155. Barranco de Abanza desde Zarcia ⚠️
near Santa Cruz del Valle Urbión, Castilla y León (España)
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Itinerary description
📸 FOTOS:
▶ Las 6 primeras seleccionan aspectos de interés (con descripción al pie).
▶ Las siguientes se ordenan según el itinerario (asociadas a cada 'waypoint').
📝 TEXTO (5 secciones):
▶ Índice IBP de la ruta,
▶ Preámbulo: antecedentes y motivos,
▶ La Ruta: recorrido y dificultades,
▶ Destacado: rasgos sobresalientes, y
▶ Anécdota: hechos curiosos.
INDICE IBP de Dificultad de la Ruta
Para Criterios y Tabla de Interpretación, Ir a:
https://www.ibpindex.com/index.php/es/
El resultado del análisis IBP es de 64 (para Senderismo): dificultad 'Media' para una preparación física 'Media'.
El cómputo del desnivel acumulado de la ruta por parte de IBP es de 596 metros (superior al que estima Wikiloc).
PREÁMBULO
Habíamos estado en la zona hacía exactamente un año (…más dos días). Recorrimos entonces el valle del Urbión desde Zarcia, río arriba (allá era aún el arroyo Mayor). Hasta donde fue posible sin tener que descalzarnos, que el agua bajaba helada e impetuosa. (*)
Plácida excursión, aquella. A cada paso nos impactaban preciosas estampas del río saltarín, con múltiples brazos deslizándose entre las pulidas rocas. Con más caudal que ahora. Y todo ello aderezado con una rutilante vegetación otoñal.
Mientras tanto, entonces, se nos iban los ojos también a los barrancos y arroyos que nutrían al río por sus costados. Alguna corta cata hicimos de alguno de ellos. Lo suficiente para fomentar el deseo de adentrarnos y explorarlos más adelante.
Algo vimos del barranco de Abanza desde abajo. Pero fue más lo que quisimos vislumbrar de su interior. Ese sería nuestro próximo objetivo en este valle para el futuro. …Hoy, por fin, era el futuro y podríamos darle cumplimiento.
Antes, para tener algún tipo de guía, consultamos un par de rutas que ‘pasaban por allí’, por su primer tercio, de camino a otro lugar. Su parte fácil. Así ocurre con la senda que luego se desvía al alto de Gárrula o al pico San Millán.
Debimos de haber buscado antes alguna ruta que se centrase en el propio barranco, desde abajo hasta arriba. Pero no lo hicimos. Sólo a posteriori, y después de los obstáculos y las penalidades sufridas, se nos ocurrió indagarlo. ‘A buenas horas…’.
Una ruta (http://sendasdeburgos.blogspot.com/2016/11/barranco-de-abanza.html) de ‘Angelbur’ recoge la exploración de ese barranco. Viendo las dificultades que tuvieron que superar para salir de él por arriba, parecía una proeza.
De haber conocido previamente lo que nos esperaba, no nos habríamos embarcado en esa gesta. O, tal vez, sí…. Pero seguro que no lo habríamos hecho de haber sabido que, antes de mediada la ruta, nuestra débil señal GPS desaparecería totalmente.
Finalmente, quedamos atrapados en un agreste paraje donde apenas se podía avanzar. Cada paso se eternizaaaba. El cauce del arroyo de Abanza, encerrado entre inclinados taludes de aspecto inexpugnable (así los magnificábamos), parecía una ‘ratonera’.
Pero eso forma ya parte de la ruta. Vamos a ella; lo que se pudo.
⚠️⚠️⚠️ LA RUTA
Duración de la ruta: 3 horas 45 minutos (desde las desde 8:20 a las 12:05 h)
Perdimos la señal de navegación hacia el km 2,5. Eso nos obligó a reconstruir después todo el trayecto; nada más regresar a casa. Ese trazado es el que aquí presentamos; como orientativo. Es posible, pues, que haya alguna imprecisión.
La excursión parte del área de Zarcia, al sur de Santa Cruz del Valle Urbión. Siguiendo el curso ascendente del río, enseguida tomamos un desvío a la derecha que señala ‘Senda del San Millán y Alto de la Gárrula’. Un poco más y, en el cerro del Escobar, entramos en el barranco de Abanza.
Allí hay que seguir el arroyo hasta un rústico puente de troncos. Luego habrá que ir cambiando de lado en varias ocasiones, buscando la orilla transitable. Tiene su gracia ese trasiego durante un tiempo. El caudal no era grande y se podía saltar de piedra en piedra (con más agua se complicará el vadeo).
Aún íbamos bien. Algo de senda quedaba, aunque tenue y cubierta de hojarasca, para ver por dónde moverse. La señal GPS se debilitaba: en la pantalla de Wikiloc ya no aparecía nada del terreno ni el arroyo; sólo la marca del trazado y una flecha sobre fondo blanco.
Cuando entrábamos en la parte más dura del trayecto, la flecha se detuvo definitivamente y la señal desapareció. Justo entonces, se volvió invisible cualquier rastro de senda. Caminábamos, no diré que ‘a ciegas’, porque nuestros ojos conservaban la vista, pero sí ‘a tientas’.
No es sólo que no supiéramos por dónde seguir unos metros más allá. Es que ni siquiera sabíamos dónde pisábamos en cada momento. Una espesa capa de hojas arremolinadas ocultaba regatos y charcos, agujeros entre las piedras y ramas secas. Nos hundíamos hasta más arriba de las rodillas.
Varias veces nos caímos. Debajo de la hojarasca, las piedras musgosas y el barrillo eran muy resbaladizos. En esas condiciones (sin señal GPS ni cobertura telefónica), con riesgo de daños, en un lugar tan agreste, y sin saber a dónde llegaríamos en caso de seguir subiendo, la sensatez se impuso.
“Esta odisea es emocionante, pero también peligrosa. Hay que dar marcha atrás”. Además, al día siguiente era domingo y había que aprovechar haciendo otra ruta otoñal (“…que el otoño se va…. Hasta dentro de un año, …al menos”).
No quedaba sino regresar bajando por donde habíamos subido. Pero, ya bastante abajo, llegados al cartel que indica 'Senda del San Millán', sentimos la necesidad de un complemento: vistas al exterior. Hasta allí, el estimulante encierro había terminado volviéndose opresivo.
Decidimos, pues, subir por la Senda del San Millán. La parte inicial de hayedo va trocándose en pinar, y luego en escobonal. Los espigados ejemplares apenas dejan ver el exterior. La subida tiene una considerable pendiente. Sin panorámicas de excelencia, llegados a un punto elevado, iniciamos el descenso y regreso al punto de partida.
Mirando después el mapa, al parecer, por muy poco no llegamos al alto de Gárrula. Eso sí habría sido un logro para nuestras aspiraciones de espacios abiertos. Pero, sin señal alguna, no nos atrevimos a continuar porque no sabíamos dónde estábamos ni dónde terminaríamos.
DESTACADO
Prácticamente todas las rutas que hemos realizado acumulan aspectos positivos. La presente estuvo muy bien como experiencia novedosa. Sin apoyo técnico y bajo condiciones externas difíciles, nos puso a prueba.
Tuvimos que tomar decisiones importantes sobre la marcha, al notarnos perdidos y expuestos a percances. Bueno, acaso no fuera para tanto. Si no quedaba otro remedio que dar media vuelta, el propio arroyo nos serviría de referente, cual hilo de Ariadna.
Realmente, fue no sólo una estimulante exploración exterior sino también un acicate para el descubrimiento interior, el personal. No la olvidaremos, pues, en ese doble (y buen) sentido. El lugar es fantástico y la experiencia fue impactante.
No obstante, no la repetiríamos ni la aconsejamos. No en los términos que nos tocó hacerla. Repito, en cualquier caso, que el barranco de Abanza en otoño es sensacional, soberbio. Pero hay que ir preparados (…y con señal GPS).
Califico la ruta como ‘Difícil’ físicamente. En un terreno con suelo muy irregular y resbaladizo, el desnivel acumulado (558 m) no es desdeñable (14% de pendiente media). La orientación es fácil si uno se guía por el arroyo, pero salir del barranco por arriba puede ser complicado.
ANÉCDOTA
Además de las vicisitudes relatadas, todavía nos esperaba una sorpresa justo al final, en el aparcamiento de Zarcia. Mas ésta fue agradable sin paliativos (no agridulce, como la travesía previa).
Una mujer joven, sola en ese momento, se nos acerca y pregunta directamente, sin más:
--“¿Conocen la zona?”. Y agregó que no tenían cobertura telefónica. (Nosotros habíamos activado la ruta en el pueblo con antelación, aunque eso sirvió de poco, después).
Me hizo gracia su pregunta. De ‘buena’ fuente va a recabar información, pensé yo; y en qué momento. Un ciego más un ciego no hacen medio vidente.
--“Pues, sí y no”, respondí. “A las 8 de esta mañana le habría dicho a Vd. que ‘sí’, pero después de haber estado perdidos cuatro horas, tendría que admitir que ‘no’”. Como la dejé expectante (si no atónita), le pregunté por dónde pensaba ir, para intentar ayudarla.
--“Pues a dar una vuelta por el monte”, e hizo un amplio giro en derredor con el brazo.
De ello inferí que era más primeriza e inexperta que nosotros, así que añadí:
--“Hace un año hicimos la ruta del río, valle del Urbión arriba. Es sobradamente bonita y es la más segura. Para ella no hace falta una guía”. Y amplié: “Si se alejan de la línea del valle principal, mejor que vayan dejando piedrecitas o garbanzos en el suelo…. Para asegurarse el regreso, volviendo por el mismo camino…”.
Después de nuestra experiencia, aún a flor de piel, ¿qué otra cosa podía decirle? Sonrió y apareció su compañero. Nos fuimos tranquilos. Dos se apañan mejor que uno.
RUTAS CERCANAS
(*) https://es.wikiloc.com/rutas-senderismo/valle-del-urbion-desde-zarcia-88874620
https://es.wikiloc.com/rutas-senderismo/pico-trigaza-desde-pineda-de-la-sierra-94792769
https://es.wikiloc.com/rutas-senderismo/en-busca-del-remendia-en-la-sierra-de-la-demanda-112845221
https://es.wikiloc.com/rutas-senderismo/barrancos-de-la-genciana-y-la-tejera-88548223
https://es.wikiloc.com/rutas-senderismo/pradoluengo-107360384
https://es.wikiloc.com/rutas-senderismo/pico-san-millan-desde-el-manquillo-105039727
▶ Las 6 primeras seleccionan aspectos de interés (con descripción al pie).
▶ Las siguientes se ordenan según el itinerario (asociadas a cada 'waypoint').
📝 TEXTO (5 secciones):
▶ Índice IBP de la ruta,
▶ Preámbulo: antecedentes y motivos,
▶ La Ruta: recorrido y dificultades,
▶ Destacado: rasgos sobresalientes, y
▶ Anécdota: hechos curiosos.
INDICE IBP de Dificultad de la Ruta
Para Criterios y Tabla de Interpretación, Ir a:
https://www.ibpindex.com/index.php/es/
El resultado del análisis IBP es de 64 (para Senderismo): dificultad 'Media' para una preparación física 'Media'.
El cómputo del desnivel acumulado de la ruta por parte de IBP es de 596 metros (superior al que estima Wikiloc).
PREÁMBULO
Habíamos estado en la zona hacía exactamente un año (…más dos días). Recorrimos entonces el valle del Urbión desde Zarcia, río arriba (allá era aún el arroyo Mayor). Hasta donde fue posible sin tener que descalzarnos, que el agua bajaba helada e impetuosa. (*)
Plácida excursión, aquella. A cada paso nos impactaban preciosas estampas del río saltarín, con múltiples brazos deslizándose entre las pulidas rocas. Con más caudal que ahora. Y todo ello aderezado con una rutilante vegetación otoñal.
Mientras tanto, entonces, se nos iban los ojos también a los barrancos y arroyos que nutrían al río por sus costados. Alguna corta cata hicimos de alguno de ellos. Lo suficiente para fomentar el deseo de adentrarnos y explorarlos más adelante.
Algo vimos del barranco de Abanza desde abajo. Pero fue más lo que quisimos vislumbrar de su interior. Ese sería nuestro próximo objetivo en este valle para el futuro. …Hoy, por fin, era el futuro y podríamos darle cumplimiento.
Antes, para tener algún tipo de guía, consultamos un par de rutas que ‘pasaban por allí’, por su primer tercio, de camino a otro lugar. Su parte fácil. Así ocurre con la senda que luego se desvía al alto de Gárrula o al pico San Millán.
Debimos de haber buscado antes alguna ruta que se centrase en el propio barranco, desde abajo hasta arriba. Pero no lo hicimos. Sólo a posteriori, y después de los obstáculos y las penalidades sufridas, se nos ocurrió indagarlo. ‘A buenas horas…’.
Una ruta (http://sendasdeburgos.blogspot.com/2016/11/barranco-de-abanza.html) de ‘Angelbur’ recoge la exploración de ese barranco. Viendo las dificultades que tuvieron que superar para salir de él por arriba, parecía una proeza.
De haber conocido previamente lo que nos esperaba, no nos habríamos embarcado en esa gesta. O, tal vez, sí…. Pero seguro que no lo habríamos hecho de haber sabido que, antes de mediada la ruta, nuestra débil señal GPS desaparecería totalmente.
Finalmente, quedamos atrapados en un agreste paraje donde apenas se podía avanzar. Cada paso se eternizaaaba. El cauce del arroyo de Abanza, encerrado entre inclinados taludes de aspecto inexpugnable (así los magnificábamos), parecía una ‘ratonera’.
Pero eso forma ya parte de la ruta. Vamos a ella; lo que se pudo.
⚠️⚠️⚠️ LA RUTA
Duración de la ruta: 3 horas 45 minutos (desde las desde 8:20 a las 12:05 h)
Perdimos la señal de navegación hacia el km 2,5. Eso nos obligó a reconstruir después todo el trayecto; nada más regresar a casa. Ese trazado es el que aquí presentamos; como orientativo. Es posible, pues, que haya alguna imprecisión.
La excursión parte del área de Zarcia, al sur de Santa Cruz del Valle Urbión. Siguiendo el curso ascendente del río, enseguida tomamos un desvío a la derecha que señala ‘Senda del San Millán y Alto de la Gárrula’. Un poco más y, en el cerro del Escobar, entramos en el barranco de Abanza.
Allí hay que seguir el arroyo hasta un rústico puente de troncos. Luego habrá que ir cambiando de lado en varias ocasiones, buscando la orilla transitable. Tiene su gracia ese trasiego durante un tiempo. El caudal no era grande y se podía saltar de piedra en piedra (con más agua se complicará el vadeo).
Aún íbamos bien. Algo de senda quedaba, aunque tenue y cubierta de hojarasca, para ver por dónde moverse. La señal GPS se debilitaba: en la pantalla de Wikiloc ya no aparecía nada del terreno ni el arroyo; sólo la marca del trazado y una flecha sobre fondo blanco.
Cuando entrábamos en la parte más dura del trayecto, la flecha se detuvo definitivamente y la señal desapareció. Justo entonces, se volvió invisible cualquier rastro de senda. Caminábamos, no diré que ‘a ciegas’, porque nuestros ojos conservaban la vista, pero sí ‘a tientas’.
No es sólo que no supiéramos por dónde seguir unos metros más allá. Es que ni siquiera sabíamos dónde pisábamos en cada momento. Una espesa capa de hojas arremolinadas ocultaba regatos y charcos, agujeros entre las piedras y ramas secas. Nos hundíamos hasta más arriba de las rodillas.
Varias veces nos caímos. Debajo de la hojarasca, las piedras musgosas y el barrillo eran muy resbaladizos. En esas condiciones (sin señal GPS ni cobertura telefónica), con riesgo de daños, en un lugar tan agreste, y sin saber a dónde llegaríamos en caso de seguir subiendo, la sensatez se impuso.
“Esta odisea es emocionante, pero también peligrosa. Hay que dar marcha atrás”. Además, al día siguiente era domingo y había que aprovechar haciendo otra ruta otoñal (“…que el otoño se va…. Hasta dentro de un año, …al menos”).
No quedaba sino regresar bajando por donde habíamos subido. Pero, ya bastante abajo, llegados al cartel que indica 'Senda del San Millán', sentimos la necesidad de un complemento: vistas al exterior. Hasta allí, el estimulante encierro había terminado volviéndose opresivo.
Decidimos, pues, subir por la Senda del San Millán. La parte inicial de hayedo va trocándose en pinar, y luego en escobonal. Los espigados ejemplares apenas dejan ver el exterior. La subida tiene una considerable pendiente. Sin panorámicas de excelencia, llegados a un punto elevado, iniciamos el descenso y regreso al punto de partida.
Mirando después el mapa, al parecer, por muy poco no llegamos al alto de Gárrula. Eso sí habría sido un logro para nuestras aspiraciones de espacios abiertos. Pero, sin señal alguna, no nos atrevimos a continuar porque no sabíamos dónde estábamos ni dónde terminaríamos.
DESTACADO
Prácticamente todas las rutas que hemos realizado acumulan aspectos positivos. La presente estuvo muy bien como experiencia novedosa. Sin apoyo técnico y bajo condiciones externas difíciles, nos puso a prueba.
Tuvimos que tomar decisiones importantes sobre la marcha, al notarnos perdidos y expuestos a percances. Bueno, acaso no fuera para tanto. Si no quedaba otro remedio que dar media vuelta, el propio arroyo nos serviría de referente, cual hilo de Ariadna.
Realmente, fue no sólo una estimulante exploración exterior sino también un acicate para el descubrimiento interior, el personal. No la olvidaremos, pues, en ese doble (y buen) sentido. El lugar es fantástico y la experiencia fue impactante.
No obstante, no la repetiríamos ni la aconsejamos. No en los términos que nos tocó hacerla. Repito, en cualquier caso, que el barranco de Abanza en otoño es sensacional, soberbio. Pero hay que ir preparados (…y con señal GPS).
Califico la ruta como ‘Difícil’ físicamente. En un terreno con suelo muy irregular y resbaladizo, el desnivel acumulado (558 m) no es desdeñable (14% de pendiente media). La orientación es fácil si uno se guía por el arroyo, pero salir del barranco por arriba puede ser complicado.
ANÉCDOTA
Además de las vicisitudes relatadas, todavía nos esperaba una sorpresa justo al final, en el aparcamiento de Zarcia. Mas ésta fue agradable sin paliativos (no agridulce, como la travesía previa).
Una mujer joven, sola en ese momento, se nos acerca y pregunta directamente, sin más:
--“¿Conocen la zona?”. Y agregó que no tenían cobertura telefónica. (Nosotros habíamos activado la ruta en el pueblo con antelación, aunque eso sirvió de poco, después).
Me hizo gracia su pregunta. De ‘buena’ fuente va a recabar información, pensé yo; y en qué momento. Un ciego más un ciego no hacen medio vidente.
--“Pues, sí y no”, respondí. “A las 8 de esta mañana le habría dicho a Vd. que ‘sí’, pero después de haber estado perdidos cuatro horas, tendría que admitir que ‘no’”. Como la dejé expectante (si no atónita), le pregunté por dónde pensaba ir, para intentar ayudarla.
--“Pues a dar una vuelta por el monte”, e hizo un amplio giro en derredor con el brazo.
De ello inferí que era más primeriza e inexperta que nosotros, así que añadí:
--“Hace un año hicimos la ruta del río, valle del Urbión arriba. Es sobradamente bonita y es la más segura. Para ella no hace falta una guía”. Y amplié: “Si se alejan de la línea del valle principal, mejor que vayan dejando piedrecitas o garbanzos en el suelo…. Para asegurarse el regreso, volviendo por el mismo camino…”.
Después de nuestra experiencia, aún a flor de piel, ¿qué otra cosa podía decirle? Sonrió y apareció su compañero. Nos fuimos tranquilos. Dos se apañan mejor que uno.
RUTAS CERCANAS
(*) https://es.wikiloc.com/rutas-senderismo/valle-del-urbion-desde-zarcia-88874620
https://es.wikiloc.com/rutas-senderismo/pico-trigaza-desde-pineda-de-la-sierra-94792769
https://es.wikiloc.com/rutas-senderismo/en-busca-del-remendia-en-la-sierra-de-la-demanda-112845221
https://es.wikiloc.com/rutas-senderismo/barrancos-de-la-genciana-y-la-tejera-88548223
https://es.wikiloc.com/rutas-senderismo/pradoluengo-107360384
https://es.wikiloc.com/rutas-senderismo/pico-san-millan-desde-el-manquillo-105039727
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Comments (2)
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Me dejáis sorprendido. Yo subí por junto al arroyo de Abanza hasta sus fuentes y no tuve ningún problema. Es cierto que no hay sendero, pero el hayedo es limpio (sin maleza) y se sube bien. Antes de los 1500 metros de altitud, poco después de unas cascaditas, sales a un bonito camino que enlaza con la majada Gárrula. Lo recuerdo con agrado. En ningún momento perdí la señal de GPS del teléfono móvil. Os recomiendo usar alguna aplicación como "Mapas de España" del IGN (Instituto Geográfico Nacional) en la que puedes cargar previamente la zona por donde vas a transitar y no necesitarás conexión a internet para visualizar el mapa.
Un saludo.
Muchas gracias por tu comentario, manuelsola; y por tu sugerencia.
No somos de los que nos quejamos por cualquier cosa (yo diría que ni por nada, incluidas las incomodidades). Nos encantan las dificultades y la aventura (y el campo y el monte a través).
Te ponen a prueba, sacando de ti mismo facultades que desconocías. Pero, a veces, la razón tiene que imponerse a la pasión, cuando hay peligro real. Allí, 'vimos las orejas al lobo'.
Fue una buena experiencia. Inolvidable.
Saludos.