Antiguo PR-S 56 'Río Rubionzo y robledal de Zarrizuela'

El sendero, que nunca consiguió la homologación, ha sido desnumerado (quedando la matrícula 56 libre), ya que se ha detectado la eliminación de la señalética. Asímismo se ha eliminado de registros FCDME y FEDME.

El breve paseo que aquí se propone recorre la cuenca del río Rubionzo, entre los municipios de Saro y Villacarriedo. Se trata de la cabecera de un pequeño valle de origen fluvial labrado sobre materiales arcillosos y orientado al Noroeste en el sector septentrional de Picojeniro.
El bosque atlántico, en forma de un pequeño robledal que coloniza la ladera orientada al Norte, los restos de la actividad preindustrial ligada a la generación de energía desde el siglo XVIII mediante el aprovechamiento de la fuerza motriz del agua, y el actual modelo de explotación del medio, semejante al pasiego, son algunos de los atractivos de la ruta.

Este sendero recorre casi totalmente la pista que va desde Llerana a Abionzo, que abandona en un tramo al llegar al bonito molino del Río Rubionzo, para internarse en el pequeño Robledal de la Zarrizuela (únicos puntos de interés de la ruta).


Comenzamos a andar en el "centro" de Llerana, donde al llegar vemos un parada de bus a cuya derecha están colocados los contenedores de basura y donde comienza la ruta. Nos movemos por una calle que nos deja en un puente con el que cruzamos el Río Rubionzo.
Nada más cruzarlo tomamos de frente, en ascenso, ignorando una pistuca que lo bordea y pronto llegamos a una bifurcación donde tomamos por la pista a la derecha, por la que al poco rebasamos un criadero de perros.
La pista avanza por entre las fincas, y a ratos veremos antiguo encachado en el centro de la misma para acercarnos al cauce del Rubionzo de nuevo, rebasando unas ruinas.
No tardaremos en llegar a otra bifurcación, donde nos hacemos a la derecha para cruzar un viejo puente sobre el río y encontrarnos con el molino, por cuya izquierda ganamos unos metros de altura y nos movemos por el borde de un muro para rebasar una curiosa cabaña.
Tras la misma, tenemos que estar atentos porque resulta tentador el hacerse a la izquierda a recuperar la pista, pero debemos tomar a la derecha en ascenso y recorrer un corto pero bonito tramo por entre el Robledal de la Zarrizuela.
Del mismo salimos para enganchar la pista de nuevo, que cogemos a la derecha para un tramo de ascenso fuerte y hormigonado.
La pista equilibra la pendiente y salimos a zonas de fincas, con buenas vistas hacia las cabañas de Concha y el Picojeniro y continuamos ganando altura, ignorando varias pistas que se nos unen por la izquierda para poco después entrar en Abionzo por el lado de la pista deportiva, donde terminamos la ruta al lado de otra parada de bus, a cuya otra mano está el cartel explicativo de la ruta.

MONTE DE ZARRIZUELA
Constituye una de las pequeñas manchas bien conservadas de frondosas autóctonas (robles y castaños en este caso) que en la comarca debieron sortear la fiebre deforestadora de siglos pasados y la demanda de madera de astilleros, ferrerías o instalaciones preindustriales como las Reales Fábricas de artillería de Liérganes y La Cavada. Aunque libró la frenética actividad de la Intendencia de Marina, la reducida presencia de ejemplares de gran porte pone de manifiesto el uso que la sociedad campesina dio al bosque con fines constructivos, pues también se utilizaba la madera de robles y castaños para levantar las casas. Aún en la actualidad se reparten suertes de leña entre los vecinos de Abionzo cuando la situación del bosque lo permite.


AVISO: La ruta descrita, así como el track y waypoints los he descargado de mi GPS después de hacerla personalmente. Aun así, debéis de considerarlos meramente orientativos. Los tracks no marcan siempre el itinerario exacto, por tanto, pueden contener errores, esto es debido a que durante la grabación por GPS la recepción de los satélites puede ser débil especialmente en zonas de barrancos, desfiladeros profundos, zonas de bosque espeso, etc. Queda a la responsabilidad de quien las realice, las medidas de seguridad apropiadas para cada dificultad, que dependerán de las CONDICIONES climatológicas, así como la preparación tanto técnica como física del que las realice.
Siempre recomiendo ir acompañado al monte, dejando aviso a un conocido o familiar de nuestro itinerario y tiempos previstos, llevar el teléfono con carga suficiente, agua, comida y abrigo adecuado a la época y recorrido a realizar.
Deja todo como estaba o mejor para que todos podamos seguir disfrutándolo y que las únicas huellas de tu paso sean las de tus botas.