Barranco del Chorrillo por Mirador del Barranco de la Hoz

Barranco del Chorrillo es como llaman en Cuevas Labradas a la parte encañonada del Barranco de Corbalán que hoy pretendíamos recorrer en su totalidad. Pero al llegar a unas pozas con bastante agua nos lo hemos replanteado ante la posibilidad de seguir y tener que regresar desde mas lejos.
El Barranco de Corbalán es el colector de una serie de cauces que drenan varias de las vertientes del Cabigordo. Hoy hemos podido comprobar que hace su papel, ya que llevaba agua de las lluvias de la semana pasada.
Haremos una ruta por este barranco y algunos de sus afluentes, hoy todos llevando agua.
Salimos de la ermita de San Antonio a un kilometro de Corbalán y seguimos el camino de Villalba Baja. Aqui discurre entre los barrancos de Corbalán a la derecha y Peralejo a la izquierda. Aunque están ocupados por campos plantados de cereal, el agua discurría en superficie.
Poco antes de cruzar el barranco Ancho dejamos el camino para seguir otro que nos introduce en el barranco de Corbalán a la altura de una balsa.
Ahora seguiremos el cauce sorteando la corriente de agua. Cuando empieza a cerrarse el barranco enlazamos con el sendero local al mirador del Barranco de la Hoz, que usaremos hasta alcanzarlo.
Después de un tramo por el fondo, el sendero sube a una especie de istmo que separa el barranco de Corbalán y el de la Cañada. Por aquí sigue la senda hasta alcanzar el alto de los Castillejos donde esta el magnífico mirador. Lo que se ve alrededor son los restos de un poblado íbero.
El mirador tiene unas vistas de 360 º. Delante tenemos el barranco de Corbalán y detrás la Rambla de la Hoz y el barranco de la Cañada.
Seguimos los ligeros rastros y algunos hitos para bajar a la confluencia de los barrancos.
A mitad bajada nos asomamos a un mirador sobre el salto que cierra el barranco del Chorrillo o Rambla de la Hoz. Hoy se veia agua y todas las pozas estaban llenas.
Después nos hemos despistado un poco y hemos atravesado una pedrera que el sendero rodeaba, como hemos comprobado a la vuelta. Recuperada la senda baja junto a unos paredones y rodea un dedo rocoso antes de acabar en el fondo del Barranco de Corbalán cerca de donde se le une la Rambla de la Hoz.
La idea inicial era seguir a partir de aqui el TE SL 50 que recorre todo el cañón y volver por un camino. Pero después de un tramo de ir sorteando el agua que corría hemos llegado a una zona bastante cerrada donde el agua daba varios pequeños saltos y había varias pozas que atravesar si queríamos seguir. Era la primera vez que lo hacíamos y no sabíamos lo que venia después. Además de los excursionistas que lo habían hecho, parecía que nadie lo hizo con agua.
El sitio era bueno para almorzar y hacer un pediluvio, y tras el descanso nos hemos dado la vuelta.
Ahora si que subimos por la senda adecuada hacia el mirador. Pero cuando llega a las terrazas se difumina, pero es la zona mas sencilla.
Una vez en el sendero del mirador lo seguiremos hasta un collado donde lo dejamos para bajar a una balsa en el barranco de la Cañada que remontamos entre prados, sabinas y campos hasta alcanzar un camino junto a dos grandes sabinas. Lo seguimos a la derecha hasta enlazar nuevamente con el sendero marcado, que no abandonaremos hasta llegar a la ermita de San Antonio.
La cantidad de agua que no nos ha dejado seguir le ha dado otro encanto a todos los barrancos que hoy corrían.
El paisaje estaba ocupado por un inmenso croma, sobre el que destacaba el verde oscuro de las magníficas sabinas albares que delimitan los verdes sembrados.
Lo normal es encontrar estos cauces secos, salvo tras grandes precipitaciones como las de la semana pasada. Pensábamos que ya se habría escurrido toda la precipitación. Ya la haremos como la teníamos prevista.