Almedinilla y sus alrededores

En la programación de esta jornada, mi amigo Manuel Luis, ha considerado y entrelazados tres senderos de pequeño recorrido existentes en las inmediaciónes de Almedinilla, con el fin de conseguir más distancia y conocer más puntos de interes.
Iniciamos la marcha desde la misma localidad de Almedinilla, siguiendo las indicaciones de la ruta denominada "Tierras altas del Caicena - Cerro de la Cruz", se trata de un sendero bien señalizado, de corto recorrido, pero de fuerte subida, con un desnivel aproximado de 200 metros. Pasamos por canteras abandonadas, cuevas y varios miradores naturales con vistas espectaculares al pueblo, incluido el edificio del museo historíco y sus alrededores. Una vez en la cima, nos sorprende el pequeñísimo tamaño de la Ermita de la Cruz, que además hace de mirador con fabulosas vistas. Unos pasos más adelante nos encontramos con restos de trincheras y otras fortificaciones de la guerra civil, donde al parecer estuvo estacionado el frente entre los dos bandos, durante bastante tiempo.
Un poco más adelante, nos encontramos con la entrada, cerrada por el Covid-19, del poblado Ibero denominado Cerro de la Cruz, con restos arqueológicos y donde se han construidos espacios que recrean como era la vida de nuestros antepasados en aquellas épocas.
Seguimos nuestra marcha, ahora en descenso por un camino de hormigón, continuando por caminos y rodadas de vehículos entre buenos olivos de la variedad picuda, pasamos junto a la almazara de la Cooperativa Nuestra Señora del Carmen, a la que bordeamos junto a la cerca por su margen derecho. Justo antes de llegar a la carretera, giramos de nuevo a la derecha por un camino que nos llevará al paraje de la Cascada del Salto del Caballo. Se trata de una zona muy concurrida por personas de todas las edades, situado a 1400 metros de Almedinilla y donde se puede disfrutar de este espectacular salto de agua y da la posividad de hacer buenas fotografias. Dada la importancia del agua, es aconsejable visitarla despues de lluvias abundantes.
Una vez recobradas las fuerza con el bocata, nos dirigimos a Almedinilla por el sendero lineal de ida y vuelta perfectamente señalizado. Su trazado va paralelo al rio Caicena y aprovecha una antigua vereda del ganado y parece que un camino de época romana, desde el mismo se ven edificios en ruinas, que fueron molinos que aprovechaban la fuerza del agua para la molienda del grano. El sendero finaliza en el bonito paraje de Fuente Ribera, en las inmediaciones del Museo Histórico.
A continuación nuestra intención era visitar la Villa Romana, pero también estaba cerrada, como medida preventiva contra el Covid-19, por lo que teníamos dos opciones, ir a ver la Cascada del Zurreón y dar por finalizada la ruta, o incluir la subida al Tajo de las LLanas, decidimos lo segundo y reanudamos la marcha. Este tramo, es básicamente un subida y bajada bastante pronunciada, de aproximadamente unos 100 metros de desnivel, con espectaculares vistas desde la cima. Debo decir que este último trayecto fue complicado, por la falta de señalización en todo el recorrido, incluso la falta de sendero en la bajada. Es claro que todos los alrededores de Almedinilla están muy cuidados y señalizados, por lo que no entiendo como este sendero, anunciado a su inicio, esté tan dejado, espero que por quien corresponda, ponga fin a su abandono.
Por último, ya dentro de la localidad, vimos la Cascada del Zurreón y tras las preceptivas fotos, dimos por finalizada la mañana.