Ballabriga, camino de La Croqueta

Ruta senderista por terreno abrupto aunque no demasiado difícil, en lo que antiguamente fue el paso desde Ballabriga hacia Espés, cuando no existía la carretera.
El track completo debería ser hasta las inmediaciones de la localidad de Alins, pero tuve que abandonar por la lluvia. No obstante las sensaciones fueron estupendas por el colorido del bosque, y eso que era un día gris.

DESCRIPCION DE LA RUTA:

Iniciamos esta pequeña excursión desde la localidad de Ballabriga, cuyos últimos datos reflejan que tiene solamente 4 habitantes.

Estacionamos en la entrada y nos acercamos a la iglesia, punto en el cual veremos la señalización para ir hacia Alins ó Laspaúles, por GR-15, GR-17 ó GR-18.1

Ascendemos la calle y salimos del núcleo por un sendero estrecho, al principio pedregoso, empinado y con aliagas en las márgenes, lo cual me arrojó serias dudas sobre el interés de esta ruta.

Subiremos durante un rato hasta situarnos a las puertas de "La Croqueta" de Obarra, una prominencia rocosa espectacular en la cual hay instalada una de las ferratas más bonitas del Pirineo.

Cerca de dicha roca la senda baja un poco, se hace más cómoda aunque también algo aérea. Enseguida encara una especie de canal por la cual, en cortos zig - zag, se sube al Paso de la Croqueta, entalladura natural por la que se puede continuar en este paraje asombrosamente vertical.

Pasada la brecha, la senda desciende un poco fuerte y luego toma camino horizontal por medio de una especie de fajeta, con espectaculares vistas al cañón ó Congosto de Obarra.

Continuamos la senda pasando una especie de entalladuras o brechas sucesivas por un paraje inverosímil, unos cientos de metros antes miras la montaña y piensas que es imposible que la senda vaya por ese lugar.

Pasadas las brechas seguimos bajando y cruzamos un barranco, a continuación nos metemos en una zona arbolada pasando por un tramo en el que grandes robles y bonitos arces se cubren de colores otoñales y nos regalan estampas magníficas.
A todo eso, la senda aquí es mullida y cómoda, nada que ver con el principio de la ruta.

Seguimos entre arbolado por terreno relativamente llano, alternando con algunos prados, denominados Gabarret y Llabarins.

En poco tiempo llegamos a un cruce de sendas (con el bosque muy colorido) donde desviamos a la derecha para visitar la Font dels Fustés, o fuente de los madereros. Entiendo que dichos trabajadores tuvieron a bien preservar un par de ejemplares fabulosos, un roble y un haya posiblemente centenarios.

La fuente en sí carece de interés ya que no tiene mas que un pequeño hilo de agua. Sin embargo el lugar es fantástico por la variedad de árboles y su colorido, como he citado antes.

Como el día era lluvioso y no me quise arriesgar más, regresé a Ballabriga por el mismo camino. Andar, hacer fotos y llevar el paraguas es un poco incómodo así que para otra ocasión dejaré el continuar ruta hasta la localidad de Alins.

Una vez en el punto de inicio realicé un trecho de camino supuestamente en dirección al Puerto de las Aras, en busca de las ruinas de la ermita de San Miguel, que no localicé. También para otra ocasión.