Archena-Ulea-Mirador Salto Novia-Villanueva por Balneario y orillas del Segura, con trepada final Monte OPE (Valle de Ricote)

Ruta realizada en solitario el 13 de abril de 2023. El recorrido es fácil salvo la trepada a la cima del Monte OPE que tiene su dificultad y requiere no padecer vértigo, es muy vertical pero puede evitarse continuando el recorrido por los Miradores.

Comenzamos en el Museo del Esparto de Archena, ubicado en el sótano del Palacete de Villarías, mandado construir por los vizcondes de Rías a finales del siglo XIX, pero cuyo último propietario, el duque de Tovar, soltero y residente en Tánger, lo legó en testamento a la Administración Internacional de la Ciudad de Tánger, con cuyos representantes en España debió negociar el Ayuntamiento de Archena para conseguir su propiedad.

Tras el museo nos dirigimos a la Noria El Matar o de los Semolicas, bastante encajonada y sin acequia. Es curioso verla, pero resulta penoso cómo se ha pretendido cubrir el expediente sin un mínimo de cariño. Creo que se puede y se debe hacer algo más con una de las seis norias que aún quedan en el municipio: de Matías Martínez, de los Chirrinches, de la Cierva, de la Cañada y Acebuche de la Algaida, una de las más grandes de Murcia, lo que justifica plantearse un recorrido específico para verlas en conjunto.

Nos acercamos al Puente Viejo, que inicialmente se construyó como “puente de madera”en 1860 (siendo Ministro de Fomento el Marqués de Corvera), pero hubo una catástrofe en 1863 y la inauguración se retrasó hasta el 1 de septiembre de 1865. El actual “puente de hierro” comenzó a construirse en 1933, pero los trabajos se paralizaron por la GC y la inauguración no pudo realizarse hasta el 19 de septiembre de 1947.

En el Puente Viejo bajamos al paseo fluvial, conocido como Ruta Vicente Medina, que nos conduce hasta el Puente de las Mazas que cruza el Segura y la Acequia de Caravija. Continuamos por la Ctra. del Balneario y llegamos a la Ermita Ntra. Señora de la Salud, Hotel Levante, Hotel Termas y el Gran Casino. Luego seguimos por la orilla derecha del Segura (GR-127A).

El Balneario de Archena cuenta con un largo e histórico pasado, pues sus inicios se remontan al siglo V a.C, cuando los íberos asentados en Archena comenzaron a hacer uso de sus aguas. El embrión de balneario se convirtió en lugar de paso obligado en la ruta comercial a Cástulo, capital de Turdetania (Valle del Guadalquivir, desde el Algarve hasta Sierra Morena). Los romanos descubrieron el valor de estas aguas termales y decidieron levantar unas termas.

En la Edad Media el Balneario pasó a manos de la Orden de San Juan de Jerusalén y fue a partir de 1579, cuando comienza su auge. Después de la Guerra de la Independencia, el Rey Fernando VII decidió arreglar la carretera de Archena al Balneario y aumentar el número de habitaciones, pues ya era un referente en el termalismo español. Entre 1850 y 1878 es cuando se produce la gran revolución urbanística de la propiedad, al pasar a manos privadas por la desamortización de Mendizábal, en la persona de D. José de Bustos y Castilla, vizconde de Rías.

En 1858 se construye el Hotel León, en 1868 se inaugura el Hotel Termas y en 1878, el Hotel Levante. La decoración árabe que caracteriza al Hotel Termas, así como la hermosa cúpula neonazarí, obra del escultor y decorador sevillano Manuel Castaños, se añadió en 1878, mismo año en que se inauguró el Gran Casino.

En Ulea seguimos un trazado pensado para ver sus dos norias: Capellanía y de Villar Felices. La primera está en propiedad privada y salvo que encontremos al dueño por casualidad no puede visitarse. Incluyo foto de archivo de esta primera noria. Pasamos por la Plaza de la Constitución y la Iglesia de San Bartolomé, de estilo barroco y artesonado mudéjar, que figura documentada a principios del siglo XVI. Vemos la Casa del Cura cuya historia documentamos en el WP correspondiente. Luego el vértice geodésico del Sagrado Corazón de Jesús y finalmente, tras ver la Noria de Villar Felices nos desplazamos al Mirador del Salto de la Novia, lugar famoso por una triste leyenda medieval relativa al trágico final de la hija del comendador de Santiago en Ricote. Justo al lado se encuentra un yacimiento tardorromano fortificado desde el final del siglo III hasta el VI de nuestra era.

Acabamos la ruta pasando por los Miradores del Monte OPE, desde donde ascendemos a su afilada cima en la que encontramos una cruz y el vértice geodésico. El OPE con 276 metros es el mas alto y emblemático de los cerros que rodean Archena. Las piedras calizas blancas de que está formado no facilitan la vegetación, aunque los mayores de la localidad recuerdan tiempos más húmedos en los que sus faldas albergaban un escaso arbolado de eucaliptos y pinos. Entonces la caza de conejos era muy abundante y se veían también numerosas zorras.