Árboles Singulares en Gúdar-Javalambre. Valdelinares

Aunque no era la ruta prevista para hoy el calor que aprieta estos dias nos ha empujado a hacer este recorrido en que estaremos siempre por encima de los 1900 metros.
Vamos a realizar una especie de Shinrin-yoku (baño de bosque) por la Arboleda Singular del Pino Moro.
Al pino negro (Pinus uncinata) que se identificó aquí por primera vez en 1941 le llaman pino moro.
En la Península ibérica fuera de los Pirineos sólo se encuentra de forma natural en dos zonas relictas del Sistema Ibérico, una en Vinuesa, (Soria) y la que vamos a visitar hoy en las cumbres más altas de la Sierra de Gúdar. Siendo esta su población más meridional de toda Europa , distribuida alrededor del Alto de la Gitana. Un núcleo en la cumbre y la umbria del Peñarroya y otro mayor en el Alto del Conventillo pegado a la Estación de Esquí.
Un aviso para evitar confusiones, va a ser un recorrido en su mayoría sin senda ni señalización en el que nos sumergiremos en el bosque sin prisas. Es un bosque amable, bastante limpio y fácil de transitar.
La ruta es una adaptación de la sugerida por Eduardo Viñuales en su libro "Rutas por los bosques más bellos" Aragón. Según el autor a los ejemplares vetustos del pino moro en la zona les llaman nogueras.
Salimos del parking para pasar por delante de un pino albar o royo, y así poder distinguirlo de los pinos moros o negros que vamos a ir encontrando.
Solo hemos destacado los pinos moros que nos llamaban la atención.
Después de medir varios buenos ejemplares tomamos el camino del recorrido de fondo.
Lo abandonamos para seguir monte a través hacia las proximidades de la anónima y escondida cima del Conventillo, donde encontraremos los mayores ejemplares.
Alguien nos comento que querían recrecer este monte para que se convirtiera en otra cumbre de 2000 m de la Sierra de Gudar, solo le faltan 3 metros, como ya se hizo hace décadas en el Hornillo. También Aramon pretendía alargar una pista de esquí por su umbría, eliminando un bosque casi puro de pino moro.
Nosotros bajamos por esta umbría de bosque bastante cerrado arriba y más claro después, hacia las pistas de esquí.
Aquí haremos un recorrido por las manchas de bosque entre las diferentes pistas.
Tras asomarnos al mirador y a la tejeda de Valdelinares realizamos la última subida por un tramo de bosque cerrado al principio y que luego se convierte en una alfombra verde y mullida que acuna a los airosos y vigorosos ejemplares de pino moro.
Una vez arriba vamos a la izquierda por la cabecera de diferentes pistas y seguimos rodeando una gran balsa.
Al llegar a un pino dentro del vallado empezamos a bajar cruzando el bosque hasta la carretera.
Atravesamos la vieja y la nueva para seguir la Rambla de la Fuente y así evitar el asfalto hasta volver al vehículo.
Debido al calentamiento global esta Arboleda Singular amante del frío y la nieve está en una situación límite para su supervivencia, ya que se encuentra confinada en las cumbres de la Sierra de Gúdar.