Apodaka-Foronda-Antezana-Legarda-Gereña-Mandojana-Uribarri Viña-Martioda-Mendoza-Trespuentes-Yacimiento Iruña Veleia-Víllodas

Una semana más, el clima sigue sin ofrecerme un fin de semana de buen tiempo, que me sirva para poder hacer una ruta montañera en condiciones. Por esa razón, he optado por hacer lo que llamo una "ruta comodín", un recorrido que se realiza a través de senderos de excelente calidad o por pistas de cemento o carreteras.

En este caso me traslado al extremo occidental de la Llanada Alavesa, en las inmediaciones de la capital alavesa, Vitoria, y andar por varios de sus concejos, en concreto hasta un total de 9 (de Apodaka hasta Mendoza) y 2 de Nanclares de la Oca (Trespuentes y Víllodas).
Como dije arriba, ésta travesía es ideal para hacer cualquier día del año, haga el clima que haga. Es muy sencilla y rápida de realizar por su escaso desnivel y por la comodidad del terreno de principio a fin.


Vuelta al País Vasco desde Ermua. Etapa 94:

La ruta que hoy os propongo tiene, en mi opinión, un grandísimo interés, no solo por el hecho de visitar 11 pueblos, sino también por la gran riqueza arquitectónica e histórica que tienen.

Yo destacaría sobre todo la segunda mitad del recorrido. En la primera, mencionar como curiosidad la iglesia del concejo de Antezana o Antezana de Foronda, en cuyo interior se haya una pinturas a modo de mural, realizadas recientemente en las paredes del monumento, que vi de casualidad en Internet y la verdad es que son chulísimas. No tengo la costumbre de acceder al interior de las iglesias pero hoy si que tenía ganas de hacerlo en este concejo. Lástima que cuando llegué al pueblo, la iglesia se encontraba cerrada. Supongo que se podrá entrar los días y horas en los que se celebre las misas.
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MURAL IGLESIA DE ANTEZANA

Comentar también que se pasa bastante cerca del aeropuerto de la ciudad de Vitoria, aunque también se le conoce como "aeropuerto de Foronda" por encontrarse muy cerca de los pueblos de Foronda y Antezana/Antezana de Foronda.
Las siguientes 4 poblaciones (Legarda, Gereña, Mandojana y Uribarri Viña) se acceden a través de carretera o anchas pistas de piedra/tierra, todos ellos situados muy cerca entre sí.

La segunda mitad del recorrido es a mi parecer la más bonita e interesante, es decir, la parte que transcurre desde el concejo de Martioda hasta mi destino, Víllodas.
En cada una de las 4 poblaciones que visito se hayan algún tipo de monumento o construcción de muchos años de antigüedad y de altísimo valor histórico.

En el primero, en el concejo de Martioda, se encuentra la Torre/Palacio de Hurtado de Mendoza. Originariamente del siglo XII, fue una torre perteneciente al señorío de los Hurtado de Mendoza, pero evolucionó hasta el siglo XVIII, momento en el que se le añadieron varias dependencias, envolviendo al torreón hasta su segunda altura. Dichas construcciones fueron llevadas a cabo por los señores de la torre D. Joaquín María de Mendoza, conde de Villa Fuerte y Marqués de Miraval, con las que dieron nueva vida a Martioda y a su torre, convertida en esos momentos en un palacio dieciochesco.
Es un edificio de planta rectangular, aparejado en mampostería con sillería en los esquinales que supera los veinte metros de altura y el metro y medio de grosor. Consta de planta baja y cuatro alturas más, aunque sólo la primera planta se habitaba.
Hoy en día sólo observamos algunos vanos primitivos góticos, tapiados en las sucesivas reformas, y varias saeteras cegadas.
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TORRE DE HURTADO DE MENDOZA

En el segundo, el concejo de Mendoza, se encuentra la Torre de Mendoza, que tiene una silueta muy pero que muy chula. Es un claro ejemplo de torre-vivienda fortificada. Fue durante más de un siglo la residencia de los Mendoza, uno de los linajes más ilustres de la península. Iñigo López de Mendoza lo mandó construir a principios del siglo XIII.
La torre, de cinco plantas y con elementos del gótico civil, sobresale del entramado arquitectónico. Un muro rodea la edificación con cuatro cubos en sus vértices.
Después de ser residencia de los Mendoza, la torre se utilizó como cárcel. En 1963 fue restaurada, dotándola de todo el esplendor que tuvo siglos atrás, y albergó el Museo de Heráldica de Álava hasta marzo de 2007, fecha en la que fue cerrada al público por no cumplir las normas de accesibilidad.
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TORRE DE MENDOZA

En el tercero, el concejo de Trespuentes, hay que destacar 2 cosas. Por un lado, el puente de Trespuentes, de origen desconocido aunque se considera romano por su cercanía al yacimiento de Iruña-Veleia. Sin embargo, su arquitectura en las partes visibles, responde a cánones más actuales.
Se trata de un puente de trece ojos, de los cuales seis son un poco mayores, los contrarios a la localidad. La sección de las pilas es rectangular con tajamares. Dispone, además de estribos en los extremos. Su longitud es de 118m y su anchura ronda los 4,80 m. Se encuentra construida con piedra caliza, de laja, cogida con argamasa.
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PUENTE ROMANO DE TRESPUENTES

Y por otro lado, quizás la sorpresa del día porque esperaba que estuviera cerrado al público (aunque realmente yo accedí por un hueco en una valla del extremo opuesto a la entrada principal), el Yacimiento Arqueológico de Iruña Veleia. Se trata de un antiguo poblado cuyo origen data de la Edad de Bronce y la Edad del Hierro. Aunque no fue hasta el siglo I d.C. cuando aparecieron las primeras domus o viviendas urbanas romanas, y con el paso de los años, pasó a ser una ciudad, con lujosas viviendas y grandes edificios públicos.
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YACIMIENTO ARQUEOLÓGICO DE IRUÑA VELEIA

Y por último, en el cuarto concejo y destino de ésta ruta, Víllodas, cabe destacar el también supuesto puente romano que hay a las afueras del pueblo. Digo supuesto porque, al igual que con el de Trespuentes, se desconoce los orígenes reales de su construcción, aunque igualmente se le atribuye la fama de romano por su aspecto y cercanía con el yacimiento de Iruña.
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PUENTE DE VÍLLODAS

Como veis, ésta travesía ofrece mucha variedad de monumentos (además de los ya mencionados, están las siempre presentes iglesias en cada uno de los concejos), y sobre todo de historia. Recorrido muy recomendable, de fácil andar por su orografía y buen estado de los senderos, siendo mas agradable si cabe gracias a las innumerables aves que cantan y sobrevuelan la zona, y también por su entorno, la gigantesca Llanada Alavesa, con vistas al macizo del Gorbea (únicamente en el comienzo de la ruta), la sierra de Badaia, los Montes de Vitoria, o la capital alavesa, entre otros.


PD: Fijaos bien en el panfleto del bus de la línea 13 "Bóveda-Vitoria" ("Nanclares de la Oca-Vitoria" en mi caso, el Sabado a las 16:00) ya que dependiendo de que día y hora hagáis la ruta, si queréis coger el bus desde Víllodas el bus para o bien en la marquesina de la plaza, dentro del pueblo, donde yo he acabado (solo un par de veces al día de Lunes a Viernes marcadas en color verde), o bien en la marquesina que hay a las afueras, al lado del puente (siempre excepto esos 2 momentos puntuales entre semana). Yo ignoraba este detalle y me quedé esperando en la parada de la plaza, y claro, el bus no pasó por allí.
No me quedó otra que llamar a un taxi y pedirle que me llevara a la estación de autobuses de Vitoria, teniendo que pagar 17€ por un viaje de tan solo 8 minutos y 8 km.

Echad un vistazo siempre que podáis a los panfletos de la web de Alavabus, leer bien la letra pequeña en la parte baja del documento, y en caso de no saber donde parar, lo mejor es llamar a la compañía o a la estación de autobuses de Vitoria y preguntar, si es que os saben responder, claro.