Beas de Granada - Cordel del Collado de Puerto Blanco- Vereda del Barranco del Abogado- Granada.
near Beas de Granada, Andalucía (España)
Viewed 2800 times, downloaded 59 times
Trail photos
Itinerary description
El origen de este camino puede situarse en época romana momento en que se explotan los denuncios auríferos de la zona de Jesús del Valle y el Cerro del Sol.
Este camino aparece en la cartografía histórica desde el siglo XVI. Estuvo en uso en época medieval. Su trazado y anchura ha sido modificado a lo largo de los siglos. El tramo más cercano al Llano de la Perdiz fue utilizado como vía pecuaria. Esta vereda se sitúa en la Dehesa el Generalife. Forma parte del conjunto de los caminos históricos del territorio Alhambra.
Para poder realizar esta ruta tomaremos el autobús de línea de Granada a Beas de Granada, de la compañía de transportes Trinidad Nievas, en la parada que se encuentra en la Calle Capitán Moreno (junto al Triunfo). En este punto terminará nuestra ruta. Más información de horarios en:
http://siu.ctagr.es/horarios_lineas_tabla.php?linea=703
El bus nos dejará en la plaza del Ayuntamiento de Beas; desde aquí nos dirigiremos a la Iglesia. La iglesia parroquial de la Inmaculada es un templo del siglo XVI, aunque su fábrica actual es del siglo XX. Es el edificio más destacado de Beas de Granada.
En Beas de Granada se construyó una primera iglesia entre 1530 y 1540, que fue saqueada y quemada por los moriscos durante su rebelión, quedando en pie solo la torre. Se reconstruyó en 1645, siguiendo el modelo mudéjar de la anterior, pero la mala construcción propició su derrumbamiento años antes de la Guerra Cilvil y por ello fue levantada de nuevo en 1948 alrededor de la torre, con las piedras de los restos del castillo árabe que desapareció así totalmente.
Durante gran parte del recorrido disfrutaremos de una vistas de la cara norte de Sierra Nevada muy espectaculares.
Tras abandonar el casco urbano de Beas, ascendemos por un camino de tierra que coincide con la cañada real Cordel del Collado de Puerto Blanco. Pasaremos en primer lugar por el barranco del Paraíso y posteriormente ns quedamos admirados por el paisaje que nos ofrece el Barranco de Cañizares y divisamos las terreras de Dúdar. Se trata de un espectacular badlands o tierra baldía que determina un paisaje fuera de lo normal.
Estas formaciones peculiares esculpidas por el agua, el viento y el frío, contaban con unos diminutos huéspedes; numerosos pajarillos revolotean las impresionantes paredes verticales de las terreras de Dúdar. En algunos puntos, el talud es completamente vertical. Impresiona la imagen que obtenemos desde el borde de estos tajos de arena.
Seguidamente llegaremos a la cota máxima de esta ruta el Alto de las Tres Torres de 1183 metros. A este punto llega el Desafío Mtb Ciudad De Cenes ‘Alto De Las Tres Torres’.
Descenderemos pasando por el Cerro de las Tres Cruces y por La Loma de las Piedras, con vistas a la población de Dúdar. Pasaremos por la Loma de la Peña de los Agujeros; dejando dos valles a cada lado; a la derecha el del Arroyo de Belén y a la izquierda el del Rio Aguas Blancas.
En todo este tramo de camino no encontramos arboleda; creemos que es debido a algún incendio; ya que se observan indicios del fuego. Solo encontramos bajo matorral mediterráneo con Jaras, retamas, romeros, Jaguarzos moriscos, algunas orquídeas…
Encontramos el cartel de señalización de conexión con la Vereda del Barranco del Abogado. En este punto se unen el cordel y la vereda. A continuación, la ruta continúa por la Vereda del Barranco del Abogado. Al fondo observamos el bosque del paraje de Cortes. En algunos puntos dicha señalización puede llegar a ser confusa.
En algún tramo el camino ha sufrido las consecuencias de riadas anteriores. Se encuentra en mal estado a consecuencia de numerosas barranqueras. Pero, salvo un par de tramos, el estado del camino es notablemente bueno porque ha sufrido labores de reparación. Destacar la repoblación del camino con pinos, encinas y plantas aromáticas. También encontramos numerosos hitos o mojones de color blanco que delimitan lindes y territorios y que van marcando el camino como centinelas inmóviles.
Al fondo comenzamos a distinguir la inconfundible meseta del llano de la perdiz, el Valle del Rio Darro, La Abadía del Sacromonte y los cipreses del Albaycín.
Algo más abajo, a lo lejos, en el valle divisamos Jesús del Valle, junto al Rio Darro. La Hacienda-Cortijo de Jesús del Valle es uno de los mejores ejemplos de haciendas y cortijos del XVII-XVIII en Granada en donde no es frecuente encontrar arquitecturas de calidad que respondan a esta tipología de la que representa un modelo ejemplar como sistema de producción ligado a un período histórico concreto, a un sistema cultural y a una forma de vida, que desaparece con los procesos productivos nacidos de la revolución industrial.
Después, junto al camino, encontraremos un gran tapial que es el Canal de Los Franceses. El “Canal de los Franceses” estuvo constituido por dos conducciones de agua, derivadas del río Beas (Canal de Beas-Almecín) -perteneciente a la cuenca del Darro- y del río Aguas Blancas (Canal de Aguas Blancas, de Quéntar, de Cenes o de La Lancha), tributario del Genil. En su conjunto fueron puestos en servicio en el último cuarto del siglo XIX por la “Sociedad Anónima de los Terrenos Auríferos de España”.
Su finalidad fue el abastecimiento hidráulico a las labores mineras de extracción del oro aluvial del Cerro del Sol, promontorio elevado en cuyo espolón más occidental fue establecida la Alhambra por la dinastía nazarí. Sin embargo, la historia de este aprovechamiento hidráulico se remonta muchos siglos atrás, pues el Canal de Beas-Almecín se superpuso a una acequia puesta en servicio por Muḥammad V en la segunda mitad del siglo XIV. A su vez, ésta reutilizó el trazado de un canal minero de época romana, abierto para la explotación de los recursos auríferos del Cerro del Sol.
Junto al canal encontramos una encina centenaria que nos indica el inicio del ascenso al llano de la perdiz. Llegaremos a una gran cancela abierta que es la portada de entrada al parque periurbano de la dehesa del Generalife y del Llano de la Perdiz. Andaremos por tierras rojizas rodeados de los encinares del Llano de la perdiz.
Cruzaremos un campo de futbol para seguir con las indicaciones de la Vereda del Barranco del Abogado, que ahora transita por una pista ancha que se mete en un pinar, y que nos hace descender por el Barranco Bermejo hasta las inmediaciones del Cementerio de Granada.
Como andamos escasos de agua y nos apetece algo para refrescarnos, decidimos alejarnos un poco del recorrido; para volver a él después, para comprar en las inmediaciones de la Alhambra agua y unos helados. Para ello bajamos por los jardines de los aparcamientos y subimos por el paseo de la Sabica; y al llegar a la rotonda dos desviaremos por una pista de tierra que nos conducirá a la Calle del Barranco del Abogado.
A uno de los lados de La Alhambra se asienta una de las barriadas con más historia de la capital y quizá, también la más desconocida. El Barranco del Abogado lleva en pie desde la época Nazarí y por sus calles pasaron personajes tan ilustres como el Rey Boabdil, quien en 1492 salió de la Torre de los Siete Suelos hacia su exilio alpujarreño, utilizando este barrio -llamado por aquel entonces Rabad al Nayd- como camino para seguir hacia la Ermita de San Sebastián, Parrilla, Paseo de los Basilios y Violón. Tan curioso nombre tiene, según los archivos históricos recuperados por la Asociación de Vecinos del lugar, dos vertientes.
Una es que recibió el apelativo porque fue el sitio donde asesinaron a un letrado de la Chancillería -el abogado veinticuatro-. La otra leyenda cuenta que tal denominación se debe a que estos terrenos fueron recibidos por un abogado, en 1623, como pago de sus honorarios en un pleito ruinoso que finalmente ganó.
Sea como fuere, este espacio alberga, a día de hoy, a más de cuatro mil personas, distribuidas por todo el perímetro. Aunque los vecinos reconocen que ha sido una de las zonas «más olvidadas y castigadas» de la capital, ya que las lluvias de 1949, 1954, 1955 y las del 16 de febrero de 1963 -el día más lluvioso del siglo XX en Granada- ocasionaron inundaciones y deslizamientos de tierra, favorecidos por la escasa vegetación. El hundimiento de las cuevas provocó el desahucio forzoso del 90% de las familias del Barranco. El barrio quedó prácticamente deshabitado.
Los habitantes del lugar no contaron con agua potable hasta 2001, momento en el que se fundó la asociación vecinal y, juntos, se pusieron, nunca mejor dicho, «manos a la obra». No obstante, y antes de esa fecha, en 1920, los 'barranqueros' pudieron disponer de agua no potable, sin necesidad de desplazarse. «El empresario Ricardo Martín construyó un pilar y costeó la canalización y conducción del agua, cedida por el que fuera propietario del Carmen de los Mártires, Hubert Meersmans.
Seguiremos la Calle Barranco del Abogado hasta la Plaza de Joe Strimmer. La ruta seguiría por las escaleras de la Cuesta Molinos hasta el paseo de la Bomba donde terminaría el recorrido pero nosotros decidimos ir por la cuesta Calle vistillas de los Ángeles para adentrarnos en el Barrio del Realejo, Calle Molinos, Campo del Príncipe y Casa de los Tiros.
Nos dirigimos a Bodegas La Mancha donde nos pusimos las botas; esto de andar da mucha hambre. Después, por la Calle Elvira, nos dirigiremos al punto donde tomamos el bus en el inicio de la ruta; y donde la damos por concluida.
Este camino aparece en la cartografía histórica desde el siglo XVI. Estuvo en uso en época medieval. Su trazado y anchura ha sido modificado a lo largo de los siglos. El tramo más cercano al Llano de la Perdiz fue utilizado como vía pecuaria. Esta vereda se sitúa en la Dehesa el Generalife. Forma parte del conjunto de los caminos históricos del territorio Alhambra.
Para poder realizar esta ruta tomaremos el autobús de línea de Granada a Beas de Granada, de la compañía de transportes Trinidad Nievas, en la parada que se encuentra en la Calle Capitán Moreno (junto al Triunfo). En este punto terminará nuestra ruta. Más información de horarios en:
http://siu.ctagr.es/horarios_lineas_tabla.php?linea=703
El bus nos dejará en la plaza del Ayuntamiento de Beas; desde aquí nos dirigiremos a la Iglesia. La iglesia parroquial de la Inmaculada es un templo del siglo XVI, aunque su fábrica actual es del siglo XX. Es el edificio más destacado de Beas de Granada.
En Beas de Granada se construyó una primera iglesia entre 1530 y 1540, que fue saqueada y quemada por los moriscos durante su rebelión, quedando en pie solo la torre. Se reconstruyó en 1645, siguiendo el modelo mudéjar de la anterior, pero la mala construcción propició su derrumbamiento años antes de la Guerra Cilvil y por ello fue levantada de nuevo en 1948 alrededor de la torre, con las piedras de los restos del castillo árabe que desapareció así totalmente.
Durante gran parte del recorrido disfrutaremos de una vistas de la cara norte de Sierra Nevada muy espectaculares.
Tras abandonar el casco urbano de Beas, ascendemos por un camino de tierra que coincide con la cañada real Cordel del Collado de Puerto Blanco. Pasaremos en primer lugar por el barranco del Paraíso y posteriormente ns quedamos admirados por el paisaje que nos ofrece el Barranco de Cañizares y divisamos las terreras de Dúdar. Se trata de un espectacular badlands o tierra baldía que determina un paisaje fuera de lo normal.
Estas formaciones peculiares esculpidas por el agua, el viento y el frío, contaban con unos diminutos huéspedes; numerosos pajarillos revolotean las impresionantes paredes verticales de las terreras de Dúdar. En algunos puntos, el talud es completamente vertical. Impresiona la imagen que obtenemos desde el borde de estos tajos de arena.
Seguidamente llegaremos a la cota máxima de esta ruta el Alto de las Tres Torres de 1183 metros. A este punto llega el Desafío Mtb Ciudad De Cenes ‘Alto De Las Tres Torres’.
Descenderemos pasando por el Cerro de las Tres Cruces y por La Loma de las Piedras, con vistas a la población de Dúdar. Pasaremos por la Loma de la Peña de los Agujeros; dejando dos valles a cada lado; a la derecha el del Arroyo de Belén y a la izquierda el del Rio Aguas Blancas.
En todo este tramo de camino no encontramos arboleda; creemos que es debido a algún incendio; ya que se observan indicios del fuego. Solo encontramos bajo matorral mediterráneo con Jaras, retamas, romeros, Jaguarzos moriscos, algunas orquídeas…
Encontramos el cartel de señalización de conexión con la Vereda del Barranco del Abogado. En este punto se unen el cordel y la vereda. A continuación, la ruta continúa por la Vereda del Barranco del Abogado. Al fondo observamos el bosque del paraje de Cortes. En algunos puntos dicha señalización puede llegar a ser confusa.
En algún tramo el camino ha sufrido las consecuencias de riadas anteriores. Se encuentra en mal estado a consecuencia de numerosas barranqueras. Pero, salvo un par de tramos, el estado del camino es notablemente bueno porque ha sufrido labores de reparación. Destacar la repoblación del camino con pinos, encinas y plantas aromáticas. También encontramos numerosos hitos o mojones de color blanco que delimitan lindes y territorios y que van marcando el camino como centinelas inmóviles.
Al fondo comenzamos a distinguir la inconfundible meseta del llano de la perdiz, el Valle del Rio Darro, La Abadía del Sacromonte y los cipreses del Albaycín.
Algo más abajo, a lo lejos, en el valle divisamos Jesús del Valle, junto al Rio Darro. La Hacienda-Cortijo de Jesús del Valle es uno de los mejores ejemplos de haciendas y cortijos del XVII-XVIII en Granada en donde no es frecuente encontrar arquitecturas de calidad que respondan a esta tipología de la que representa un modelo ejemplar como sistema de producción ligado a un período histórico concreto, a un sistema cultural y a una forma de vida, que desaparece con los procesos productivos nacidos de la revolución industrial.
Después, junto al camino, encontraremos un gran tapial que es el Canal de Los Franceses. El “Canal de los Franceses” estuvo constituido por dos conducciones de agua, derivadas del río Beas (Canal de Beas-Almecín) -perteneciente a la cuenca del Darro- y del río Aguas Blancas (Canal de Aguas Blancas, de Quéntar, de Cenes o de La Lancha), tributario del Genil. En su conjunto fueron puestos en servicio en el último cuarto del siglo XIX por la “Sociedad Anónima de los Terrenos Auríferos de España”.
Su finalidad fue el abastecimiento hidráulico a las labores mineras de extracción del oro aluvial del Cerro del Sol, promontorio elevado en cuyo espolón más occidental fue establecida la Alhambra por la dinastía nazarí. Sin embargo, la historia de este aprovechamiento hidráulico se remonta muchos siglos atrás, pues el Canal de Beas-Almecín se superpuso a una acequia puesta en servicio por Muḥammad V en la segunda mitad del siglo XIV. A su vez, ésta reutilizó el trazado de un canal minero de época romana, abierto para la explotación de los recursos auríferos del Cerro del Sol.
Junto al canal encontramos una encina centenaria que nos indica el inicio del ascenso al llano de la perdiz. Llegaremos a una gran cancela abierta que es la portada de entrada al parque periurbano de la dehesa del Generalife y del Llano de la Perdiz. Andaremos por tierras rojizas rodeados de los encinares del Llano de la perdiz.
Cruzaremos un campo de futbol para seguir con las indicaciones de la Vereda del Barranco del Abogado, que ahora transita por una pista ancha que se mete en un pinar, y que nos hace descender por el Barranco Bermejo hasta las inmediaciones del Cementerio de Granada.
Como andamos escasos de agua y nos apetece algo para refrescarnos, decidimos alejarnos un poco del recorrido; para volver a él después, para comprar en las inmediaciones de la Alhambra agua y unos helados. Para ello bajamos por los jardines de los aparcamientos y subimos por el paseo de la Sabica; y al llegar a la rotonda dos desviaremos por una pista de tierra que nos conducirá a la Calle del Barranco del Abogado.
A uno de los lados de La Alhambra se asienta una de las barriadas con más historia de la capital y quizá, también la más desconocida. El Barranco del Abogado lleva en pie desde la época Nazarí y por sus calles pasaron personajes tan ilustres como el Rey Boabdil, quien en 1492 salió de la Torre de los Siete Suelos hacia su exilio alpujarreño, utilizando este barrio -llamado por aquel entonces Rabad al Nayd- como camino para seguir hacia la Ermita de San Sebastián, Parrilla, Paseo de los Basilios y Violón. Tan curioso nombre tiene, según los archivos históricos recuperados por la Asociación de Vecinos del lugar, dos vertientes.
Una es que recibió el apelativo porque fue el sitio donde asesinaron a un letrado de la Chancillería -el abogado veinticuatro-. La otra leyenda cuenta que tal denominación se debe a que estos terrenos fueron recibidos por un abogado, en 1623, como pago de sus honorarios en un pleito ruinoso que finalmente ganó.
Sea como fuere, este espacio alberga, a día de hoy, a más de cuatro mil personas, distribuidas por todo el perímetro. Aunque los vecinos reconocen que ha sido una de las zonas «más olvidadas y castigadas» de la capital, ya que las lluvias de 1949, 1954, 1955 y las del 16 de febrero de 1963 -el día más lluvioso del siglo XX en Granada- ocasionaron inundaciones y deslizamientos de tierra, favorecidos por la escasa vegetación. El hundimiento de las cuevas provocó el desahucio forzoso del 90% de las familias del Barranco. El barrio quedó prácticamente deshabitado.
Los habitantes del lugar no contaron con agua potable hasta 2001, momento en el que se fundó la asociación vecinal y, juntos, se pusieron, nunca mejor dicho, «manos a la obra». No obstante, y antes de esa fecha, en 1920, los 'barranqueros' pudieron disponer de agua no potable, sin necesidad de desplazarse. «El empresario Ricardo Martín construyó un pilar y costeó la canalización y conducción del agua, cedida por el que fuera propietario del Carmen de los Mártires, Hubert Meersmans.
Seguiremos la Calle Barranco del Abogado hasta la Plaza de Joe Strimmer. La ruta seguiría por las escaleras de la Cuesta Molinos hasta el paseo de la Bomba donde terminaría el recorrido pero nosotros decidimos ir por la cuesta Calle vistillas de los Ángeles para adentrarnos en el Barrio del Realejo, Calle Molinos, Campo del Príncipe y Casa de los Tiros.
Nos dirigimos a Bodegas La Mancha donde nos pusimos las botas; esto de andar da mucha hambre. Después, por la Calle Elvira, nos dirigiremos al punto donde tomamos el bus en el inicio de la ruta; y donde la damos por concluida.
Waypoints
Castle
2,685 ft
Alhambra
Provisioning
2,424 ft
Bodegas la Mancha
You can add a comment or review this trail
Comments