Cascada Valdés o Tambarria - Cascada río Alcantarillón desde Bargaedo ( Piloña )
near Bargaedo, Asturias (España)
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Trail photos
Itinerary description
Paseo fácil y apta para toda la familia desde Bargaedo y visitando las Cascadas de Valdés o Tambarria y la cascada Alcantarillón, visitando dos preciosas y poco conocidas cascadas.
Aparcamos y dejamos el coche en el cruce de pistas entre ambas cascadas. Reseñar que poco antes de la cascada Valdés, también podemos dejar el coche ya que hay un aparcamiento con capacidad para unos 8 o diez coches.
Como decía anteriormente dejamos el coche en una intersección de cuatro pistas, caminamos por la única pista que encontramos en bajada, pronto pasamos al lado del un aparcamiento y unos metros más adelante, tomamos senda de tierra a la la derecha, esta discurre por un precioso bosque de árboles autóctonos, castaños, robles, acebos... desde la senda ya podemos oir claramente el ruido del agua que produce la cascada, al termino de la pista, bajamos por unos escalones de tierra, torcemos un poco a la izquierda y poco mas adelante nos encontramos una preciosa cascada, a su lado las ruinas de un antiguo molino y en el lado opuesto una pared de piedra con un entrante en la roca, dónde alguien colocó la representación de una casita hecha en piedra.
Volvemos sobre nuestros pasos, hasta donde habíamos dejado el coche.
Para visitar la otra cascada, en el cruce de pistas, tiramos de frente, por una pista de tierra, al cabo de unos 350 metros llegamos a la carretera que comunica el concejo de Piloña con los de Cabranes y Villaviciosa, la citada carretera la habremos de cruzar si queremos visitar la otra cascada, precaución al cruzar esta vía de circulación ya que a pesar que tiene un tráfico mediano, hay vehículos que pasan a bastante velocidad.
Para acceder a la cascada, hay que pasar entre un espacio que hay entre la marquesina y el guardarail.
Rebasados estos caminamos bajamos por una pista de tierra que nos da acceso directo a la propia cascada.
La vuelta la hacemos por el mismo sitio de la ida, cruzamos la carretera y luego seguimos por la pista asfaltada, pasamos al lado de unas casas y ya llegamos de vuelta al coche y damos por finalizado nuestro pequeño paseo, que complementa otra actividad que teníamos para el día de hoy.
La ruta aquí descrita, así como el track de la misma, quizás pudiera ser mejorable y debe de considerarse como la visión de nuestra experiencia y no como una guía, por lo tanto su seguimiento, será responsabilidad única de quien decida realizarla.
Aparcamos y dejamos el coche en el cruce de pistas entre ambas cascadas. Reseñar que poco antes de la cascada Valdés, también podemos dejar el coche ya que hay un aparcamiento con capacidad para unos 8 o diez coches.
Como decía anteriormente dejamos el coche en una intersección de cuatro pistas, caminamos por la única pista que encontramos en bajada, pronto pasamos al lado del un aparcamiento y unos metros más adelante, tomamos senda de tierra a la la derecha, esta discurre por un precioso bosque de árboles autóctonos, castaños, robles, acebos... desde la senda ya podemos oir claramente el ruido del agua que produce la cascada, al termino de la pista, bajamos por unos escalones de tierra, torcemos un poco a la izquierda y poco mas adelante nos encontramos una preciosa cascada, a su lado las ruinas de un antiguo molino y en el lado opuesto una pared de piedra con un entrante en la roca, dónde alguien colocó la representación de una casita hecha en piedra.
Volvemos sobre nuestros pasos, hasta donde habíamos dejado el coche.
Para visitar la otra cascada, en el cruce de pistas, tiramos de frente, por una pista de tierra, al cabo de unos 350 metros llegamos a la carretera que comunica el concejo de Piloña con los de Cabranes y Villaviciosa, la citada carretera la habremos de cruzar si queremos visitar la otra cascada, precaución al cruzar esta vía de circulación ya que a pesar que tiene un tráfico mediano, hay vehículos que pasan a bastante velocidad.
Para acceder a la cascada, hay que pasar entre un espacio que hay entre la marquesina y el guardarail.
Rebasados estos caminamos bajamos por una pista de tierra que nos da acceso directo a la propia cascada.
La vuelta la hacemos por el mismo sitio de la ida, cruzamos la carretera y luego seguimos por la pista asfaltada, pasamos al lado de unas casas y ya llegamos de vuelta al coche y damos por finalizado nuestro pequeño paseo, que complementa otra actividad que teníamos para el día de hoy.
La ruta aquí descrita, así como el track de la misma, quizás pudiera ser mejorable y debe de considerarse como la visión de nuestra experiencia y no como una guía, por lo tanto su seguimiento, será responsabilidad única de quien decida realizarla.
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