BALDOMIR-VILAR-FROXÁN-VILAMOR-BALDOMIR (O COUREL) 25/10/14

Estibaliz, Yolanda, Dina, Roberto, José Luis, Miguel, Carlos y el perrito Alex emprendimos el día 25/10/14 esta relajante y preciosa ruta por “a Serra do Courel” (la Sierra del Caurel) partiendo del pueblo de Baldomir.

La Sierra del Caurel (Serra do Courel en gallego) es una cordillera montañosa situada en el SE de la provincia de Lugo que se extiende por los municipios de Folgoso de Caurel, en su mayor parte, Quiroga y Piedrafita del Cebrero. Tiene una extensión de 21.020 hectáreas con fuertes variaciones de altitud que van desde los 400-500m. del valle del río Lor a más de 1600 m. en los puntos más altos como Montouto, Formigueiros (1643 m.) o el pico de Pía Páxaro (1610 m.). El río Lor, y sus varios afluentes forman ricos valles con diversos ecosistemas que hacen que esta sierra sea la reserva botánica más importante de Galicia. (Fuente: Wikipedia).

Puede también interesaros la ruta: “KILÓMETRO VERTICAL do COUREL (FERREIRÓS de ABAIXO-PENABOA-PÍA PAXARO 1 y 2-FERREIRÓS) 19/10/14”. Ver al final de los datos del GPS en “Ver más” en letras azules.

Hecha estas sucintas reseñas de los rasgos distintivos, paso al comentario de la ruta.

En Baldomir comenzamos la ruta pasando por delante de una casa pintada de amarillo y blanco, al lado de la carretera LU-P-4701 (llegando desde Folgoso do Courel), situada en uno de los extremos de un puente con barandillas metálicas amarillas sobre el río Lor. (Ver video).

Nada más pasar por delante de la casa, se cruza un puentecillo con barandillas de tubos metálicos redondos y dos edificios de piedra a la derecha (capilla de San Sebastián). Para luego transitar por camino con ligera pendiente que al terminarse da comienzo a un sendero que prácticamente se difumina en algunos tramos (además sin señalizar) entre castaños, para pronto llegar al barrio de A Campa (La Campa). En el cual, la mayoría de las casas están abandonadas. A continuación tomamos un desvío a la izquierda continuando por una senda muy bonita en la que encontramos la exquisita seta “Tricholoma equestre” (seta de los caballeros). Ahora ya tenemos señalización por medio de postes de ruta homologada GR-8 y algún poste con letreros grabados en madera con flechas de dirección, los cuales seguimos entre “soutos” (sotos) de centenarios castaños. Teníamos a la derecha a Vilamor y su destacada iglesia sobre un montículo en la lejanía, estábamos rodeados por una arboleda y verdes prados así como por un profundo y cerrado barranco del río Lor. La senda desciende suavemente entre robles y arbustos –que a tramos nos toca descender, ascender o llanear sin fuertes desniveles– luego nos desviamos a la derecha tomando un camino, que tras cruzar el “Regueiro do Inferno” (Riachuelo del Infierno), nos conduce a un “sequeiro” (cabaña en la cual se secaban las castañas). Nos desviamos nuevamente a la derecha, donde nos llama la atención el color amarillento de una de las setas más preciadas como es la “Cantharellus cibarius” (rebozuelo, perraschicas). Continuando por la senda, con tramos de paredes recubiertas de verde musgo, encontramos algunas setas más como la sabrosa “Macrolepiota procera” (choupín o parasol), los excelentes “Boletos edulis” (calabaza) y la llamativa “Fistulina hepática” (hígado de buey). Siguiendo a través de castañares en los que algunos ejemplares de grandes dimensiones, con el paso de decenas de años, están horadados caprichosamente tomando formas muy llamativas.

Cruzamos el “carrozo da Armada” (arroyuelo de Armada) donde se forma una pequeña cascadita y a continuación pasamos delante de las cabañas de Bustelín, seguidas de otro arroyo sin apenas agua. A continuación llegamos a un cercado donde unos cerdos ecológicos de raza Celta descansan entre castaños. Seguidamente entramos en la aldea de Vilar, como se les denomina a los pueblecitos sin jurisdicción propia. En este, pasamos por la “Fonte da Saúde” (Fuente de la Salud) de la cual bebimos de su fresca y rica agua y visitamos el original museo etnográfico (relativo a las costumbres y tradiciones de los pueblos) del Sr. Juan Sánchez (Xan), donde amablemente nos mostró su exposición de toda clase de aperos de labranza (antiguos carros, toda clase de ruedas para los mismos, arados de madera, yugos para uncir las reses y demás aparatos), utensilios de cocina (potes y cantaros de diferentes medias, una rustica máquina de embutir chorizos, telares de hilar, etc.). También vende miel y licor de hierbas que tiene expuestos sobre un carro (compré una botellita por 6 euros, pensando que era aceite). Nos mostró igualmente su pequeño taller con toda clase de herramientas. En este momento llegaron 3 jóvenes de otro lugar (una chica y dos varones) en un tractor a recoger las castañas con los que el señor “Xan” tuvo unas palabras de desaprobación por la forma de la recolección. A continuación nos acompañó unos metros a la salida de la aldea contándonos algunas peculiaridades de este lugar. Nos despedimos dándole las gracias por dedicarnos un poco de su tiempo. Esta recóndita aldea cuenta con escasas viviendas en buen estado y en la que sólo vimos a una señora sentada al sol delante de su casa y a nuestro amable anfitrión.

Nos fuimos entre castaños por camino con postes de “vía crucis”, mesas con bancos, señales de dirección, postes del GR-8, panel de “O Souto de Vilar”, palco de música y una tabla grabada con la dirección “a o Castro” de Vilar (al Castro); cosa que hacemos para primero pasar por la austera, antiquísima y reducida ermita de San Roque. De esta misma cuelga una pequeña campana a su entrada, el altar (con paño blanco) está presidido por San Roque rodeado de flores junto a otras imágenes y cuadros. Continuamos la ruta por un camino precioso de verde hierba con mesas, bancos, panel y letreros referentes al Castro. “Un castro es un poblado fortificado celta por lo general prerromano, aunque existen ejemplos posteriores que perduraron hasta la Edad Media”. (Fuente: Wikipedia).

Después de caminar un corto trayecto por sendero de peñascos, llegamos al yacimiento arqueológico del Castro de Vilar situado en un alto rocoso, en el que quedan parte de unas paredes y los cerramientos por medio de lastrones de pizarra en círculo (restos de actividad humana) del propio Castro, casi tapados por la vegetación. Plasmamos el lugar con nuestras cámaras fotográficas con Vilamor al fondo.

Retrocedemos hasta poco después de la ermita, donde tomamos un desvío a la derecha (señalizado), para descender por camino entre castaños y luego por una preciosa senda a través de un sugestivo desfiladero en el que encontramos postes con los nombres de algunos árboles autóctonos en cuatro idiomas (gallego, castellano, catalán y vasco). Luego entramos en una zona de pinares jóvenes, para a continuación presentarnos en la “Ponte do Bao” (Puente del Bao), construida en madera, por la que cruzamos sobre el río Lor siguiendo un verdoso camino muy relajante a pesar de ascender ligeramente. Encontramos un bosquecillo de alcornoques que hay al borde del camino siendo algunos ejemplares excepcionales. Después del cual hay una bifurcación con letreros de dirección norte-sur, nosotros tomamos el camino del sur (a la izquierda) para entrar en Froxán.

Este es un pequeño pueblo típico rural en franca restauración. Era día de fiesta y la numerosa gente venida de otros lugares estaba preparando el “magosto” (castañas asadas) para comer en sus verdes campiñas. Al borde del camino está “A Fonte do Milagro” en la que en su pared se puede leer: “Fuente del Milagro 27 – 9 – 1935 Froján”, de la cual bebimos de su transparente agua, por si resultaban ciertas las atribuciones milagrosas (al menos parecía que nos sentíamos más recuperados de la caminata), que para hacerlo más efectivo nos sentamos enfrente en los bancos de una mesa en el Área Recreativa “do Chao” en la que comimos un “tentempié” al sol con 22.4ºC.

Partimos de frente cruzando la carretera, para continuar por camino señalizado en ligero ascenso. Después de varios desvíos a la izquierda y luego siguiendo recto, pasamos por un bosque que nos proporcionaba buena sombra, para enseguida entrar entre pinares y alcanzar en esta zona la cota más alta de la ruta con 734 m de altitud. Desde aquí divisamos a nuestra derecha el Castro de Vilar nuevamente, así como Penaboa y Pía Paxaro 1 y 2 (nombrados en la ruta “Kilómetro Vertical do Courel”).

Pasamos dos cancillas por un lateral muy rudimentarias y artesanales formadas por palos. Después de algún desvío, llegamos a la fuente y lavadero de Vilamor (que es lo primero que encontramos según se llega), donde decidimos comer. Como dicha fuente no tenía nombre llamativo como las anteriores, decidimos bautizarla como la “Fuente de la Eterna Juventud” para no ser menos y de paso, nos lo creemos. Estábamos comiendo, cuando se acerca a nosotros un joven y cariñoso gatito al que dimos de comer, pero a nuestro perro Alex no le gustó nada el gesto por lo que intentó ahuyentarle, pero el felino no se arredró y consiguió al final hacer las paces como buenos amigos.

Dando por finalizada la comida, fuimos hasta el centro de Vilamor donde giramos a la izquierda y luego a la derecha. En este lugar me despisté del track que llevaba por lo que decidimos tomar un bello sendero cubierto de hierba verde que desciende, para luego pasar por un bosquecillo de roble y llegar a una nueva cancilla igualmente formada con palos y alambre, en la que se prohibe el paso y donde hay una vieja cabaña. Nuestra intención era pedir al propietario autorización para cruzar la finca, pero al no haber nadie decidimos pasar para salir por una segunda cancilla cerrándolas a nuestro paso (si llegáis a este lugar y no os permiten pasar, la alternativa es bordear la finca por uno de los laterales) para salir de nuevo al camino siguiendo de nuevo el track.

Poco después de cruzar la última cancilla, llegamos a la carretera donde no sabíamos con certeza si coger a la izquierda en ascenso, según el track que teníamos, o a la derecha en descenso. Nos decidimos por esta última, y la verdad es que a pesar de caminar 800 m por la misma (sin apenas tráfico), llegamos a la bella cascada de Rexio o Rexiu (según los mapas) del río Covo. Esta se desliza suavemente por la roca pulida por la erosión del agua, siendo esta ligeramente ferruginosa. La cascada se ve desde la misma carretera quedando en un plano inferior a esta. Tras caminar unos 60 m nos situamos al pie de la misma, calculamos que tendrá unos 15-20 m de altura en una zona de recreo húmeda entre arboleda donde hay dos mesas con sus respectivos bancos en madera para el picnic. Desde aquí al final de la ruta nos quedan 600 m como informa la señalización, que tras cruzar el puente finalizamos en el punto de partida. Como veis “no hay mal que por bien no venga” como dice el refrán.

Cogimos las bolsas de la ropa limpia y calzado de los coches para cruzar nuevamente el puente, al final del mismo se encuentra una caseta con fuente y pilón (donde nos lavamos) al lado de los paneles de rutas y postes indicadores. Seguidamente, al pasar por Folgoso do Courel, paramos en el hostal-mesón “O´ Mirador” para tomar unas consumiciones, que por cierto desde su terraza se contempla una bonita vista.

Ruta genial, donde se disfruta de senderos y caminos entre centenarios castaños, pueblos recónditos en los que sus gentes resisten el paso del tiempo y la modernidad de la ciudad, para seguir anclados en estos bellos rincones de O Courel. Además, se puede visitar el prehistórico Castro celta de Vilar y el peculiar museo etnográfico del señor Juan Sánchez (Xan).

Que lo disfrutéis como nosotros lo hemos disfrutado y vivido por este “¡¡Buen camino!!” que sin duda hallareis.

Nos vemos en la próxima.

Un saludo.


Localización:

Mapa Topográfico Nacional de España: SALCEDO nº 156 – IV. Escala 1:25.000

DATOS GPS:

General

Nombre Archivo Track: BOLMIR-VILAR-FROXÁN-VILAMOR-BOLMIR (O Courel) 25-10-14.
Nombre de la salida: Puente sobre el río Lor.

Comentarios del Track:

Fecha y Hora
Día 25-10-2014
Hora de salida 09:49:07
Hora de llegada: 17:00:46
Duración 07:11:39
Tiempo parado 02:45:30
Tiempo en movimiento 04:26:09


Distancias

Distancia proyectada 16.66 km
Distancia con alturas 16.81 km (real 17.6 km)


Alturas

Track con alturas (3D): Sí
Altura Máxima 725 m
Altura Mínima: 391 m
Altura de la salida: 518 m
Altura de la llegada: 432 m
Ganancia desde la salida 205 m
Desnivel salida-llegada -86 m
Desnivel máximo 333 m
Ascen.acum. 462 m
Desc.acum. 549 m
Max. Velocidad Vertical: 1731 m/h
Min. Velocidad Vertical: -2880 m/h
Max Pendiente 20.4 %
Min Pendiente -17.3 %


Velocidades

Velocidad media 2.3 km/h
Velocidad máxima 8.8 km/h


Puntos de Track

Número de puntos 1698
Intervalo de grabación 14