BARRUELO DE SANTULLAN

Ruta realizada por el grupo de senderismo SERMAR el 08/02/2014 (Guía Mila)
La historia de Barruelo de Santullán está muy ligada a la Compañía de los Caminos de Hierro del Norte de España que inició la explotación de los yacimientos de Barruelo y Orbó hacia 1860. Esto supuso que la producción minera de Barruelo se dedicó a un único uso, el de los ferrocarriles, abandonando otras posibles industrias (como el gas). La cercanía a la línea Madrid-Irún y la calidad del carbón (hulla semigrasa) convirtió la localidad en un importante centro de la cuenca minera palentina. Esto trajo consigo la necesidad de mano de obra.
En 1941 se nacionaliza la explotación de las minas y las líneas ferroviarias, creándose RENFE, que en 1950 se aseguró la exclusividad de la producción. La desaparición en 1965 del tren de vapor, con la electrificación de la mayoría de las líneas, provocó el declive de este pueblo minero.
Así la demografía de este pueblo ha variado, en 1930 contaba con 8695 habitantes; 7223 en 1960; y tan solo 1479 censados en 2010.
Iniciamos la ruta desde la parte norte de la localidad. Concretamente desde la calle los cuarteles (a 1037 mts de altitud). Tomamos dirección Norte hasta que alcanzamos el río Rubagón. Estamos en el puente de Peñacorva. Cruzamos el puente y enseguida nos encontramos una bifurcación. Seguimos la pista de la derecha, por la indicación del “Calero de Brañosera”, atravesando por un paso canadiense.
Aquí comenzamos una ascensión de unos 6 kms de longitud y un desnivel de 358 mts. El camino no ofrece posibilidad de pérdida. Es cuestión de seguir la pista forestal que se adentra por un bosque de robles, con algunos ejemplares de un importante porte.
Abajo a nuestra derecha vamos dejando la localidad de Barruelo de Santullán. Un poco más adelante empezamos a contemplar ya, en el valle a nuestra derecha, la localidad de Brañosera.
En unos 3,5 kms nos encontramos una caseta. Se trata de una edificación que se levantó en este lugar para dar servicio a la mina El Calero de Brañosera, que estuvo abierta entre 1981 y 1983. Después de cerrar la explotación minera esta caseta se dejó para uso particular por lo que se encuentra cerrada. No obstante, en el exterior, hay una mesa con bancos y una barbacoa.
Continuamos por la pista otros 2,5 kms hasta alcanzar el arroyo Pamporquero. Desde lo alto, por la margen derecha del arroyo, baja una línea de alta tensión. Aquí hay un bonito puente de madera que nos permite cruzar a la otra orilla.
Una vez que hemos cruzado, tomamos la pista a nuestra derecha en ligero ascenso, pero pronto comenzamos a descender en dirección a Brañosera. De nuevo es cuestión de seguir la pista que realiza dos o tres pronunciados zig-zag.
En 1,5 kms llegamos a otro puente de madera sobre el mismo arroyo Pamporquero. Seguimos de frente por la pista y en unos 800 mts llegamos hasta otro puente de madera, ahora sobre el río Rubagón. Este río nace muy cerca, en la Sierra de Híjar, entre los picos El Cueto y Valdecebollas. Estos picos los hemos ido viendo completamente nevados a lo largo de todo lo que llevamos de ruta.
Desde aquí, la pista nos conduce rápidamente en otros 800 mts, hasta Brañosera.
Brañosera es una bella localidad que también ha sido víctima de la despoblación tras el cierre de las minas. En 1930 contaba con 2225 habitantes y en 1991 tenía censados tan solo 287. Cuenta con la primera carta puebla, "el Fuero de Brañosera", fechada/o el 13 de octubre del año 824, por lo que constituye formalmente la primera organización administrativa local, el germen de los actuales ayuntamientos.
Para continuar, pasamos junto a la iglesia de Santa Eulalia, de un primitivo arte románico que conserva intactos el muro sur y su espadaña, siendo el resto del edificio del siglo XVIII.
Un par de calles más abajo tomamos la calle de la derecha. Pasamos junto a la ermita y seguimos las indicaciones de la ruta SL P5. Cruzamo el arroyo Merdero por un pequeño puente de piedra.
Ahora nos adentramos en un bonito robledal. La carretera P-220 la tenemos un poco más arriba a nuestra izquierda y a nuestra derecha, por el fondo el valle, discurre el río Rubagón.
Tras avanzar 1,2 kms nos desviamos por el camino de la derecha (siguiendo las indicaciones del SL P5), ya que el camino que va de frente sale a la carretera.
Otros 1,1 kms, atravesando prados vallados, y llegamos a un estupendo área recreativa, "La Pedrosa", donde hay gran cantidad de mesas con bancos, barbacoas, piscinas y zona deportiva.
Seguimos la pista otros 500 mts y llegamos a la carretera P-220. Seguimos por nuestra derecha otros 500 mts más, hasta alcanzar la calle de los Cuarteles en Barruelo de Santullán, donde iniciamos y ahora terminamos la ruta.