Barranc del Bosc - Roca Regina 18-01-2015

COMO LLEGAR: Carretera C-13 dirección Tremp (Lleida). Dejo el coche en un aparcamiento que hay justo antes de llegar a la presa del embalse de Terradets, en un desvío a pocos metros de llegar a un túnel. Es el que utilizan los escaladores de Roca Regina y que da acceso directo al Barranc del Bosc. Otro buen lugar para dejar el coche es la estación de Cellers.

10.10 h: Cuando inicio la marcha una espesa niebla se ha apoderado del valle de Tremp y el frío es intenso. No hay muchas esperanzas de tener buenas vistas pero llevo el track cargado en el gps y al menos la orientación no será un problema.

Los primeros minutos, camino por la carretera que pasa sobre la presa, bordeando parte del embalse por su margen izquierda. Paso junto a la Cova dels Muricecs (murciélagos), actualmente cerrada a las visitas y atravieso varios túneles con ventanas para en breve llegar al desvío de Llimiana. En este punto vuelvo a pasar sobre un puente para seguir ahora por un sendero paralelo a la C-13 hasta llegar al apeadero de tren de Cellers.

10.45 h: Una vez en la estación, tengo que atravesar las vías del tren y seguir el Camí dels Brugals. Se encuentra señalización vertical en la mayoría de los cruces. Este primer tramo es una cómoda pista completamente llana al inicio y que poco a poco va ganando inclinación a medida que nos adentramos en el bosque.

11.10 h: Señalización a Roca Regina 2.1 km. En este punto abandonamos la pista y cogemos un camino perfectamente balizado en todos los cruces que atraviesa el bosque de forma más directa. Unos pocos minutos después volveremos a cruzar la pista y ligeramente a nuestra derecha continuaremos por el sendero, ahora con marcas de color amarillo, hasta llegar al borde de la cresta, a esta zona se la conoce como Serrat Pedregós.

11.35 h: Continúo hacia mi izquierda (derecha, pas de l'Arbocera), la niebla parece que empieza a disiparse y me permite ver algo del espectacular paisaje que me rodea. Roca Regina es una gran pared absolutamente vertical, de varios centenares de metros de altura, que protege la ribera izquierda del fantástico Barranc del Bosc, un paraíso de la escalada de dificultad en vía larga.

Mientras voy acercándome al punto culminante de la jornada, sobrepaso el cruce del Barranc del Bosc (12.00 h). El sol empieza a ganar terreno y ahora disfruto de unas increíbles vistas sobre el Valle de Tremp y el Congost de Terradets. A lo lejos el Pirineo nevado se asoma tímidamente.

12.25 h: Cumbre de Roca Regina (727 m.). La cima está unos metros antes de llegar al final del camino que termina abruptamente en un gran cortado sobre el congosto.

12.50 h: Tras volver sobre mis pasos llego de nuevo al cruce señalizado que me ha de permitir seguir mi camino hacia el Barranc del Bosc. El sendero se interna en el barranco en fuerte bajada pero perfectamente trazado y en pocos minutos se llega al fondo del cauce seco. Medito remontar el río a ver que encuentro, pero he quedado en Lleida con unos amigos así que no me entretengo demasiado y busco la continuación del sendero que me ha de llevar al aparcamiento. Queda anotado para futuras incursiones en estas latitudes.

13.30 h: Camino en el margen derecho del barranco, se accede remontando el cauce unos pocos metros hasta encontrar unos hitos y marcas de pintura.

La encina es la protagonista de estos bosques, también hay pino de repoblación y muchas plantas aromáticas. El frío es intenso ya que en esta época del año el sol no consigue penetrar sus altas paredes.

De momento voy ganando altura ya que la senda evita la parte baja del cauce, que se encajona fuertemente. El espectáculo visual es fascinante, el río ha excavado la roca caliza formando meandros difíciles de explicar por lo modesto de sus aguas.

Roca Regina preside el final del barranco. Cuando llego a su altura todo parece empequeñecerse y me cuesta encontrar en sus verticales paredes a los escaladores, a pesar de sus coloridos atuendos y que escucho como trabajan en la pared, quien sabe si abriendo una nueva vía de escalada.

14.20 h: Llego a la C-13, paso bajo el arco del puente de la vía del tren y me dirijo hacia el coche que se encuentra a escasos metros de este punto.

Ha sido una jornada breve pero intensa en sensaciones. Otro de esos lugares, fuera de las grandes cumbre pirenaicas, que merecen una visita sin lugar a dudas.

Saludos.