AZNAITÍN (LOS TRES), CASTILLO y CERROS de la VIEJA y CASTELAR desde ALBANCHEZ DE MÁGINA.

ADVERTENCIAS:

-Encontramos una cabra montés adulta en el castillo que casi nos enviste en su intento por huir de forma no intencionada, ya que se asustó supongo que porque era temprano. Mucho cuidado (nosotros somos silenciosos y probablemente no se enteró de nuestra presencia hasta que nos vio).

-Hay que cruzar algunas cancelas y alguna que otra valla pero todas tienen paso.

-Cuidado con los tobillos y rodilla en el lapiaz calizo de las cimas.

-Ojo con la media ladera desde la 3 cima hasta llegar a la cara norte y con la bajada final desde este punto al inicio de la pista de bajada (terreno resbaladizo de lasca)

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A TENER EN CUENTA:

VÍDEO COMPLETO DE LA RUTA lo encontraréis en el enlace de abajo. Si no os sale, lo encontraréis en mi cuenta de YouTube "Mountains Traveler"

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DESCRIPCIÓN DE LA RUTA:

Iniciamos la ruta desde el pueblo de Albanchez de Mágina (hasta el 2000 se conocía como Albanchez de Úbeda) donde vemos el Waypoint “inicio, Fin y Aparcamiento.

Desde aquí partimos callejeando hasta lo que parece la plaza del pueblo y un par de calle más arriba ya estamos en el inicio del sendero que nos lleva al castillo de Albanchez.

Este sendero es casi en su totalidad una serie de escalones que nos llevan de forma rápida a sortear el desnivel unos 100 metros que lo separa del pueblo. Este castillo se encuentra en lo alto de un verdadero tajo.

Una vez en el castillo subir hasta arriba del mismo es sencillo aunque requiere concentración porque un resbalón o un cabezazo sería doloroso. Me gustaría advertir sobre la existencia de fauna salvaje en el castillo ya que una cabra montés adulta casi nos enviste al querer huir tirándose al vacío. Mucho ojo. Podréis verlo en el vídeo cuando lo suba.

Disfrutamos de este espectacular castillo y sus vistas un rato y desandamos nuestros pasos hasta contactar de nuevo con la vereda del Borbote a la altura de unas ruinas árabes.

Con una pendiente continua llegamos siempre pegados al cauce del Arroyo de la Cañada Hermosa a un abrevadero. Seguimos subiendo por esta pendiente hasta que llegamos a un precioso árbol que nos brinda unas vistas magníficas de Albanchez y del Valle que dejamos atrás junto a la Sierrezuela de Bedmar y poco más adelante pasamos una cancela que es para el ganado entre un centenar de ovejas.

Terminamos llegando al puerto del cerezo que nos sirve de guía para saber dónde está el sendero que nos llevará a los Aznaitines y dónde el que nos lleva a los cerros de la Vieja y el Castelar.

Hacemos estos dos últimos primero, pasando primero una portilla y sin a penas desnivel añadido pero por pasos calizos llegamos primero al de la vieja, luego bajamos al collado y subimos al del Castelar donde nos encontramos un hermoso ejemplar de culebra de herradura.

Tras estos dos cerros desandamos nuestros pasos hasta el puerto del cerezo e iniciamos la incesante subida hasta los Aznaitines, llegando primero a un chozo y después de unos 450 metros de desnivel a un collado a cuya izquierda hay unas vistas que dejan sin palabras.

Seguimos nuestro ascenso y coronamos entre un lapiaz calizo el Aznaitín de Albanchez (1741) desde cuya cima se ven los otros dos Aznaitines y que ofrece un 360 que deja sin palabras. Un poco más adelante tenemos un mirador natural hacia el Pueblo de Albanchez.

Bajamos hasta el collado que lo separa de su hermano, el Aznaitín de Torres o Aznaitín real (1745) y subimos en otro lapiaz hasta el geodésico que está en el Tajo Oeste del macizo calizo. Deja sin aliento, una sensación increíble. Aprovechamos para comer un poco con calor y muchísimos mosquitos pequeños por la época que es y la increíble sequía que tenemos y nos encaminamos por una vereda a crestear hasta el 3 Aznaitín, el de Jimena. El sendero se pierde poco después del Waypoint “sima” y nosotros seguimos cresteando entre caliza (sin pasos expuestos) hasta llegar con tranquilidad y cuidado al Aznaitín de Jimena.

Una vez aquí, desandamos un poco nuestros pasos y giramos a la derecha para empezar a buscar la media ladera del Oeste que nos llevará después de algún kilómetro y por algunos pasos de lasca a media ladera hasta la cara norte del Macizo. La bajada hasta buscar la media ladera y la media ladera en sí requieren concentración, pero ni mucho menos son expuestas. Solo hay que evitar caídas.

Esta media ladera a veces tiene una pequeña vereda y a veces es más campo a través pero no tiene pérdida realmente.

Una vez en la cara norte tenemos que hacer una bajada empinada y resbaladiza que requiere también concentración. Además tiene el paso de una valla (que hay que hacer por debajo) y a nosotros no pilló en esta zona un viento que tiraba al suelo. Mucha concentración en esta bajada.

Una vez completada la bajada nos encontramos en un altiplano pequeño donde inicia la pista forestal que entre pinos nos lleva hasta el olivar que pasaremos antes de llegar a caracoles. Tras una larga lista llegamos al olivar pasando una valla. Por este olivar también iremos por un ancho camino y llegaremos a otra pista que nos encara directamente con Caracoles. Para entrar a caracoles hay varios pasos, haced el que nosotros hicimos de vuelta.

Caracoles es una belleza etnográfica y merece su tiempo. Nosotros estábamos pasando un mal rato por el calor y no pudimos quedarnos demasiado.

Una vez dejado caracoles nos introducimos en el pinar de Cánava y poco más adelante llegamos a la fuente del Moro.

Continuamos por pista y con calor hasta que cogemos otra senda a la derecha (esta última nos llevará entre pista y sendero sin pérdida hasta el pueblo de nuevo).

RESUMEN DE LA RUTA:

-Distancia: 23 km
-Desnivel (+): 1400 metros
-Desnivel (-): 1400 metros
-Cota máxima: 1745 msnm
-Cota mínima: 795 msnm
-Tiempo mov: 5 horas
-Tiempo total: 7 horas 48 minutos