Alto de Llerandi y Bosque de Cea 'PR AS-274' (Parres)

Recorrido circular del PR AS-274 en el Bosque de Cea, con ascensión al Alto de Llerandi o Cabezón, máxima altitud de la Sierra de la Vega, partiendo del Alto del Caleru, un poco antes de llegar a Llerandi.

Alto del Caleru (501 metros) - Cabañas de Coriello (685 metros) - Alto de Llerandi (869 metros) - Cabañas de Coriello (685 metros) - Puente sobre el río Mampodre (460 metros) - Collada Llombecina (548 metros) - Bau la Faya (395 metros) - Cruce del Sedu (370 metros) - Cantu el Roblón (560 metros) - Alto del Caleru (501 metros).

Por la N-634 y en Ozanes, un poco antes de llegar a Arriondas, seguir a la derecha por la PR-4 durante unos 6 kms. Después de Tospe, se encuentra el Alto del Caleru, principio de la ruta con un panel informativo del PR AS-274 y el desvío a la izquierda, por donde se comienza a caminar. A la derecha de la carretera, hay un pequeño espacio de aparcamiento, para unos 4 o 5 vehículos.

Por amplio camino y a 300 metros, llegamos al cruce del Prau de Arriba o Cimalavilla, lugar de confluencia con el recorrido de vuelta. Elegimos comenzar por la derecha, mientras a nuestra izquierda vamos viendo las canteras de la Peña San Cosme, en las que unas huellas marcadas en la roca, se conocen como "las pisadas del diablu", según la mitología popular. Integrada en la peña vemos también, una corripia con unos impresionantes ejemplares de cerdos.

Tras un par de pendientes hormigonadas, alcanzamos las abiertas camperas de Llaxe. Estamos también transitando por el PR AS-275, ruta de la Mota Cetín, la cual abandonamos, para continuar por un desvío a la izquierda, que nos lleva a las Cabañas del Coriello. Decidimos antes de continuar el PR, ascender desde aquí al Alto de Llerandi, máxima elevación de la Sierra de la Vega, también conocida como de Llerandi o Ameña.

Desde las cabañas sale una sendero a la izquierda, que nos conduce a la antiguas minas de cobre del Coriellu. existe una cerrada y otra a cielo abierto, las dos muy próximas. En la abierta, hay instalada en la galería inferior una estación sismográfica, que se encuentra protegida con un cierre metálico. Justo a la derecha de la mina arranca el sendero, que continua por la parte superior del boquete excavado.

El ascenso se vuelve mas difuso porque las trochas desaparecen, no obstante si vamos arrimándonos hacia la izquierda de la ladera, las calvas entre los peñascos y las cotollas nos permiten ir ascendiendo sin sufrir sus molestos pinchazos. Son casi 200 metros de desnivel desde las cabañas de Coriello, que se solventan sin dificultad, para alcanzar la cima del Alto de Llerandi, también llamado Cabezón.

Un gran jito con un palo, señaliza la amplia cumbre, entre las piedras encontramos un tubo de cristal para las tarjetas. Estamos en la máxima cota de la Sierra de la Vega, la cual rodeamos íntegramente con el recorrido del PR. Los ríos Mampodre a oriente y el Beleño a poniente, dan límites fluviales a la Sierra antes de descansar en aguas del Piloña. Desde la modesta altura de sus 869 metros, se pueden contemplar los Picos, la cercana Mota Cetín, Les Vízcares, la Sierra de Pesquerín y la del Sueve, además de los verdes valles del concejo de Parres. Su atalaya es un gran complemento al recorrido.

De vuelta a las cabañas de Coriello, seguimos a la izquierda por un sendero en ocasiones empedrado, que nos desciende sin tregua a través de los Praos de Corrales, a cruzar el río Mampodre por un puente de madera. A partir de aquí toca de nuevo ascender, todo es zona húmeda de bosque, el barro hay que sortearlo en ocasiones y pisarlo en otras. Otro puente de madera sobre la riega Bramador, nos conduce a un sendero, que se encajona entre muros de piedra cubiertos de avellanos.

Seguimos ascendiendo ya en espacio mas abierto, hasta alcanzar el Collado Llombecina. Es un "punto y aparte": salimos a una pista forestal amplia, al Bosque de Cea, a un caminar cómodo en el que podemos admirar mientras descendemos, hayas que se pierden en el cielo, robles y los singulares alerces, pinos de hoja caduca de color verde claro, con piñas pequeñas y que llegan a alcanzar los 50 metros de altura. Sus hojas, la corteza y la resina tienen propiedades medicinales, cuando otoñan su metamorfosis amarillo/oro es todo un espectáculo de color.

Cuando llegamos al Bau la Faya, unión del río Mampodre con el arroyo de Las Cabañas, el camino se encajona en la Riega del Tornu. Es otro tramo de excelsa belleza, con el camino entre el río, el bosque y la peña. Un puente traslada el camino a la ladera izquierda del rio, para descender al desvío del Cruce del Sedu. A partir de aquí tenemos una dura y permanente subida, por la ladera oriental de la Sierra de la Vega, mientras el río Mampodre se esconde a nuestra vista en un profundo barranco.

Alcanzado el aéreo Cantu del Roblón, la pendiente suaviza. En una revuelta vemos a nuestra izquierda la Cueva de la Llorea, antes de alcanzar el Mirador del Sueve: un panel informativo marca las principales cotas de la sierra, con la bonita panorámica de las cabañas de Bon por debajo del camino. Ya en descenso, llegamos al cruce del Prau de Arriba, para continuar hasta nuestro punto de partida en el Alto del Caleru.

NOTA: Damos como moderado la calificación del recorrido, debemos tener en cuenta la influencia por las zonas de barro, en según que época. Asimismo, la zona de los puentes de madera hasta alcanzar el collado Llombecina, no está muy señalizada, lo que puede dar origen a algunas dudas, en caso de escasa experiencia en montaña. También la subida al Alto de Llerandi, aunque fácil, carece de señalización.