BARRANCAS SANTALLA BIERZO (LEÓN)

Marcha realizada por el grupo de senderismo SERMAR el 17/03/2012 (Guía Logi)
Comenzamos en un pequeño parque a la salida del pueblo de Priaranza del Bierzo junto a la carretera N-536, cerca de una curva que se cierra como un puño en dirección a Santalla del Bierzo. En este parque encontramos un tronco de viejo castaño que alberga una magnífica escultura, se trata de un caballero templario, un Guerrero de la Eternidad, que monta guardia en su garita arbórea, protegiendo con sus armas el camino hacia el castillo de Cornatel, el desvío hacia Las Médulas y el lago encantado de Carucedo.
Tomamos el camino en dirección Norte, hacia el bonito pueblo de Priaranza. Entramos por la primera de las calles, la calle Real Urbia. Bajamos por ella, continuamos siguiendo su curva de ballesta y seguimos por ella hasta que nos saca del pueblo.
Aquí nace una pista en tierra que nos lleva por campos labrados y viñedos durante 2 kms hasta llegar de nuevo a la carretera N-536.
Seguimos con mucho cuidado por el arcén de esta carretera hasta llegar a un bonito mirador, el balcón del Bierzo que da vistas a las Barrancas de Santalla.
Pasado el mirador llegamos a la localidad de Santalla del Bierzo. Aquí también entramos en el pueblo por la primera de las calles, la calle Real Señorío y también trazamos su curva de ballesta hasta llegar al final del mismo y salir a otra pista en tierra.
Seguimos esta pista y a unos 600 mts nos encontramos con las espectaculares Barrancas de Santalla, explotación minera similar a las médulas con una formación cilíndrica. Algunos de los paredones de roca de este paraje llegan a tener cien metros de altura.
Caminamos durante 1 km mientras a nuestra izquierda vamos observando las singulares y espectaculares Barrancas con sus formaciones de todo tipo sobre todo circulares.
Al final tomamos una vereda que surge a nuestra izquierda por el último de los barrancos, ascendemos 1 km de distancia hasta llegar a lo alto del páramo.
Hay dos caminos, tomamos el de la izquierda y seguimos hasta la primera desviación también a la izquierda por la que continuamos. Ahora siempre de frente sin desviarnos hasta llegar a una pequeña ermita. Avanzamos apenas 50 mts y tomamos el camino de la derecha hasta llegar de nuevo a la carretera N-536.
Hay que cruzar la carretera y seguir por una pista que surge prácticamente enfrente.
Ahora ascendemos durante 2 kms por la margen derecha del arroyo Rioferreiros para llegar a la pequeña y bella localidad de Villavieja. Por este camino nos encontramos un antiguo "calero". Llegamos al pueblo de Villavieja donde parece que el tiempo se ha detenido. Llegamos al final del pueblo, pasamos por un puente sobre el río y seguimos por la carretera.
Abandonamos la carretera y subimos por un bonito camino entre castaños centenarios. 1 km más y descendemos por la pradera en dirección al castillo de Cornatel también conocido como el castillo rocoso.
El castillo se asienta sobre un promontorio rocoso cortado hacia el este y el norte por un barranco de más de 180 m de desnivel, por el que transcurre el arroyo de Rioferreiros. Desde este mirador se pueden ver las Peñas de Ferradillo, el pueblo de Villavieja y hasta las choperas que acompañan al río Sil en la dirección opuesta.
El Castillo de Cornatel data del siglo XI. A primera vista destaca la amplia muralla y la torre del homenaje, que impiden, en un primer momento conocer en profundidad este valorado castillo, que es un nido de águilas. Si llegamos hasta su entrada podemos ver su interior, en el que nos encontramos un bonito patio de armas y restos de una antigua capilla.
Por sus otros dos flancos, que resultan de fácil acceso, está protegido por una sola muralla recorrida por un paseo de ronda, defensivo almenado.
El castillo cuenta con un museo, donde se recrea el pasado del mismo y sus fases de construcción, así como las posesiones por las que ha pasado a lo largo de la historia.
También podemos admirar una exposición de armas de asta medievales pertenecientes a la asociación local Caballeros de Ulver.