Arroletza, Tellitu y Sasiburu desde Cruces (Barakaldo)

A decir verdad no era esta la ruta que tenía pensada para hoy. Ha quedado incompleta por la lluvia. La idea que tenía en la cabeza cuando iba en metro desde Deusto hasta la estación de Cruces era hacer la sierra de Sasiburu completa. Es decir, subir primeramente al Arroletza, y después por la cresta hacer el Tellitu y el Sasiburu, para bajar hasta la Cruz del Humilladero y ascender seguidamente a Peñas Blancas, y por último al Ganeroitz, para retornar a Cruces por la cómoda pista que transcurre por la ladera de la sierra que mira al Regato.

Pero no ha podido ser, ya que el frente lluvioso que pronosticaban para las doce de la mañana se ha presentado a las nueve pasadas, obligándome a dar la media vuelta justo antes de iniciar el ascenso a Peñas Blancas. La experiencia montañera de más de sesenta años me dice que rocas y lluvia son malas compañeras de viaje, sobre todo si el viaje es por el monte. Sí, cualquiera que conozca la zona me puede decir que podría haber seguido por la pista hasta el collado bajo el Ganeroitz y desde allí solo son unos metros subir al buzón de Peñas Blancas. Pero eso para mí hubiera sido hacerme trampas al solitario. O lo subo por donde hay que subir o no lo subo. Lo siento, yo soy así de raro y, además, la ruta completa de la cresta transcurre sí o sí por el roquedo kárstico de Peñas Blancas. En fin, tampoco me he llevado demasiado disgusto ya que he recorrido anteriormente varias veces la sierra completa, aunque subiendo siempre desde Alonsotegi.

De todas formas, a mi me parece que ha quedado una ruta verdaderamente interesante, ya que aparte de la innegable estética de la zona (a pesar de la lluvia) su longitud es de algo mas de 13,5 km, ascendiendo en total 579 m. El tiempo que he utilizado ha sido un poco superior a las tres horas, parando bastantes veces a sacar fotos de los giros, desvíos y bifurcaciones que señalo con los bastones, ya que hoy también he ido solo.

Pongo en marcha el IWatch en modo de senderismo para controlar pulsaciones y empiezo a grabar la ruta en wikiloc junto al fosterito de la salida del metro de la estación de Cruces. Ahora solo tengo que cruzar la plaza pasando ante la entrada principal del hospital y llegar hasta el puente sobre la autopista, que cruzo. Nada más cruzar el puente hay que girar a la izquierda. Hay un cartel que indica la dirección de Osalan (Instituto Vasco de Seguridad e Higiene en el Trabajo) y por ahí voy, ya que hay que pasar por delante del citado Instituto.

Tras subir por la acera una primera cuesta la carretera gira a la derecha. Hay dos filas de casas en construcción a la derecha y tras superarlas giro de nuevo a la derecha en una pequeña rotonda. Luego bajaré hasta aquí por otra carretera. Sigo subiendo y enseguida paso ante la entrada al edificio de Osalan, situado a mi izquierda. Hay que seguir por la carretera hacia arriba y llegar al cabo de un rato a una zona con un enorme depósito azul y blanco del Consorcio de Aguas.

Aquí confluyen varias carreteras, la primera que encontramos a nuestra izquierda baja de nuevo a Cruces por Camino Basatxu, la que rodea el depósito hacia la derecha baja al Regato, y la que sale un poco mas adelante y hacia la izquierda sube hasta la ermita de San Águeda. Por esta carretera volveré después para bajar a Cruces por Camino Basatxu.

Voy unos metros por la carretera que va hacia El Regato, pero a unos pocos metros tengo que desviarme por un antiguo camino que sale a mi izquierda, que es por donde hay que subir. El camino, en continua ascensión, sube empotrado entre dos paredes de setos, de vegetación y de algunos árboles, pasando por encima de grandes lajas de piedra y sorteando pedruscos de gran entidad. Ojo, porque con lluvia estas piedras bastante pulidas por el paso de la gente a lo largo de muchos años pueden ser muy peligrosas de bajada, propiciando alguna caída, así que ya anticipo que no bajaré por aquí. Sí que hice la subida por este curioso camino porque aún no llovía y, además, es interesante conocerlo.

Tras un rato de ascensión sorteando las piedras del camino éste accede tras un repecho a una carretera de cemento. Esta carreteraita desemboca por abajo en la carretera de Santa Águeda antes citada y por arriba en la pista que recorre toda la sierra de Sasiburu. Por esta misma carretera bajaré después.

Al llegar a ella giro a la derecha y voy por ella un rato. Paso por una "ataka" en la carretera con un caserío abajo a la derecha y entro en un pinar. Al poco veo un camino de tierra que parte de mi izquierda al lado de unos pastos y me desvío por él. Tras subir una pequeña loma bajo a una campa en la que una vaca solitaria estaba pastando tranquilamente. Esta campa, por la que pasa el gasoducto de Enagás, es una confluencia de caminos. En efecto, por mi izquierda (hay señales) llega el sendero que sube desde Santa Águeda. Por la derecha en unos metros se accede más arriba a la pista que acabo de abandonar, y de frente el camino conduce casi directamente tras una fuerte subida a la cima del Arroletza. Yo tengo que seguir de frente.

Las cuestas ahora son duras, es sin duda la parte mas empinada de la ruta de hoy. Voy subiendo a ritmo pero controlando mis pulsaciones, evitando que se disparen. El gasoducto, a juzgar por sus chirimbolos amarillos pasa a mi derecha, y tras sudar un poco llego a la cresta donde hay un poste de señales. La cima del Arroletza (454 m) se encuentra situada a unos metros de la señal. Su buzón esta colocado sobre un peñasco y en su frente hay una foto de un chico de 35 años fallecido en el año 2015 en la que pone: "Naciste en el monte y el monte te llevó". Me parece un detalle muy bonito.

Sigo por el sendero de la cresta y veo que en lontananza, por el norte, se acercan unos espesos nubarrones que supongo traen agua, esperando que me dé tiempo a completar la ruta antes de que descarguen. Pero hay un dato que es premonitorio y noto que el viento ha rolado del sur al noroeste, y esto es señal de que las nubes vendrán pronto. La senda me lleva enseguida al buzoncito del Tellitu (455 m), siguiendo la ruta crestera hacia el Sasiburu.

Tras una bajada corta pero empinada y una subida similar llego a la cima del Sasiburu (459 m), cumbre que da nombre a toda la cresta. Tiene su buzoncito y un monolito de piedras con un poste metálico y un lauburu en su ápice. Saco la foto de rigor y me dirijo a la Cruz del Humilladero que la veo pequeñita allí abajo.

Desciendo el repecho del Sasiburu hasta la pista y la atravieso para, tras pasar por otro poste de señales, subir hasta la blanca Cruz. Noto que están empezando a caer unas gotas sueltas. Ya está aquí la carga de las puñeteras nubes, me digo, pero sigo adelante para rebasar la lomita situada tras el Humilladero y, al llegar de nuevo a la pista ya no son gotas sueltas las que caen, es lluvia bastante cerrada. No tengo otra opción que parar y sacar de la mochila el sombrero de agua, el chubasquero y el paraguas plegable.

La pinta que tiene el tiempo es de lluvia continua y tengo que replantearme la ruta. Ya he dicho al principio que rocas y lluvia son poco amigas, con lo que para evitar alguna caída tonta en el roquedo decido darme la vuelta y dejar Peñas Blancas y Ganeroitz para otra ocasión. Y la vuelta, como tenía previsto, la realizo por la amplia y cómoda pista de servicio para los pastos de altura de la sierra, que por la ladera que mira al valle del Cadagua baja hasta Zaramillo.

Describir con detalle la vuelta por la pista creo que es innecesario, solamente decir que tras unos cientos de metros encuentro una bifurcación, aunque yo sigo de frente por la pista. El amplio camino que dejo a la derecha es otra alternativa de vuelta, ya que bordea la cresta mas arriba que la pista por la que voy, desembocando en la cuesta final que asciende al Arroletza por la que he subido antes.

Sigo adelante bajo la lluvia con el paraguas abierto y en un rato llego a un refugio bajo el pinar situado a la derecha del camino, con un fuego bajo y un par de mesas de cemento, pintarrajeado por dentro y por fuera y con algunos destrozos. Una pena.

Sigo el descenso bajo el pinar y enseguida llego al camino donde anteriormente me he desviado de la carretera, que a partir de ahora es ya una carretera cementada. Tras pasar por la ataka en el suelo y al lado del caserío llego a la confluencia con el camino de rocas de la mañana, evitando bajar ahora por él por la lluvia y siguiendo por la carreterita hasta llegar a confluir con la carretera que sube desde Cruces a Santa Águeda, girando a la izquierda al llegar a ella. Desde aquí hasta Cruces voy por un tramo de la etapa 8 del Camino de Santiago del Norte (ver "Ruta 35 Bilbao" en Wikiloc)

A partir de ahora y hasta Cruces es todo una bajada suave por la carretera. En un rato llego al gran depósito del Consorcio de Aguas, yendo hacia la derecha para seguir por Camino Basatxu. Tras pasar al lado de algunas casas y caseríos y por la trasera de Osalan llego a la rotondita del cruce de la mañana, donde me he desviado para pasar por la delantera del citado Instituto.

Y ya no tengo mas que bajar el tramo de calle por donde he subido a la mañana, pasar el puente sobre la autopista y llegar a la plaza del Cruces y al fosterito del metro. Fin de la ruta de hoy y sigue lloviendo.

La verdad es que la lluvia ha deslucido la ruta, pero con buen tiempo animo a cualquiera a que la haga, incluso haciendo lo que no he podido hacer yo hoy, que es completar la ruta con la ascensión a Peñas Blancas y al vecino Ganeroitz.

Un saludo a todas y todos.