la izquierda ya en dirección norte y después este, hasta un collado al sur de Peña Cuerva, lugar donde tenemos en frente una magnífica "raya" y vistas al vecino barranco de San Antón. Aquí tenemos diferentes opciones en carteles indicativos. Tomamos la de Allué que de forma suave primero y más fuerte al final baja hasta cruzar de nuevo el Senerol y en una pequeña subida cerramos el círculo en el primer desvío que vimos en la ida.
La vegetación está formada por el dominio del pino royo pero muy enriquecido al mezclarse con no pocas especies arbóreas más. Según la orientación de la orografía encontramos muchos caxigos ( quejigos), a veces formando pequeños bosques, tremoletas (álamo temblón) también formando manchas puras sobre todo en umbrías y zonas frescas, y muchos azirones (arces) tanto el ópalus como el campestre, creando un espectáculo de color en las fechas otoñales. Podemos ver también arto (espino albar), moixera (mostajo) buxo (boj) dominando el sotobosque y alguna cardonera (acebo ) si estamos atentos.